Son más de 30 guardavidas quienes no fueron convocados esta temporada para cuidar a las familias que veranean en el balneario bonaerense. Las y los trabajadores exigen por sus condiciones de trabajo y denuncian la persecución del gobierno de Alejandro Dichiara y Marcos Fernandez del Frente de Todos.
Domingo 2 de enero de 2022 14:19
La Federación Argentina de Guardavidas (FAG), que nuclea las seccionales de Mar del Plata, Pinamar, Ensenada y Villa Gessell, logró conquistar la Ley Nacional y Provincial 14798 que regula la profesión, con un régimen de 5 meses y 150 días de trabajo y con 6 hs diarias pagadas, pactados por una misma paritaria provincial para todas estas seccionales. Con el surgimiento del Sindicato de Guardavidas de Monte, los trabajadores de Monte Hermoso se organizaron para lograr las mismas condiciones de trabajo que en el resto de la costa bonaerense.
Estas condiciones no se cumplen en Monte Hermoso: el gobierno municipal de Alejandro Dichiara, actual diputado provincial electo por el Frente de Todos, desconoce las leyes y regulaciones, pasando por encima de la organización de los mismos trabajadores, mientras el gobernador Axel Kicillof le da la espalda a los reclamos de estas familias trabajadoras.
En este contexto más de 30 guardavidas no fueron convocados para comenzar la temporada 2020-2021, haciendo un importante recorte en la zona de cuidado, reduciendo a la mitad los puestos de trabajo. Estos trabajadores y trabajadoras que no fueron convocados, apoyaron en las calles el reclamo de la reincorporación de 13 guardavidas, que habían sido despedidos por la pelea de conformar el sindicato y lo integraban. A esos 13 que finalmente fueron reubicados, les pagaron en diciembre un sueldo de $23.749...
Estas acciones de persecución política únicamente empeoran las condiciones del cuidado que puedan brindar estos trabajadores a las familias que se encuentran vacacionando en las playas.
No es la primera vez que en la zona el poder político se utiliza para buscar garantizar la impunidad. Denuncias similares realizó Cristina Castro cuando el intendente de Villarino amenazaba a los trabajadores municipales para evitar que sean parte de las movilizaciones, que apuntaban al gobierno local y los policias de la bonarense como responsables de la desaparición y asesinato de Facundo, y el posterior intento de encubrimiento de los hechos.
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Tampoco es casualidad que esto pase en ciudades donde el trabajo municipal nuclea sectores importantes de trabajadores, buscando acallar los reclamos y disciplinar con amenazas y despidos la forma de pensar de las familias trabajadoras. El gobierno local y provincial es responsable ante cualquier accidente al que no pueda darse respuesta por falta de personal en la playa de Monte.
Luego de no ser escuchados desde marzo los trabajadores decidieron cortar una mano del ingreso a la ciudad para hacer escuchar sus reclamos. La respuesta esta vez fue la intimidación pública y la represión en manos de la policía, que llegó al corte de forma violenta e intimidatoria, con agentes de civil incluidos, amenazando a los y las trabajadoras que reclamaban.
Con la cobertura de distintos medios de comunicación y el apoyo de la comunidad, que reconoce el valioso trabajo de los guardavidas, se amplificaron las voces de apoyo y repudio al atropello que estaban viviendo. Como parte de las repercusiones este martes se abriría una nueva instancia de diálogo donde se espera una respuesta sobre la situación de los 30 guardavidas.
La precariedad laboral es moneda corriente en Monte Hermoso. Cada temporada cientos de jóvenes de la zona viajan al lugar para poder hacer changas, con jornadas de 10 o 12hs en bares y restaurantes, sin derechos laborales. Son la contracara de una política de gobierno que precariza a la juventud y que, en una ciudad turística, solamente garantiza mejores condiciones para los negociados y el lobby empresarial de la construcción y la especulación inmobiliaria.