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Congreso. Diputados: peligra la nueva ley de respuesta al VIH, hepatitis, ITS y tuberculosis

De no ser tratado en Diputados durante las sesiones ordinarias de diciembre el proyecto de ley, que ya fue dictaminado en dos comisiones, perdería estado parlamentario por tercera vez consecutiva. Así lo denuncian las organizaciones y activistas que lo impulsaron, exigiéndole a Sergio Massa su tratamiento urgente.

Pablo Herón

Pablo Herón @PhabloHeron

Viernes 10 de diciembre de 2021 08:50

Foto: Tomás Labrousse para Ciclo Positivo

Es largo el trayecto que viene realizando el proyecto de ley de respuesta integral al VIH, hepatitis virales, otras infecciones de transmisión sexual (ITS) y tuberculosis en el Congreso. En las dos ocasiones previas en las que se presentó no llegó a ser tratado en la Cámara de Diputados, por esa razón en 2020 las 40 organizaciones y activistas que redactaron la propuesta original volvieron a presentarlo.

Al respecto Gonzalo Valverde, activista, aseguró que “el 31 de diciembre terminan las sesiones ordinarias del Congreso. Si no se trata antes de esa fecha pierde estado parlamentario pese a tener despacho de dos comisiones. Si lo pierde, hay que volver a presentarlo, tiene que volver a pasar por ambas comisiones con lo que puede pasar mucho tiempo”.

Cuando se trata de la salud y las vidas de miles de personas el tiempo apremia. Por eso mismo el jueves activistas y organizaciones como Ciclo Positivo o la Red Argentina de Jóvenes y Adolescentes Positivos, entre otras, impulsaron la exigencia a Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados, y los jefes de los distintos bloques para que el proyecto sea tratado en la próxima sesión. La agenda del Congreso para lo que queda del mes estará atravesada por el tratamiento del Presupuesto 2022 y el Plan Plurianual, ambos supeditados al acuerdo con el FMI.

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Según el último Boletín 2021 de la Dirección de Respuesta al VIH, ITS, Hepatitis Virales y Tuberculosis (DVIHT) en el país se estima que hay 140 mil personas con VIH, de las cuales 17 % desconoce su diagnóstico. En promedio se notifican 4.500 casos de VIH por año y son 65 mil las personas que se encuentran en tratamiento con antirretrovirales provistos por el Estado.

En los últimos 6 años en los que el proyecto no fue tratado fallecieron 15.000 personas a causa del VIH y las hepatitis virales, hubieron 28.800 nuevos diagnósticos de VIH, 12.600 de hepatitis virales y 65.000 de tuberculosis, destaca la campaña impulsada el jueves para visibilizar y concientizar sobre la situación.

El proyecto de ley ingresó a la Cámara con firmas de 30 diputadas y diputados de los distintos bloques, Nicolás del Caño y Romina del Plá del Frente de Izquierda Unidad fueron parte de los firmantes que apoyaron la iniciativa. El mismo aborda distintos aspectos que buscan superar la legislación vigente que ya garantiza la gratuidad de los tratamientos. Cambia la perspectiva en relación a la ley sancionada en 1990 que es biomédica, hacia un enfoque de género y derechos humanos contemplando los determinantes sociales de la salud y las situaciones de vulnerabilidad social.

En ese sentido establece “el derecho al trabajo y a la permanencia en el mismo, sin discriminación, despidos, suspensiones, hostigamientos, reducciones salariales, violencia, violación de la confidencialidad” y “a no ser objeto de pruebas diagnósticas de modo compulsivo”.

En su versión original también contemplaba la presunción de que el despido del “trabajador/a con VIH, Hepatitis Virales, Tuberculosis o ITS obedece a actos discriminatorios en razón de su salud”, otorgando la posibilidad de reclamar contra el despido. Pero por ese apartado la Unión Industrial Argentina buscó poner palos en la rueda en el tratamiento de la ley enviando una nota a distintos diputados, y el mismo terminó siendo eliminado en el tratamiento en comisiones.

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Por otro lado, la ley busca establecer un régimen jubilatorio especial para las personas con VIH y/o Hepatitis B y/o C cuyos requisitos son tener más de 50 años, acreditar 20 años de aportes y al menos 10 años transcurridos desde el diagnóstico al momento de solicitar el beneficio. También se otorgarían pensiones “de carácter vitalicio y no contributivo” a quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad social.

Entre otros aspectos, también propone la provisión de leche de leche de fórmula hasta los 18 meses para las personas gestantes positivas, cuyo plazo hasta el momento solo es de 6 meses en la ley vigente.

El tratamiento en comisiones del proyecto durante este año se dio tras distintos reclamos hacia el presidente de la comisión de Salud, Pablo Yedlin (Frente de Todos). “No hubo voluntad política de que el proyecto se trate y apruebe antes” cuenta Gonzalo y agrega que “eso también se ve en la política pública en materia de VIH donde la Dirección Nacional de Respuesta al VIH, Hepatitis, TBC e ITS está acéfala hace varios meses desde la renuncia de Cecilia Santamaría que asumió luego de la renuncia de Sergio Maulen”.

El reclamo por la nueva ley de respuesta al VIH, hepatitis virales, ITS y tuberculosis debe ser escuchado, urge sanción en el Congreso sin más retrasos ni especulaciones de ningún tipo como las que se suelen ver por parte de los bloques mayoritarios cuando se trata de derechos elementales para poblaciones vulneradas. Durante la campaña electoral, la diputada electa por el Frente de Izquierda Unidad, Myriam Bregman, apoyó públicamente el reclamo: "Es urgente el tratamiento y aprobación de la nueva ley de VIH que han presentado decenas de organizaciones y sigue trabada en Diputados. Es necesario volver a las calles con el movimiento de mujeres y la diversidad".


Pablo Herón

Columnista de la sección Género y Sexualidades de La Izquierda Diario.

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