La movilización estaba convocada en repudio a los dos brutales asesinatos cometidos por la Policía contra personas afroamericanas en la última semana.
Viernes 8 de julio de 2016
El ataque se produjo este jueves por la noche en la ciudad de Dallas. Según los informes policiales son 5 los policías que murieron y al menos hay otros siete heridos.
Los hechos ocurrieron en el marco de una movilización que se realizaba en protesta por los dos brutales asesinatos ocurridos en la última semana contra personas de origen afroamericano.
Ver también: Dos nuevos asesinatos racistas en Estados Unidos
Alrededor de un centenar de agentes habían sido desplegados en el centro de Dallas con motivo de la marcha contra la violencia policial que se iba a realizar en esa ciudad como parte de la jornada de protesta que tuvo lugar en varias ciudades del país. Durante la marcha se empezaron a escuchar disparos y los manifestantes corrieron desconcertados, sin saber de donde provenían.
RT RadioVZ: Revelan el momento exacto en que se desató la balacera en #Dallas https://t.co/ZQWdG6CnxR pic.twitter.com/qBKjwcF0Hu
— ( ͡° ͜ʖ ͡°) QUIMI350 (@QuimiJose) 8 de julio de 2016
Según los primeros informes de la policía de Dallas al menos dos francotiradores habrían abierto fuego provocando la muerte de 5 agentes y dejando heridos a al menos 7 más.
El jefe de Policía de Dallas, David Brown, dijo en un comunicado que los francotiradores, algunos en posiciones elevadas, dispararon contra los agentes en lo que pareció ser un ataque coordinado.
"Operaron juntos con rifles, triangulando desde posiciones elevadas en diferentes puntos del centro donde terminó la protesta", dijo Brown en conferencia de prensa, añadiendo que tres civiles también resultaron heridos.
Tras el tiroteo la policía anuncio la muerte de uno de los supuestos atacantes que se habría atrincheró en un estacionamiento y, que según la policía habría asegurado haber colocado bombas por todo el centro de la ciudad.
Según fuentes policiales el sospechoso, siguió disparando contra los agentes durante las negociaciones e indicó que "el fin se acerca" y que más policías resultarían heridos y morirían.
Horas más tardes se anunció que el sospechoso había muerto, sin aclarar las causas, y la policía confirmó que no se había encontrado ningún tipo de explosivos en el lugar.
Brown confirmó que tras el tiroteo detuvieron a tres personas, de las que aún no se conoce la identidad, y declaró que no tienen la seguridad de que no haya más personas involucradas además de los tres arrestados y el sospechoso que se había atrincherado.
El tiroteo ocurrió cuando se desarrollaban protestas en distintas ciudades del país luego de que Philando Castile, de 32 años, murió baleado por la policía cerca de St. Paul, Minnesota, la noche del miércoles.
Su novia transmitió un video en directo por internet de los dramáticos momentos posteriores al incidente.
Castile falleció un día después de la muerte de Alton Sterling en Baton Rouge, Luisiana, quien recibió cinco balazos de un policía blanco que le disparó mientras lo retenía junto a otro oficial. Imágenes de video del incidente encendieron protestas y malestar en las redes sociales.
Los ataques racistas llevados a cabo en EE.UU. por las fuerzas policiales se han vuelto una constante. Los asesinatos de esta semana no hacen más que confirmar el profundo racismo institucional existente en Estados Unidos.