Otro año más se celebra San Valentín, conocido como el “día de los enamorados”. Año tras año el 14 de febrero se promueve el amor romántico y su consumo a nivel mundial. Pero no siempre ha sido así.
Viernes 14 de febrero de 2020
Esta fecha tiene su origen en las fiestas paganas de los pueblos de la Antigua Roma y su significado se ha ido modificando a lo largo de la historia.
La manera de entender el amor ha ido variando según las diferentes sociedades, el contexto histórico y social, los modos de producción, la ideología de las clases dominantes o las instituciones sociales como el Estado o la Familia. La concepción actual del amor se enmarca en el sistema hetero-patriarcal y capitalista basado en la propiedad privada, la monogamia, la explotación y la opresión.
Te puede interesar: Apuntes sobre el amor romántico: el amor como propiedad en la sociedad capitalista
Te puede interesar: Apuntes sobre el amor romántico: el amor como propiedad en la sociedad capitalista
Juventud y relaciones afectivo-sexuales
La juventud sufrimos continuamente, y sobre todo las mujeres, el mito del amor romántico. Desde la música, el cine, los libros, las series, las redes sociales y la publicidad reproducen y legitiman los comportamientos tóxicos y machistas en los que se basa el “amor”.
Además, se normalizan los tipos de violencia de género que no sean físicos como el control de la forma de vestir, de las relaciones de amistad, los sitios a donde salir, el chantaje emocional, los insultos, las amenazas, etc. Nos enseñan a naturalizar e incluso a alabar los celos como símbolo de amor pero que solo promueven el control y la posesión.
También se recrean continuamente los roles de género marcados por el patriarcado que se dan en una relación de pareja que, casi siempre, es heterosexual, sin mostrarnos otros tipos de relaciones u orientaciones sexuales. Nos educan en que las mujeres debemos ser sensibles, cariñosas, sumisas, amables, familiares, atentas, preocupadas y celosas, pero no mucho. Los hombres deben protegernos, defendernos, ser fuertes, posesivos, emprendedores, confiados, dominantes y un poco agresivos y violentos sobre todo en lo que se refiere al sexo.
Según El I Informe sobre Jóvenes y Género "La (in)consciencia de equidad de la población joven en España" de 2019 un 41% cree que un chico debe proteger a su chica”, un 32% considera que tener pareja implica una entrega absoluta y el 31% que siempre te va a quitar algo de libertad.
También podemos observar datos sobre aspectos que muchas veces pensamos que ya no se dan en la juventud, sin embargo, el 11% no está de acuerdo con que se mantengan espacios propios y personales y el 15% está de acuerdo con el control del móvil a su pareja.
El amor romántico y el sistema capitalista y patriarcal
Las relaciones que actualmente se establecen se caracterizan por el individualismo y por la necesidad de satisfacer inmediatamente las demandas tanto afectivas como sexuales. En el marco de esta sociedad hetero-patriarcal y capitalista basada en el consumo y en la cosificación del cuerpo de la mujer, las relaciones afectivo-sexuales también se conciben como un objeto de consumo. Por lo tanto, en los marcos de este sistema capitalista y patriarcal es muy difícil desarrollar plenamente un amor libre y sincero basado en el respeto y en la igualdad.
Principalmente porque tenemos que pasar la mayor parte del tiempo vendiendo nuestra fuerza de trabajo para que unos pocos se enriquezcan, lo que nos deja agotadas y sin ganas de establecer vínculos afectivos duraderos, sanos y consistentes. En el caso de las jóvenes estudiantes, desperdiciando horas de nuestro tiempo estudiando contenidos que no nos interesan y sin desarrollar ningún pensamiento crítico, con el único fin de obtener un título y participar, sin ningún tipo de cuestionamiento, en este sistema capitalista.
¿A qué tipo de relaciones aspiramos los y las revolucionarias?
Los y las revolucionarias rechazamos todo tipo de violencia machista, de explotación y de opresión que reproduce este modelo de amor romántico. Seguimos el ejemplo de revolucionarias que como Aleksandra Kollontái ligaron la lucha por la emancipación de las mujeres y todos oprimidos a la pelea por conquistar nuevos modos de relacionarnos más humanos como el amor camaradería basado en la necesidad de establecer relaciones más humanas entre las personas.
Apostamos por relaciones que se desarrollen libremente y sin restricciones, igualitarias, que se basen en la comunicación, la libertad de elección, el respeto y la solidaridad. Para ello, también luchamos por acabar con este sistema que nos explota y nos oprime y construir una nueva sociedad socialista.
Los próximos 6M y 8M vamos a pelear por una verdadera educación afectivo-sexual
Es por ello que este 6 de marzo debemos sumarnos a la huelga estudiantil y luchar no solo contra el “pin parental” sino por una verdadera educación afectivo-sexual que incluya contenidos LGTBIQ+ basados en el respeto y la autoaceptación
También, que profundice sobre los diferentes modos de relacionarnos, sobre el origen de la monogamia y las alternativas a la hora de establecer relaciones, sobre el placer, la regulación de las emociones, el consentimiento, la comunicación o los diferentes tipos de cuerpos. Por una educación que nos muestre el camino para construir relaciones libres y sanas tanto de pareja, de amistad o sexuales y nos permita desarrollar el pensamiento crítico.