Actualidad. El apoyo del jefe de Gabinete de Kicillof: “La frase de Ishii fue sacada de contexto”

Durante una conferencia de prensa en La Plata, donde el tema convocante era la situación epimediológica por el coronavirus en la provincia de Buenos Aires, el jefe de Gabinete bonaerense Carlos Bianco se refirió a polémica en torno al intendente de José C Paz Mario Ishii, tras la difusión de un video donde el histórico caudillo peronista discute con trabajadores sanitarios municipales y dice “yo los tengo que cubrir cuando están vendiendo falopa con las ambulancias”.

Bianco salió al cruce de una pregunta periodística en la conferencia de prensa. “Fue una frase sacada de contexto. Es un intendente que trabaja de sol a sol, por eso en cada elección desde que ha empezado sus mandatos ha podido revalidarlos. Creo que los paceños están muy contentos y nosotros estamos muy conformes del trabajo conjunto con el intendente Ishii, que trabaja, le pone el cuerpo a los problema y los soluciona”, señaló Bianco el funcionario.

Pero es inocultable la complicidad de los grandes traficantes con las fuerzas policiales y funcionarios municipales. Para muestra bastan las palabras del mismo intendente: “estoy cubriendo el trabajo, no encubriendo narcotraficantes”.

Como viene reflejando La Izquierda Diario, el escándalo de Mario Ishii no sólo expone los entramados de un intendente del conurbano sino las alianzas con el gobernador Axel Kicillof, por eso su jefe de Gabinete hace estas declaraciones, en consonancia con lo dicho por su “paladín de la justicia” Sergio Berni.. “En el mismo lodo...”, comienza la famosa estrofa del tango de Discépolo.

Es enorme el sostenimiento de delitos (narcotráfico, los desarmaderos de autos, la trata de personas) por parte de las fuerzas represivas del Estado, las mismas de las que se vale el Gobierno, usando como excusa la inseguridad y la pandemia, para seguir militarizando zonas.

A su vez, en la provincia de Buenos Aires, gobernada por Axel kicillof y su ministro “estrella” Sergio Berni, crecen las denuncias contra la Bonaerense por casos aberrantes, como la desaparición de Facundo Castro- después de haber sido subido a un patrullero-, o la detención y torturas a tres jóvenes precarizados, en la localidad de Quilmes, a quienes además les armaron causas.

Para no hablar de cómo están superobladas las comisarías y cárceles bonaerenses de jóvenes que son procesados por portar un porro o por el narcomenudeo con el que sólo se busca sobrevivir, mientras los grandes narcotraficantes se enriquecen impunes y hasta financian las campañas electorales de los grandes partidos patronales.