El pasado jueves la Policía, bajo las órdenes del ex coronel negacionista Juan Manuel Pulleiro, desalojó y reprimió a integrantes de la comunidad Cherú Tumpa. Yamila Veleizán sigue detenida. Racismo y brutalidad policial contra mujeres indígenas.
Lunes 27 de julio de 2020 21:09
Foto: Movimiento de mujeres indígenas por el buen vivir
El 23 de julio la Policía llevó a cabo un operativo en la localidad de Colonia de Santa Rosa, en el departamento de Orán. Integrantes de la comunidad guaraní Cherú Tumpa recibieron balas de goma y dieciocho personas sufrieron heridas, seis de ellos niños. Además, arrestaron a Yamila Veleizán, referente de la comunidad, luego de arrastrarla y golpearla brutalmente. Una muestra más de la brutalidad policial.
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Entrevistamos a Yuliana, vocera de la comunidad, quien relató la persecución que sufre. "Nosotros hace seis años que vivimos acá. La hermana Yamila está detenida desde el jueves pasado, cuando vino a reprimirnos la Policía".
Yuliana comentó que no saben por qué los quieren desalojar y que cuando, a fuerza de golpes y palos, las fuerzas policiales quisieron echarlos de los territorios que habitan no presentaron ningún papel. "Hace más de tres meses que venimos siendo asediados por la Policía, hasta que el jueves entraron y nos dispararon balas de goma, nos golpearon. Pedimos que nos dejen vivir tranquilos y que liberen a la hermana Yamila. Siguen viniendo todo los días las fuerzas policiales a asustarnos".
Yamila fue forzada a subir al vehículo policial y llevada a la Comisaría 9 de San Ramón de Nueva Orán, a 100 kilómetros de su hogar. Recién este domingo la familia pudo verla.
En tanto, el Cacique Raúl habló del dolor que aún preserva por lo ocurrido. "Tengo todavía la imagen de mi comunidad reprimida. A mi hermana Yamila, quería salvarla, pero no pude. El comisario Alejandro Luna, de la comunidad Colonia, dio la orden de reprimir, y él decía que a estos indios de mierda hay que correrlos a todos. Sabemos que la hermana Yamila está golpeada y que está muy mal", denunció.
El cacique, además, pidió ayuda "para seguir con esta lucha. Reclamamos derechos territoriales, pido que nos ayuden. Quiero que se acerquen a nuestra comunidad, para que vean lo que estamos pasando. Pido al presidente que ayude a nuestros niños y ancianos, que sufren el frío y no tienen dónde meterse".
Asimismo, agregó que toda la comunidad está pasando hambre y frío, "solo queremos un lugar para vivir y que lo merecemos. Todos los días da vueltas por acá la Policía. Pertenezco una comunidad guaraní y no tengo por qué negar mi sangre y a mis antepasados".
Ese terreno que el Gobierno de Salta pidió desalojar es parte del territorio comunitario ancestral. Hay alrededor de 400 personas de la comunidad viviendo allí. Por la represión sufrida el pasado jueves, la comunidad Cherú emitió un comunicado que concluye señalando que el objetivo de estos procedimientos es “exterminarnos y permitir el emplazamiento de empresas extractivistas”. Y agregan enfáticamente: “¡no lo permitiremos!”.
