Caravana Migrante. Contra los muros de género y de concreto: alianza trans-migrante

Desde el comienzo de su administración, Donald Trump demostró que su línea política no sería a favor de las minorías sino a favor del hombre americano blanco heterosexual de clase media. En esta línea es que ha lanzado políticas antimigratorias y en contra de las personas trans.

Muros de género

Con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, las políticas transfóbicas comenzaron a accionar. Se eliminó el mandato “baños trans” el cual obligaba a los recintos públicos a permitir que las personas trans accedieran al baño de su género y se prohibió la entrada de las personas trans a las fuerzas armadas.

El último ataque en esta cruzada en contra de las personas trans fue lanzado a mediados de octubre de este año con la propuesta de la administración de Trump, emitida por el Departamento de Salud y Servicios Humanos, de dar una definición de género contenida en las leyes y supuestamente basada en la ciencia.

Su propuesta es definir el género como una condición biológica e inmutable que viene determinada por los genitales al momento del nacimiento, y si existe alguna duda sobre los genitales se propone recurrir a pruebas genéticas para que sean los cromosomas los que “hablen” la “verdad sobre el sexo” de la persona.

Esta medida tendría consecuencias graves sobre 1.4 millones de personas trans al erradicar todo reconocimiento legal ganado hasta ahora y abrir la puerta a la discriminación institucional.

Esta política, que supuestamente dice basarse en la objetividad de la ciencia para construir una definición sobre género, es más bien una política que, haciendo uso de cierto discurso pseudocientífico generado por la nueva derecha, busca construir un muro de género basado en la existencia de un supuesto muro biológico infranqueable.

Sin embargo, dicha medida claramente desconoce lo que los círculos científicos hoy dicen sobre la complejidad del género, el sexo y la biología, en donde se reconoce la no binariedad del sexo y la plasticidad biológica que hace posible los tránsitos de sexo/género no sólo en el humano sino en otras especies animales.

Además, dicha medida desconoce que en la historia de la ciencia los intentos por buscar la instancia que defina de manera objetiva y absoluta el “sexo/género verdadero” de una persona han resultado en el fracaso y que más bien lo que existe es un sexo/género que es plástico y contextual.

Por el contrario, esta política sólo ayuda a promover un discurso de ignorancia sobre el género y el sexo que, a su vez, promueve la violencia y el odio hacia las poblaciones trans. Las considera como ilegales del género que intentan cruzar un supuesto muro impuesto por la biología del sexo.

Muros de concreto

Otro de los muros que Trump ha anunciado hasta el cansancio es el que busca colocarle a los migrantes. La construcción de un muro en la frontera Sur con México ha sido el slogan de toda una política y campaña xenófoba que busca frenar el flujo migratorio con muros de concreto, legales, militares y armamentísticos.

El último mes ha sido de un álgido ataque en contra de los migrantes. Desde la salida de la primera Caravana Migrante a mediados de octubre, las declaraciones de Donald Trump han buscado amedrentar el tránsito de la caravana migrante y la criminalización de la misma.

Acusándolos de “criminales” ha dicho que Estados Unidos no tolerará “una invasión de migrantes” amenazando con el despliegue de militares a la frontera con México, los cuales han recibido órdenes de disparar a matar para garantizar la seguridad de los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.

Justo la tarde de este domingo a la llegada de la Caravana Migrante a la frontera Sur, esta política se ha efectuado ya que los migrantes han sido reprimidos con gases y balas de goma.

Los migrantes hondureños, salvadoreños y guatemaltecos vienen escapando de las condiciones de violencia de los grupos delictivos y precariedad económica que hay en sus países de Centroamérica, luego de décadas de políticas neoliberales que han entregado la mano de obra y los recursos naturales a las empresas trasnacionales.

Desempleo, pobreza, violencia, anhelos de reencontrarse con familiares, o simplemente el tener una mejor vida es lo que impulsa el tránsito de los miles de mujeres, hombres, jóvenes y personas de la diversidad sexual que van en la Caravana Migrante.

Hace pocos días conocí a una mujer trans migrante de Honduras que me narraba que su tránsito principalmente era motivado para escapar de la trata y la violencia. Con el rostro y la ilusión de quien cuenta que ha realizado una gran hazaña y espera un porvenir mejor, me contó que junto con otras mujeres trans en contingente se sumaron a la Caravana LGBTI en donde fueron recibidas con ánimo y dándoles el lugar de lo que eran, mujeres.

Así como ella, y con sus distintas historias, miles de migrantes están intentando llegar a Estados Unidos. Su tránsito como condición necesaria para garantizar el derecho a la vida es lo que ahora es puesto en cuestión, criminalizado y atacado por parte del gobierno estadounidense, con la complicidad del gobierno de México.

Alianzas: trans y migrantes

Si hay algo que hoy une a los migrantes y a las personas trans es que de alguna manera ambos hacen una transición, o migración, hacia lo que consideran les es mejor para su vida. Para algunos es necesario el tránsito por los países y para otrxs es necesario el tránsito por el género. Y también hay para quienes ambos tránsitos son necesarios, como es el caso de las personas trans migrantes.

En estos tiempos en que se están levantando muros de concreto y de género que atentan contra los derechos de los migrantes y las personas trans en Estados Unidos, es importante la alianza a ambos lados de la frontera y los géneros (personas cis y trans), de los explotados y oprimidos para potenciar las demandas de ambos grupos.

¡Abajo los muros de género y de concreto!

¡Por el libre tránsito! Alianza trans-migrante

¡Ningún ser humano es ilegal!

¡Ningún género es ilegal!