Se acerca el 8 marzo día internacional de la mujer trabajadora, y es necesario tomar las calles para luchar por nuestros derechos y reivindicaciones.
daniel sputnik @daniel_sputnik
Miércoles 15 de febrero de 2017
1.- En contra de la criminalización. A pesar de las múltiples conquistas que hemos obtenido se nos sigue criminalizando por expresar nuestra orientación sexual o identidad de género, un ejemplo de ello es que el 30 % de los jóvenes han sufrido acoso policiaco.
2.- Por el derecho a vivir nuestra sexualidad o identidad de género libremente. Nuestra sexualidad e identidad no dependen del consumismo y menos aún de las normas sociales, no queremos más machismo ni violencia física, psicológica ni simbólica; somos seres humanos capaces de elegir y gozar nuestros placeres eróticos y afectivos sin tabúes o restricciones de parte de la iglesia, instituciones políticas o empresarios explotadores.
3.- Porque nos tenemos que enfrentar a la precarización laboral. Las mujeres y la diversidad sexogenérica no tenemos que enfrentar a los trabajos más precarios, donde el 35% de la diversidad viven la discriminación laboral, en especial las mujeres trans donde 4 de cada 5 se enfrentan a la discriminación laboral y muchas veces son orilladas al trabajo sexual, donde son víctimas de transfeminicidios.
4.- Por una educación sexual. Es necesario luchar por una educación sexual en las escuelas, no machistas, ni sexista ni homofobia, pública y de calidad, que rompa con los roles establecidos en esta sociedad que bajo el sistema capitalista se profundizan aún más.
5.- No más crímenes de odio ni feminicidios. México ocupa el segundo lugar en crímenes de odio en América Latina, mientras 7 mujeres son víctimas de los feminicidios al día.
6.- En contra de la violencia machista. No vamos a dejar que se nos pisotee por el hecho de vivir y ejercer de manera libre nuestras identidades de género; nuestras expresiones de cariño ni nuestras ideologías artísticas y culturales; no queremos más crímenes de odio hacia nosotras y nosotros, no queremos más capitalismo que es al que debemos el odio y muertes de nuestra comunidad.
7.- Por la unidad de todas las luchas. Es necesario que para eliminar todo tipo opresión se construya la unidad entre trabajadores, las mujeres, la juventud y de más sectores de explotados y oprimidos para enfrentar este sistema que cercena nuestras vidas.
8.- Por el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos. No queremos que nos digan que debemos hacer con nuestros propios cuerpos, que nos obliguen a tener hijos sin la opción de decidir sobre nuestra reproducción, que no nos encasillen en la heteronormatividad del binarismo y que podamos elegir libremente como vestirnos y expresarnos física y mentalmente sin importar nuestro genero biológico e identidad de género.
9.- Por el derecho a espacios de expresión. Queremos espacios de recreación libre de la homolesbitransfobia, no limitarnos a la vida nocturna en zonas de tolerancia exclusivas para las elites, exigimos poder expresar nuestras ideas e identidades en cualquier lugar cultural, social y de convivencia sin miedo a las agresiones y odio.
10.- Por nuestro derecho al pan, pero también a las rosas. No queremos solo que se nos den paliativos para desactivar la lucha LGBTTTQIA que siempre se ha caracterizado por ser progresista y de vanguardia, exigimos poder expresar nuestras diferencias e identidades sin el riesgo de ataques, peleamos por gozar junto a las mujeres, obreros y campesinos por una vida digna, con derechos plenos y por el socialismo.