En el contexto de la huelga general convocada el miércoles 8 de Noviembre, el movimiento estudiantil se suma. Publicamos el comunicado de No Pasarán y Pan y Rosas.
Pan y Rosas Barcelona @PanyRosasEE
Lunes 6 de noviembre de 2017
La escalada represiva del Estado español contra el movimiento democrático catalán y la ya proclamada República catalana no tiene límites. A la brutalidad policial del 1 de octubre, hay que sumarle el encarcelamiento de Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, y ahora el ingreso en prisión de 8 miembros del Govern.
La aplicación del 155 sigue avanzando con fuerza, un golpe institucional sin precedentes que se aplica con el apoyo del PP, Cs el PSOE, la Monarquía y la UE. Con unas elecciones, las del 21 de diciembre, impuestas para no reconocer el resultado del 1-O y que se llevarán en unas condiciones de excepción contra el movimiento independentista.
Contra esta ofensiva, el miércoles 8 de Noviembre el movimiento estudiantil volverá a movilizarse en defensa de la república catalana, por la libertad de las presas y presos políticos y contra el 155. Como ya vivimos el pasado 3 de Octubre, esta movilización tendrá lugar como parte de una convocatoria de huelga general.
Que la juventud, junto a la clase trabajadora, tome en sus manos la pelea democrática del pueblo catalán es la única salida posible para enfrentar la escalada represiva del Gobierno y los partidos del Régimen del 78 y favorecer un retorno de la agenda social que ha sido encajonada conscientemente desde la dirección del Procés. Que la lucha por los derechos democráticos nacionales se suelde con la lucha por resolver los grandes problemas sociales.
Desde la agrupación estudiantil No Pasarán y Pan y Rosas, participaremos en esta nueva jornada de lucha con el convencimiento de que es necesario poner un pie un movimiento estudiantil independiente, de base, horizontal y radicalmente democrático.
El objetivo es unir la lucha por el derecho a decidir con la pelea por recuperar las demandas históricas del movimiento estudiantil, como es la gratuidad de la educación y en contra de las contrarreformas que se han ido imponiendo en la última década desde el Gobierno central y la Generalitat, como el Plan Bolonia, la LEC, el tasazo del 2012, las Reválidas que todavía hoy se aplican en diferentes comunidades autónomas y en diferentes grados o el reciente 3+2 , que han expulsado a centenares de miles de estudiantes y han ido acompañadas de un enorme proceso de precarización del personal docente.
Algo así no podremos conseguirlo de la mano de los rectores y el Govern,sino poniendo en pie un movimiento estudiantil independiente de la casta universitaria y los partidos responsables de la mayor ofensiva contra la educación pública en décadas.
Para ello es fundamental impulsar asambleas en las que participen el conjunto de los y las estudiantes, que éstas estén coordinadas con los Comités de Defensa de la República en los barrios y en las que entre todos y todas discutamos con qué reivindicaciones y con qué métodos avanzamos en estas movilizaciones.
Lamentablemente el desarrollo de un proceso de autorganización así no es el plan de la plataforma convocante, Universitats per la República . Por este motivo, llamamos a que el SEPC a que rompa con este acuerdo y se ponga a la cabeza de impulsar, junto a las asambleas de facultad y las organizaciones estudiantiles de izquierda un movimiento estudiantil independiente, de base y que levante la agenda propia de la juventud.
Porque las mujeres y la juventud somos quienes más sufrimos el desempleo y la precariedad, por eso mismo necesitamos un proceso constituyente realmente libre y soberano, en el que podamos discutirlo realmente todo, también sobre los grandes problemas sociales y qué tipo de República queremos.
Este no es el proceso constituyente de Puigdemont y Junqueras. Sabemos que no podremos resolver las demandas que aún están pendientes ni recuperar los derechos que hemos perdido en la última década si no es cuestionando los intereses y privilegios de los capitalistas.
Porque queremos ponerle fin al desempleo, conquistar una universidad gratuita y sin injerencia de los bancos, queremos una república de la clase trabajadora, las mujeres y la juventud. Es decir, no una República de los capitalistas, sino una República catalana socialista donde podamos resolver los grandes problemas sociales que hoy golpean a la mayoría de la población.
¡Contra el 155 y la represión!
¡Libertad presas y presos políticos!
¡Por una universidad pública y gratuita!
¡Por un movimiento estudiantil realmente independiente y de base!
¡Luchemos por una república catalana de la clase trabajadora, las mujeres y la juventud!