ZONA SUR DEL CONURBANO BONAERENSE. Día y Carrefour arriesgan al personal y los clientes: hablan los trabajadores

Soy trabajadora de Día%, para cuidar mí puesto de trabajo no puedo dar mí nombre ni el de mis compañeros. Tenemos sueldos por debajo de la canasta básica familiar y cumplimos largas jornadas de trabajo para abastecer a la población. Estamos expuestos a contagiarnos del virus y a propagarlo. Nuestro trabajo es uno de los servicios esenciales, los supermercados, los hipermercados, los locales express, los de tu barrio todos deben permanecer abiertos pero en condiciones que garanticen la salud de todes. Estamos muy preocupados con nuestra situación, las cadenas de supermercados son formadoras de precios y desde que empezó el aislamiento no paran de subir el precio de los productos.

"Mientras ellos amasan fortunas no son capaces de garantizar condiciones de higiene y salubridad para trabajadores y clientes"

La salud es lo que motoriza nuestros reclamos, nuestras vidas, las de nuestros seres queridos valen más que sus ganancias. Es necesario que se implementen los testeos de forma masiva para controlar los contagios. No somos heroínas anónimas, en su mayoría somos mujeres, algunas son madres, todas somos empleadas que venden su tiempo para llevar la comida a la mesa y no somos inmunes.
Hoy en día sufrimos un aumento abrumador de trabajo y tensión por las condiciones laborales a las que estamos expuestas. En su mayoría en la línea de cajas somos mujeres, es uno de los sectores más feminizados de comercio. Sufrimos la falta de insumos necesarios para prevenir que nos contagiemos y que propaguemos el COVID-19, la preocupación por enfermarnos o por ser portadoras silenciosas que propagan el virus a nuestros familiares y a los clientes.
El sindicato brilla por su ausencia, mientras las empresas no respetan nuestros derechos laborales. Muchas madres tienen problemas para acceder a una licencia para cuidar a sus hijos. El anuncio del bono de cinco mil pesos que nos van a pagar que es insuficiente. Nuestro sueldo ya estaba por debajo de la canasta familiar y los aumentos de alimentos hacen que esté más abajo aún. Además la mayoría de las cadenas anticipó que este bono lo pagarán en tickets para gastar en los mismos supermercados donde trabajamos. Existe una enorme cantidad de trabajadores dependientes no registrados o parcialmente registrados en situación de precariedad, ¿qué va a hacer el sindicato para garantizar que se cumpla el pago?

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En los locales express o barriales es donde se concentra la mayor cantidad de trabajo precario y no registrado. En esos mercados cumplimos múltiples tareas, estamos en la caja, limpiamos, reponemos los productos y hasta nos piden que hagamos de seguridad todo por el mismo mísero sueldo. No nos dieron ninguna protección, trabajamos sin guantes y si tenemos barbijo es porque nosotros mismos nos lo conseguimos.
Para los clientes somos la cara visible de la empresa, y muchas veces recibimos las quejas ante la falta de abastecimiento, el aumento desmedido de precios y la publicidad engañosa. Algunos clientes se enojan y descargan sus molestias con nosotras, les pedimos que entiendan que la responsabilidad es de los empresarios. Los rumores de desabastecimiento, gente que vive al día y no tiene para comer, los 10.000 pesos que recién se cobrarán a mediados de abril no alcanzan, generan una situación explosiva. Necesitamos que se efectúen controles de precios y abastecimiento para evitar las situaciones de violencia a la que somos expuestas.

Los pasillos del mercado andan diciendo

Algunos compañeros de otros locales me pasaron su testimonio. Un empleado de una tienda express opinan que vivimos “con un sueldo que no nos alcanza para pagar el alquiler, comer y vivir con mínimas comodidades, sino salimos a trabajar no comemos. El sindicato encabezado por el eterno Cavalieri que apaga todo tipo de reclamos, vive tranzando con la patronal aumentos que dan vergüenza. Los burócratas del sindicato hacen la cuarentena y nosotros salimos todos los días sin barbijos, alcohol o guantes”.
“No sabemos si estamos sanos. Vivimos en una constante incertidumbre expuestos a la violencia de la gente con golpes y agravio. Mientras las empresas suben constantemente los precios sin regularización del Estado ellos siguen aumentando sus ganancias” nos dice una cajera de Día%.
En Carrefour la situación no es muy distinta como nos comenta uno de sus trabajadores: “Hay diferencia entre los empleados de las tiendas express y grandes. En las sucursales centrales tienen algunas cabinas de plástico y alcohol en cada caja acá hay un pote grande en toda la tienda y nos cuidamos nosotros pidiendo colaboración a los clientes que dejen espacio”

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Necesitamos organizarnos para superar esta crisis

Garantizar la distribución y el abastecimiento no es responsabilidad del “compromiso del cliente”. Tampoco queremos más represión, como aprovecha para pedir la derecha en las redes. Necesitamos medidas de organización e higiene que solo los trabajadores podemos garantizar. Deben estar todos los productos y realizarse el control de precios, tienen que darnos alcohol en gel, guantes y barbijos. Deben garantizar la higiene para la entrada y salida del personal y de los clientes. En las tiendas necesitamos más personal, se pueden repartir las horas de trabajo con gente que se encuentra desocupada sin reducir el sueldo, reducir la jornada laboral, que se aplique el testeo masivos y crear comités de seguridad e higiene en cada sucursal.