Los estudiantes de derecho cansados de las condiciones de precarización laboral, y en solidaridad con los docentes, apoyan propuestas para cambiar su situación y que nadie se quede afuera de la universidad.
Miércoles 26 de abril de 2017 14:22
Desde el primer año de gobierno la Alianza Cambiemos (PRO-UCR) no paró de atacar la educación pública. El recorte presupuestario a la UBA, avalado por casi la totalidad de los decanos, y la movilización histórica que irrumpió en las calles de estudiantes y docentes que sentimos cada vez más el ajuste en nuestros bolsillos. Esta fuerza que asomó hoy se expresa en la solidaridad que tienen los docentes en la dura pulseada con el gobierno nacional y de Alicia Kirchner en Santa Cruz y en todas las provincias; Cambiemos y el FPV tienen acuerdo en ajustar y reprimir.
Este año impulsamos clases públicas en la Facultad de Derecho en solidaridad, donde se empieza a romper la burbuja de una realidad que nos afecta a también a los estudiantes, el esfuerzo que hacemos para estudiar y trabajar.
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Muchos de los que "caimos" en la Universidad Pública somos la primera generación de universitarios en nuestras familias; estudiantes del interior, migrantes, o trabajadores del conurbano y CABA que elegimos la educación pública, "inclusiva" y de calidad. Cuando iniciamos nuestros estudios lo hicimos con grandes aspiraciones, queriendo recibirnos para transformar el mundo, contra las injusticias que caen en nosotros, pero especialmente los sectores mas oprimidos, que ni siquiera llegan a tener la chance de acceder a la universidad.
El golpe no tardó en llegar y nos encontramos con una realidad distinta: Espacios concesionados como el bar "La Barra", fotocopias y libros carísimos, oferta de cursos insuficiente y asignación en base a un promedio difícil de alcanzar para quienes trabajan. Un esfuerzo enorme para llegar con el tiempo a cursar, estudiar, comprar materiales, cargar la SUBE y llegar a fin de mes.
En la UBA hay 328.361 estudiantes. Según el último censo un 62,7% tiene que trabajar para poder mantener sus estudios y de aquellos un 42% lo hace entre 7 y 9 horas diarias. A su vez, de los que ingresan solo el 27% logra recibirse, 3 de cada 4 quedan afuera.
¿Qué trabajos nos proponen a los estudiantes?
Somos cientos los estudiantes que trabajamos en call centers, con un salario entre los 5200 a los 8400 pesos. Con contratos a Plazo Fijo o eventuales, nos obliga a mantenernos en una permanente búsqueda laboral y abandonar materias porque se nos contraponen los horarios. Otro de los empleos más comunes son los estudios jurídicos que se la llevan en pala mientras nos hacen trabajar entre 8 y 9 hs a diario sin reconocernos las horas extras en muchas oportunidades, y un salario que en general no llega ni a la mitad de la canasta básica: entre 7 y 10 mil pesos.
¿Qué nos ofrece la facultad?
Las pasantías que se ofrecen periódicamente en la página de la facultad, ninguna siquiera roza la mitad de la canasta básica: entre 4.000 y 8.000 pesos. Se justifica el bajo costo de nuestro trabajo por la “experiencia laboral” o "el conocimiento que vamos a adquirir"
A esta modalidad constante se la corona con la “invitación” que la facultad hace a las principales firmas y buffets de abogados para que pongan su stand en la planta principal de la facultad y puedan recibir los cvs de estudiantes que buscan trabajo la “Feria del empleo”. Cada firma le paga a la facultad por poner su stand. Ganancia para todos sacando “mano de obra barata” y aprovechando una necesidad de los estudiantes.
Con los llamados “becarios” que son empleados no docentes la Facultad mantiene la precarización de sus trabajadores, donde a veces cobran 4.200 pesos por mes, y ni siquiera están encuadrados como tales.
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Centro de estudiantes: aliados del macrismo en la universidad
El centro de estudiantes, desde hace décadas en manos de Nuevo Derecho o la Franja Morada, impulsa convenios y concesiones de los espacios a empresas privadas, permitiendo que los precios en las librerías, bares y fotocopiadoras sean exorbitantes. Ambas conducciones se mantuvieron en silencio frente al recorte presupuestario de la UBA, de cada clase pública y asamblea. De esta manera no hacen otra cosa que dar su apoyo político al gobierno nacional de Cambiemos mientras manejan enormes ganancias obtenidas del bolsillo de los estudiantes.
Queremos centros de estudiantes democráticos que defiendan la educación pública y acompañen los reclamos de estudiantes y docentes, como es el Centro de Estudiantes de Filosofia y Letras.
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¿Cuánto sale trabajar y estudiar en Derecho?
Si laburas en un call o procurando en un estudio, con el básico de 8.600$ por mes para bancar viajar a laburo y facultad, comprar libros y apuntes, y tomar un café con algo para bancar el estómago hasta llegar a tu casa, podes llegar a gastar entre 1500 y 2000 pesos, o más cuanto más lejos vivas de Capital, como un gran sector de estudiantes que vive en el conurbano bonaerense. Sin contar que se te ocurra querer almorzar.
¿Qué pasa con el régimen de cursada?
Si no pudiste resolver la ecuación matemática de bancar estudios con la miseria que pagan en laburos precarizados, y tuviste que recurrir a trabajar más horas, empezas a transpirar pensando que si no aprobas dos materias este año, perdés la regularidad. Así es como la facultad propone la inclusión, con un régimen de cursada que fácilmente expulsa a los estudiantes que trabajan.
Nuestra educación vale más que sus ganancias
Desde la agrupación de La Izquierda en Derecho integrada por la juventud del PTS y estudiantes Independientes proponemos reducir la jornada laboral a 6 horas, 5 días a la semana, sin reduccion salarial, partiendo de un salario igual a la canasta básica y repartiendo las horas disponibles entre los que necesiten trabajar. También proponemos becas integrales de $10.000 para todos los estudiantes, que garanticen el acceso y la permanencia hasta finalizar los estudios.
Esta propuesta permitiría que todos tengamos tiempo y recursos para estudiar. Porque queremos una educación pública, verdaderamente gratuita y de calidad sin dejar la vida en trabajos precarios que generan miles de ganancias a los grandes estudios jurídicos y empresarios capitalistas. Trabajar para poder vivir, y no vivir para trabajar.
Para esto, contra Macri que dice que tenemos que trabajar hasta sábados y domingos, le decimos que el dinero está pero se usa para otra cosa: 191.503 millones destinados al ministerio de seguridad y defensa gastado en camiones anti-piquetes y equipo para reprimir la protesta social, en vez de presupuesto para la educación y salud pública.
A partir de la campaña lanzada por Myriam Bregman y Nicolás del Caño en el Frente de Izquierda redoblamos la apuesta: poner en debate el trabajo, en este caso de los estudiantes, el acceso y la permanencia en la educación pública. Si nuestra vida vale más que sus ganancias, nuestra educación también. Queremos transformar la realidad y defender la educación pública para transformarla, que esos conocimientos estén al servicio de la defensa de los trabajadores y sectores populares.
Por este motivo, te invitamos a una nueva conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores. El 1° de Mayo nos movilizaremos a Plaza de Mayo y marcharemos en las calles de todo el país, para rechazar el ajuste de Macri y los gobernadores, y para decir bien fuerte retomando las consignas históricas de los trabajadores que pelearon por la reducción de jornada laboral y todos sus derechos: “nuestras vidas valen más que sus ganancias”!
