La presidente Sheinbaum denunció a Romero como “jefe” del cartel inmobiliario, al tiempo que se anunciaron congelamiento de créditos del Infonavit.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Lunes 11 de noviembre de 2024
Desde Palacio Nacional, en la mañana de este lunes 11 de noviembre se llevó a cabo la conferencia de prensa de la presidenta Claudia Sheinbaum.
En esta ocasión participaron el titular del Infonavit, Octavio Romero Oropeza, resaltó que se hará oficial el congelamiento de los saldos y mensualidades de alrededor de 2 millones de créditos otorgados previo al año 2013 y que fueron emitidos por Veces Salario Mínimo (VSM), unidad de medida para otorgar los préstamos.
Esto debido a que “El 64% de la cartera hipotecaria se diseñó bajo un modelo en el que, a pesar de que el derechohabiente cumpliera con sus pagos, el saldo de su deuda y sus mensualidades subían cada año, haciéndola una deuda impagable. Esta injusticia afecta a 4 millones de familias”, de acuerdo con el funcionario.
A su vez, se detalló el plan para construir un millón de viviendas. La mitad para derechohabientes que coticen con 1 o 2 salarios mínimos; el resto se designarán para afiliados al CONAVI y al FOVISSSTE.
Se informó que se otorgarán 2 millones 150 mil créditos para que los mexicanos puedan obtener una casa, un terreno o la edificación de la vivienda, 1 millón 250 mil créditos destinados al mantenimiento, mejoramiento, remodelación, ampliación y equipamiento de casas.
La denuncia al cártel inmobiliario
Más adelante, la presidenta se refirió al diputado federal Jorge Romero -proclamado ganador de las elecciones internas del PAN para la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional- como “jefe del cártel inmobiliario” de la alcaldía Benito Juárez, un agrupamiento de constructoras que en colusión con altos funcionarios de Ciudad de México edificaron al menos 130 inmuebles con distintas irregularidades, como materiales de baja calidad y construir más pisos de los establecidos según las normas vigentes de seguridad en una zona de riesgo sísmico.
“Es el jefe del cártel inmobiliario el presidente del PAN, lo conocimos muy bien en la Ciudad de México. Probablemente no fueron los de abajo quienes revelaron, incluso los propios empresarios, como testigos, revelaron el modus operandi de ese grupo muy corrupto de la alcaldía Benito Juárez, entonces pues es él hoy el representante del Partido Acción Nacional y es parte del conservadurismo”, afirmó la mandataria. Subrayó también que el expresidente Felipe Calderón, en un libro, señala Jorge Romero por actos de corrupción al frente de la alcaldía Benito Juárez.
Lo cierto es que el único detenido del Cartel inmobiliario es el exdelegado de la Alcaldía Benito Juárez Christian Von Roehrich (2015-2018), quien cayó en 2023 en Reynosa, en Tamaulipas. El desarrollo urbano sigue en manos de grandes inmobiliarias y constructoras que ponen el lucro por encima de la seguridad de la población y el derecho a la vivienda.
Ni casas sin gente ni gente sin casas
El plan presentado por el gobierno de Claudia Sheinbaum busca resolver en parte problema de la vivienda, en el contexto del aumento sostenido de las rentas.
Sin embargo, para dar una solución de raíz, es necesario “previo a construir viviendas para los millones de trabajadores expropiar sin pago todo edificio que pertenezca a los poderoso grupos inmobiliarios, es la medida de conseguir casas habitación más rápidamente, pues está comprobado que en el mundo hay la vivienda suficiente para cubrir las necesidades habitacionales de todas las personas. Toda casa desocupada, departamento usado para rentistas o lugar habitacional desaprovechado tendría que estar en manos del Estado, ser ocupado por una renta social mínima, que permita que los millones que hoy sufren la penuria de gastar entre el 40 y 50% de sus ingresos en renta, puedan vivir dignamente” como sostenemos en esta nota.
Sin embargo, una medida como esta no es parte de las políticas públicas de la Cuarta Transformación. Para que la vivienda sea un derecho para todes y no una fuente de enriquecimiento de unos pocos, es necesaria la movilización de las grandes mayorías trabajadoras, de jóvenes, mujeres y pobres urbanos, que termine con la propiedad privada de los grandes magnates, de los cárteles inmobiliarios y las grandes constructoras, socialice las viviendas utilizadas para la especulación y la renta de grandes propietarios. Al mismo tiempo, las y los de abajo, organizados desde las bases, en forma democrática, podemos planificar de forma democrática el desarrollo urbano, para garantizar viviendas dignas servicios básico para el todo mundo.
