Ayer 20 de los 40 trabajadores no pudieron ingresar a la oficina. Les informaban que se encontraban despedidos. No hay causa en los mismos y algunos fueron comunicados solo de manera verbal.
La Izquierda Diario @izquierdadiario
Jueves 11 de febrero de 2016
Fotografía: Ramiro Pereyra
En el día de ayer no hubo atención en el Centro de Documentación de la estación de trenes de barrio Alta Córdoba, tras el despido de 20 empleados. Los 20 trabajadores, que corresponden al 50% de los empleados de la dependencia, no pudieron ingresar a trabajar por lo que decidieron tomar las instalaciones en rechazo a la medida.
En una entrevista, el delegado Jorge Sica de UPCN indicó que “hoy a la mañana se les comunicó, a algunos de forma verbal y otros con carta documento, que cesaba su contrato de prestación de servicios en la dependencia”. Se refiere a los contratos que están bajo el artículo 9 de la Ley de empleados públicos, que niega la estabilidad laboral a los trabajadores de las dependencias estatales, que solo se consigue mediante concurso.
El mismo delegado denunció que “hace más de 14 años que no se realizan concursos en la dependencia del Registro” y agregó que “entre los despedidos se encuentra compañeros que trabajan hace más de 7 años”.
Además, ayer temprano tres personas que no se identificaron y que responden al Gobierno nacional impidieron el ingreso de los despedidos. A los trabajadores que ingresaron no les permitieron realizar sus tareas de manera normal. Producto de esta situación, los trabajadores resolvieron ocupar la oficina como medida de lucha por la reincorporación de los puestos caídos.
Por otro lado, un trabajador declaró que “un mes atrás se hizo presente en la dependencia Francisco Lozada, referente de la Juventud del PRO, con la excusa de realizar una auditoría o relevamiento del funcionamiento del Registro Civil”. Además, gracias a comentarios que recogieron de los comerciantes del mismo centro, los trabajadores pudieron constatar que Lozada realizó un trabajo de inteligencia averiguando las veces que los empleados entraban y salían del registro, y si estaban afiliados a algún partido, o realizaban alguna actividad militante.
Por fuera de toda auditoria, los trabajadores denuncian que la valoración que Lozada realizó del funcionamiento del centro fue totalmente arbitraria, sin utilizar ninguna planilla de legajo o de asistencia de los empleados, y que por ello los despidos son sin causa y a tono con el nivel de ajuste que viene realizando en gobierno nacional.
