Una mujer denunció que el nuevo sistema que utiliza Anses la dejó afuera a pesar de que cumple con todos los requisitos para tener el beneficio.
Domingo 13 de octubre de 2019 14:34
Valeria tiene 43 años y se hace cargo sola de sus cuatro hijos pequeños. Desde hace varios años cobra la Asignación Universal por Hijo por tres de ellos (el cuarto nació en el extranjero), ya que no ha podido conseguir trabajo en blanco. La semana pasada se encontró con que no le habían depositado el dinero correspondiente al mes.
“Llamé a Anses para preguntar por qué no había cobrado, me preguntaron si yo o el papá de los chicos éramos monotributistas o habíamos conseguido trabajo en blanco. Le dije que no, me dejaron esperando en línea y nunca más volvieron”. Fue hasta la sede de Anses con los dos últimos boletos de colectivo que le quedaban y con todo el tiempo que implica hacer la cola y esperar que la atendieran. Ahí le dijeron que el sistema nuevo que utiliza la Anses, CUNA (Cobertura Universal de Niñez y Adolescencia) le había dado de baja, aunque no le supieron decir por qué.
El sistema CUNA se implementó en agosto y centraliza el pago de las Asignaciones Familiares a Trabajadores, las que se pagaban por el Sistema de Asignación Universal, las que cobraban jubilados con hijos menores de edad o discapacitados y quienes percibían pensiones no contributivas por invalidez y desempleo. Ese mes hubo cientos de beneficiarios que se encontraron con problemas a la hora de cobrar.
“Me dijeron que tenía que hacer un reclamo, pero mientras tanto ¿qué le digo a mis hijos? ¿Qué hasta que salga un trámite burocrático no comemos? Armé un escándalo hasta que se fijaron bien con mi DNI y el del papá de los chicos que ninguno trabaja. Al parecer, este nuevo sistema le asignó al cobro a él, cuando yo me separé este año por violencia de género, es muy injusto todo. Me dijeron que tienen las manos atadas, que han tenido un montón de problemas, pero nadie se entera porque la gente está resignada ya. Yo estuve preguntando en Facebook y hay un montón de mujeres que han tenido el mismo problema. Un mes cobran y al mes siguiente les dicen que las sacaron del sistema porque no presentaron los papeles, o no les dan ninguna explicación”.
Finalmente, en Anses le dijeron que lleve un papel que certifique que sufre violencia de género para que el dinero lo vuelva a cobrar ella. “Me fui hasta el Polo de la Mujer, donde me están atendiendo una psicóloga y una asistente social por el tema de la violencia de género. Yo ahí estoy cobrando un plan Vida Nueva pero recién lo depositan a fin de mes, por eso no tenía nada de plata. Pedí hablar con una abogada y se quedó helada cuando le conté lo que había pasado. Ella me consiguió un poco de plata y un bolsón de comida, pero los chicos van al colegio, hay que lavarles la ropa y comprarles útiles, no sé cómo voy a hacer. La Asignación es la única plata con que cuento, el resto del mes voy pidiendo ayuda y cuando cobro pago lo que puedo. En el almacén avisé que no les iba a poder pagar lo que debo porque no tengo plata, o sea que ni siquiera puedo sacar fiado”.
Valeria cuenta además que hace mucho tiempo que no tiene un trabajo fijo o en blanco. “Mucha gente dice que busquemos trabajo, que somos unos vagos. Pero no es así, yo trabajé mucho tiempo: de niñera, en jardines, limpiando casas, tuve un bar. Ahora tengo 43 años y no tengo experiencia en comercio, es muy difícil encontrar algo. Además estudio, con lo difícil que es teniendo hijos y sin trabajo. Me falta solo la tesis, pero este año dejé todo en pausa por la separación. Estoy yo sola con mis hijos, el padre no se hace cargo de manera regular. La verdad me siento totalmente desamparada y vulnerada, me costó un montón separarme por violencia de género y ahora resulta que le quieren dar la plata a mi ex. Esto es producto de un gobierno que no hace otra cosa que fortalecer el patriarcado, el machismo y el odio a los pobres”.