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Red Internacional
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Derecho al aborto. Continúa la persecución ideológica en los colegios de Jujuy

A días de que el Senado discuta el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), se refuerza la persecución e imposición ideológica en los colegios de Jujuy.

Martes 24 de julio de 2018

En este caso se trata de un hecho que tuvo lugar en la capital jujeña, específicamente en el Colegio del Divino Redentor, colegio privado y religioso, situado en el populoso Barrio Alto Comedero.

A días de finalizar el trimestre escolar y sin olvidar que luego de este receso sabremos la resolución que tome el Senado sobre el proyecto de ley IVE, en consonancia con la ofensiva que desde la Iglesia están desplegando contra el derecho de las mujeres sobre su cuerpo, las autoridades de dicho Colegio se empecinaron en “sentar” una posición como institución católica: en contra. Los directivos y junto a algunos docentes del establecimiento hicieron circular una lista con los datos de los estudiantes que asisten para que cada uno dejara constancia (firmando) de que estaban en contra del proyecto de legalización del aborto. La iniciativa se dio en un marco de presión constante, así algunos firmaron la lista, pero los que no lo hicieron fueron amenazados con sanciones por lo que un sector accedió a firmar en contra tras el hostigamiento por parte de los directivos de la institución.

La IVE despertó mucho debate y mucha avidez por parte de toda una generación, dónde la juventud que se levanta y sale a las calles con su pañuelo verde vienen mostrándose como protagonistas; en este marco no asombra el contraataque de instituciones como la Iglesia, que tiene un enorme peso en la provincia, y los colegios confesionales. Este caso es una muestra más de la persecución ideológica con la que se atacan los derechos elementales de la juventud a debatir, organizarse y luchar por sus ideas.

Esto es particularmente común en los colegios católicos, dónde a partir de obligar a los estudiantes a firmar una constancia pretenden expresar una posición “homogénea” de la institución, intentando ocultar que se trata en realidad de una imposición ideológica, que además busca suprimir las ideas de quienes piensan distinto.

Esta situación también demuestra la falta de debate democrático sobre el aborto legal y los derechos de las mujeres, ya que por un lado la mayoría de las escuelas y colegios en la provincia no cuentan con centros de estudiantes, y donde si los hay, las autoridades buscan constantemente tener injerencia directa en su funcionamiento. Y no olvidemos que estamos hablando de establecimientos dónde no se dicta educación sexual integral.

Otro debate clave con la Iglesia es que no sólo se entromete en la educación pública, sino que además cuenta con sus propios colegios privados, en los que tranquilamente desarrolla todo tipo de atropellos, como obligar a estudiantes a firmar en contra del derecho al aborto. El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, sale a “pintarse la cara de verde” declarando públicamente que hay que avanzar en la legalización de este proyecto, pero mientras cómo todos los gobiernos anteriores mantiene el financiamiento de las escuelas confesionales. Esto pone una vez más sobre la mesa la discusión sobre el enorme negocio que sostienen los gobiernos bancando la educación privada, y particularmente la confesional con la plata del Estado y por ello mismo toma mayor importancia la exigencia a la que cada vez más jóvenes adhieren sobre la separación de la Iglesia y el Estado.

El Colegio Divino Redentor se suma con estas acciones a la campaña de la Iglesia que busca que el Senado no se pronuncie a favor de la legalización del aborto, que terminaría con la muerte de las 300 mujeres que se sienten a esta práctica en la clandestinidad. Pero del otro lado se encuentra la marea verde que con el protagonismo de las y los jóvenes secundarios lograron que el proyecto todavía siga en curso. Que sean las y los jóvenes los que den un paso al frente pone en aprietos a la Iglesia que busca a través de su intromisión en escuelas y colegios “sentar” una posición a fines de que el proyecto no se apruebe. Por eso, a pocos días de que el Senado se pronuncie sobre el proyecto de IVE toda la juventud de la marea verde tiene entre sus desafíos desterrar de las escuelas al oscurantismo clerical sobre el qué se apoyan para hacer pasar en pleno SXXI este tipo de persecuciones, tarea que sólo podrán llevar adelante organizándose desde los centros de estudiantes y en comisiones de mujeres allí donde no los haya que tomen en sus manos la pelea por el aborto legal, que cómo sabemos lo vamos a ganar organizadas y en las calles.