En #SeTeníaQueDecir entrevistamos a Mariana Carbajal para conocer qué son y cómo funcionan estas escuelas vinculadas a la cúpula de la Iglesia Católica, porqué participan del sistema educativo formal y cómo se financian. Repasamos aquí los principales puntos, que podés profundizar viendo la entrevista completa.
Sol Bajar @Sol_Bajar
Lunes 22 de junio de 2020 16:08
IGLESIA Y EDUCACIÓN | MARIANA CARBAJAL nos cuenta qué son las ESCUELAS FASTA #STQD - YouTube
El 1° de junio, la periodista Mariana Carbajal publicó en Página 12 dos notas sobre las “escuelas Fasta”, las instituciones educativas que pertenecen, junto a otros “emprendimientos”, a la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino, surgida en Argentina, en 1962, poco después del golpe a Frondizi, pero que hoy se extendió a 30 diócesis en diferentes países, que van desde Perú, Brasil o Chile a España y otros países de Europa.
El relato de Mariana, que siguió con otras publicaciones en las últimas semanas, abrió también el camino para que surjan muchos testimonios de exalumnos/as denunciando distintos tipos de maltratos y discriminación, que hoy se reúnen en una denuncia del INADI ante el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires y en una investigación a cargo de la UFEM, la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres.
Para conocer qué son y cómo funcionan estas escuelas vinculadas a la cúpula de la Iglesia Católica, porqué participan del sistema educativo formal y cómo se financian, en #SeTeníaQueDecir hablamos con Mariana Carbajal. Repasamos aquí los principales puntos, que podés profundizar viendo la entrevista completa.
Qué es la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino?
Mariana cuenta que Fasta es “un grupo católico integrista, que surgió en la década del 60 y a partir del 78 en Tucumán dio vida al primer colegio, el Boisdron, que es un colegio al que concurren los hijos e hijas los sectores acomodados en Tucumán”.
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A partir de ese momento, relata, la empresa de la Fraternidad fue avanzando. “El fundador, Aníbal Fósbery, es un sacerdote de la derecha, con vínculos con la última dictadura militar muy precisos, admirador de Erich Priebke, el nazi que fue juzgado por delitos de lesa humanidad durante el nazismo”, responsable de la masacre en las fosas Ardeatinas durante la ocupación alemana de Italia, y que vivió en Bariloche hasta que fue encontrado y juzgado en Roma.
El nombre de Fósbery, así como su historia, está ligado también al de otras figuras emblema del poder más conservador de la jerarquía católica, como el cardenal Raúl Primatesta (central en el vínculo entre las cúpulas religiosas y la última dictadura cívico, clerical y militar) y el cardenal Antonio Quarracino. Otros nombres, como el de Antonio Domingo Bussi, Cecilia Pando, Abel Albino, también aparecen ligados a Fasta y a su fundador.
¿Cómo fue avanzando esta Fraternidad católica sobre el sistema educativo formal?
Carbajal agrega que con esta perspectiva, la Fraternidad fue “adquiriendo colegios de las congregaciones que entraban en crisis en la década del ‘90, los colegios del barrio, de monjas o de curas, en distintos lugares del país. Y entonces fueron formando una red de colegios. Hoy son un poquito más de 20 en Argentina: tienen tres en la Ciudad de Buenos Aires, uno en el barrio de Palermo, otro en Devoto, otro en Flores; en la Provincia de Buenos Aires, en la localidad de Lobos, en Coronel Suárez, en Mar del Plata, que es como uno de sus bunkers. Porque también tienen universidad, colegios de formación secundaria y títulos terciarios. En Jujuy, Córdoba, en Rosario, en San Martín de los Andes” también cuentan con sedes, añade.
Hoy, como cuenta Carbajal, Fasta tiene al menos 23 colegios en 18 ciudades de 11 provincias, además de varios institutos de formación superior y de la Universidad en Mar del Plata, que tiene dos subsedes (en Tandil y Bariloche), y en muchos casos “carreras únicas” que obligan al estudiantado a cursar en estas instituciones simplemente porque no hay otra opción. En su red de colegios, Fasta tiene más de 20 mil alumnes.
