Desde la izquierda diario y los legisladores del PTS-FITU hacemos llegar todo nuestro apoyo a los choferes y sus familias. Ponemos este informe y medidas a consideración de los trabajadores para fortalecer su pelea y forjar una unidad con los pasajeros. Está en juego, no solo el salario, sino también un servicio de calidad y accesible, algo que solo puede ser factible poniendo fin al lucro privado.
Sábado 7 de septiembre 11:00
En lo que va del año las 5 empresas que operan en la capital jujeña han venido ganando millones. Pese a la quita del subsidio nacional. La fórmula del “éxito” está en un aumento del boleto del 415% y los subsidios provinciales que rondan los 200 millones mensuales. Acá dejamos el tuit del diputado y economista, Gastón Remy, que subió a X información al respecto.
Acá se puede ver que cuando sube el boleto caen los pasajes vendidos. La sed de ganancias conspira contra la necesidad de transporte del pueblo. La pelea es por estatizar el servicio bajo control de trabajadores y pasajeros, planificar un transporte de calidad y accesible. pic.twitter.com/phXCKsAgek
— Gastón Remy (@RemyGaston1) September 6, 2024
Entonces, ¿por qué no cumplen con el pago de los salarios y paritarias de los choferes?
No es la primera vez que no cumplen, de hecho hace meses no abonan “bonos”, sumas no remunerativas acordadas por paritarias. Sin embargo, los que extorsionan son los trabajadores. ¿El mundo del revés? Si, es el mundo de los empresarios.
Ellos saben que así hacen la diferencia a costa del trabajador, y a la larga la UTA con medidas de fuerza, terminan destrabando con un aumento del boleto y/o más subsidios. Y los gobiernos están de su lado. De aquí que el empresario especule y extorsione.
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Pero luchar sirve. En San Miguel de Tucumán esta semana por las medidas de fuerza se frenaron 300 despidos, un triunfo frente a patronales del transporte que extorsionan al límite por su tajada.
Por eso el apoyo al paro requiere de medidas para que no se use la necesidad del trabajador y del usuario para beneficio de los empresarios. ¿Cuáles?
Nos referimos a la apertura de la contabilidad de las empresas poniendo blanco sobre negro la situación económica y financiera. Más aún dado que cuando se busca un cálculo aproximado de la rentabilidad se encuentran ganancias abultadas.
Segundo, a que todo el sistema de subsidios (provincial y en caso que vuelvan a llegar nacionales) vayan a una cuenta donde un comité de trabajadores y pasajeros pueda controlar el destino de esos fondos. Ya sabemos lo que pasa cuando van a las empresas: una caja negra.
Pero como se puede apreciar a medida que aumenta el boleto cada vez menos personas usan el colectivo. Esto va en desmedro del sistema de transporte, pero también esas personas no dejan de transportarse, recurren a medios alternativos no públicos (ubers, moto taxi, etc.) que habilitan mayores accidentes de tránsito, más congestión en las horas pico, contaminación en el aire, entre otros efectos negativos.
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Así se desata un “círculo perverso” (como se puede ver en el gráfico del tuit) donde por otro lado a menos pasajes vendidos, menor recaudación, mientras siguen subiendo costos, y con ajuste fiscal (menos subsidios), la ecuación termina mal. Los empresarios descargan esto sobre trabajadores como estamos viendo, sobre pasajeros con menos frecuencias, coches cada vez en peor estado, y como ya vimos en otros momentos, con despidos y el cierre de líneas dejando a todos en la calle.
Para evitar este destino al cual nos conducen empresarios y los gobiernos se necesita una medida de fondo, la estatización del servicio bajo control de trabajadores y pasajeros, los únicos interesados en que el sistema funcione como lo que debería ser (y no es) un servicio público (y no un coto de caza para el negocio privado).
Un sistema colectivizado y centralizado que una todo el Gran Jujuy (Lozano, Yala, SS y Palpalá) permitiría la planificación de las líneas, mejoras y ampliación de recorridos, renovación de unidades, implementación de sistemas de abono para abaratar aliviar el bolsillo del pasajero, tarifas integradas, y un control permanente de trabajadores y pasajeros para evitar que el excedente del sistema se vaya a otras actividades como sucede hoy día. Hay alternativa al sistema de transporte si lo sacamos de manos de los empresarios parásitos.