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Red Internacional
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OPINIÓN. Brutales declaraciones: el machismo de la Mona Jiménez

Repudiables declaraciones machistas del icono del cuarteto la Mona Jiménez. Se puede ver en un video que se encuentra circulando, donde la Mona agradece a los invitados, pero el saludo termina mencionando al presidente venezolano Nicolás Maduro, y lo que es peor, su hija.

Martes 6 de junio de 2017

Mona Jimenez y un exabrupto sobre Nicolás Maduro - YouTube

La última noticia que habíamos tenido de la Mona Jiménez fue cuando en su vuelta al Sargento, murió un joven en la fila de entrada al baile. Esta vez sin sorprendernos se accedió a una grabación, que fue registrada el pasado viernes 26 de mayo en el Sargento Cabral, donde la Mona despacha declaraciones que alimentan la cultura de la violación.

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Hace unos meses vimos como otro músico argentino de otro palo también había dado declaraciones repudiables por su machismo: “Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente." También había agregado que "si yo tengo algo bueno para darte puedo desvirgarte como nadie en el mundo".

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Los dichos machistas del icono cuartetero, pueden escucharse en un video que se encuentran circulando, donde la Mona agradece a los invitados especiales esa noche. Pero el saludo termina mencionando al presidente venezolano Nicolás Maduro, y lo que es peor, su hija (aunque el mandatario tiene sólo un hijo varón).

“Para la gente de Venezuela que nos visita, por primera vez están bailando cuarteto”, dice Jiménez, sobre un tenue piano que anticipa el comienzo de otra canción. Jiménez toma nuevamente el micrófono y dice: “Amigo venezolano mandale un beso a todos, y que se vaya a la mierda Maduro, rápido, urgente, sino voy a ir para allá y le voy a cortar la… no, le vamos a coger la hija, y listo”.

De la Mona Jiménez no se conoce sólo su música pegadiza, que llegó a todos los rincones del país, hemos visto escenas desagradables y degradantes hacia las mujeres, de un machismo obsceno en sus bailes, que lejos de ubicar esta última declaración como un exabrupto, colocan la expresión del líder de la bailanta como reproductora y legitimadora la violencia contra las mujeres. La cultura de la violación otorga a los machistas un libre e irrestricto acceso al cuerpo de las mujeres.

Estas formas de expresión ya no son chistosas para una gran mayoría de personas que repudian la violencia de género en todas sus formas. Encuentran un límite en una sociedad que protagonizó, recientemente, una de las movilizaciones más multitudinarias de las que se tenga memoria en las últimas décadas exigiendo #NiUnaMenos, contra la violencia machista.