"Odio de género"
“Lo que llama la atención, por lo cual empiezo a poner el ojo, son los contenidos que se imparten, que tienen que ver con transmitir discursos de odio hacia el movimiento feminista pero también lesbo y homofóbicos. Se dice que los homosexuales son enfermos, que las lesbianas son pervertidas, que las feministas que odian a las familias y otros conceptos denigrantes hacia estos colectivos, a partir no sólo de la transmisión verbal sino también manuales que edita la propia editorial que tiene esta agrupación. Uno de esos manuales, como cuenta Mariana en sus notas, es el manual de la “Nueva Evangelización y Cultura”, escrito por su fundador.
En sus notas, Mariana también habla de una formación de “milicianos” de Fasta, de un “trasfondo” militar. Los testimonios que surgieron a partir de sus notas lo refrendan: “se han formado en Instagram distintos perfiles por provincias y por colegios, donde ex alumnos vuelcan testimonios personales de vivencias muy dolorosas sobre la discriminación y el bullying y el hostigamiento promovido por los directivos".
Ella habla, por eso, de “bullying con aval oficial”, y así lo refrenda, entre otras, la activista trans Victoria Caram, que contó que asistió desde los 10 años, cuando aún era un niño, a una de estas escuelas en Tucumán, donde fue sometida castigos y a todo tipo de vejaciones.
Con financiamiento estatal
Pero Mariana subraya que “lo preocupante, o lo que una pretendía poner en debate, es que reciben subsidios del Estado en cada provincia donde están instalados”.
De acuerdo al último relevamiento anual de la Dirección de Información Educativa, del Ministerio de Educación, el 76 por ciento de estas escuelas recibe algún nivel de subvención estatal, y en el 48 por ciento de los casos, el aporte del Estado llega al 100 por ciento”.
Pero Carbajal también apunta que del “último balance que presentaron en la Inspección general de Justicia, que es el organismo del ministerio de Justicia y Derechos Humanos que regula y controla las asociaciones civiles”, correspondiente al año 2018, surge además que reciben 440 millones de pesos al año por parte de los distintos gobiernos provinciales”.
“La pregunta que surge -agrega- es si es posible que instituciones educativas den título oficial y reciban un subsidio del Estado cuando se apartan y vulneran leyes como la de Educación Sexual Integral, la del Matrimonio igualitario, la de Identidad de género, que atentan contra los derechos de niñas, niños”.
A esto se suman, entre otras, las acciones extracurriculares impulsadas por Fasta, que jugó desde los colegios, terciarios y universidades un rol muy activo en la campaña de la cúpula clerical contra el derecho a la legalización del aborto.
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Hecha la ESI, hecha la trampa
Para decir lo que dicen en sus aulas, desde Fasta se escudan en el artículo 5° de la Ley de Educación Sexual Integral, que habilita a los colegios privados a adaptar los contenidos de la ESI a su “ideario Institucional”.
“Ese artículo es como el paraguas que ellos alegan para poder decir estas barbaridades”, dice Mariana, y subraya que lo que “una cosa es el ideario, por ejemplo, decir ‘nosotros consideramos que la juventud tiene que llegar casta al matrimonio’, suponiendo que ese sea el ideario de la institución, “pero eso no obsta de explicar que el preservativo es el método recomendado para prevenir el VIH y otras enfermedades de transmisión sexual y para evitar embarazos no deseados”, dice.
“Hablar de que los homosexuales no tienen que tener derecho a adoptar o que las mujeres lesbianas son pervertida, eso es parte de lo que dice la legislación, como la ley Antidiscriminatoria” y esta institución incumple. “A eso justamente, cuenta, apunta la denuncia del INADI”, cuenta Mariana.
Iglesias y Estado
Desde cuándo recibe subsidios FASTA es algo que de momento no está claro, pero los balances de los últimos 3 o 4 años muestran que se trata de cifras millonarias. Habrá que ver, advierte Mariana, qué curso tiene esta denuncia, pero hay un hecho que queda claro: “además de los subsidios que reciben, dan título oficial ¿Y es legítimo brindar este tipo de contenidos, que vulneran las leyes vigentes en la Argentina, recibiendo un subsidio del Estado?".
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"En cada provincia, el ministerio de Educación debería tomar cartas en el asunto, para ver el tipo de contenidos, qué tipo de vínculo tienen estos docentes con estos alumnos y alumnas, con relatos que son realmente tan dolorosos”, agrega, e invita a seguir el instagram con testimonios de ex alumnos y alumnas que dieron fundamento a la denuncia que hoy todavía está en curso.