El próximo miércoles 28 de junio desde las 18 h se concentrará en Plaza de Mayo la Segunda Marcha Nacional “Basta de Travesticidios” que se movilizará hasta el Congreso de la Nación.
Viernes 23 de junio de 2017
Este 28 de junio, en el Día Internacional del Orgullo LGBTTI, se cumplen 48 años de aquella madrugada de 1969 en la que una razzia policial, algo rutinario en los bares gay de la década, perdió el control al querer realizar detenciones masivas en el bar Stonewall Inn del barrio neoyorquino de Greenwich Village.
Fueron las travestis quienes esa noche, cansadas de la opresión y marginación a la que eran empujadas, se plantaron con firmeza y se negaron a ser revisadas y detenidas. Cuando a esto se sumó el grito de “¿Alguien va a hacer algo?” vociferado por una chica lesbiana que estaba siendo forzada por los policías, se desataron los enfrentamientos que obligaron a las fuerzas a encerrarse dentro del bar. Se desencadenó así una rebelión con manifestaciones a lo largo de dos noches más que conformaron la primera revuelta sexual que retumbó a nivel internacional.
De las mismas entrañas de Stonewall surgieron activistas como la travesti de origen latino Sylvia Rivera, quien junto a su amiga Marsha P. Johnson funda en 1970 STAR, organización que se dedica principalmente a combatir la situación de criminalización que atravesaban las personas trans en la época, algo que se repite hasta hoy día.
Te puede interesar: Sylvia Rivera: la primera estrella travesti
Su lucha es nuestra lucha
Lohana Berkins, fue una gran activista transgénero, defensora e impulsora de la ley de identidad de género. Ley aprobada en 2012 y que fue la primera en reconocer la identidad de género de las personas en términos de autopercepción garantizando también el pleno acceso a la salud y despatologizando las identidades trans. Ella no sólo dio una pelea en las calles sino que peleó para poder participar de los Encuentros Nacionales de Mujeres y aunque no murió por un travesticidio su muerte sin duda fue un gran golpe hacia el movimiento LGTBI.
Mariela Muñoz, otra gran activista transgénero por los derechos de las personas LGTBI y la primera persona en arrancarle al Estado el reconocimiento de su identidad de género autopercibida en el DNI allá por 1997. Fue un ejemplo de lucha contra el patriarcado, pero también una sobreviviente porque falleció a sus 73 años de edad cuando en nuestro país el promedio de vida de las personas trans es de apenas 35 años. La causa de esta cifra escalofriante radica en la falta de acceso a la salud, a los tratamientos hormonales adecuados, al trabajo formal, a la educación; a todos aquellos derechos que este sistema niega a las personas que se atreven a vivir una sexualidad fuera de los marcos del patriarcado.
También hay que recordar a Maite Amaya, luchadora de la libertad y por los derechos de las “putas, las tortas, y los travas”, por el aborto legal seguro y gratuito y de todos los derechos de las mujeres. Que se reivindicaba como disidente sexual y sabía de qué lado quería estar: junto a las y los laburantes, las y los estudiantes, a los que la vida les es difícil por la precariedad, “las comadres” y las y los disidentes sexuales.
TV Basura
Cambiemos durante su campaña electoral pretendió tener un guiño “transfriendly”, por ejemplo, cuando Larreta fue fotografiado con quien en ese entonces era conductora de un programa emitido todos los mediodías por Telefé, Florencia de la V. Una foto engañosa porque Cambiemos lejos está de preocuparse por las trans que no cuentan con los privilegios de la ex vedette, es decir la inmensa mayoría. No olvidemos las declaraciones de Macri en el 2008 cuando proponía que las travestis que se prostituían fueran trasladadas a 3 de Febrero.
Somos testigos de cómo los funcionarios de los gobiernos y los medios de comunicación alimentan un sentido común con ideas y lenguajes homolesbotransfóbicos.
Declaraciones como que la “homosexualidad es una enfermedad” o una “desviación no deseada”, que no somos personas “cien por ciento sanas” salieron de la boca del actual presidente de la Nación. Tuvimos que soportar los dichos de Gabriela Michetti durante la última campaña electoral en la que hacía demagogia diciendo “arrepentirse” de haber votado en contra de la Ley de Matrimonio Igualitario, pero que esto había sido solamente porque le “hacía ruido” y pensaba en los hijos que podíamos adoptar las personas LGTBI. En 2012 el ahora Ministro de Economía, Nicolás Dujovne, utilizaba su cuenta de tweeter para ridiculizar a Diana Sacayán que se encontraba en el programa 678 festejando la aprobación de la Ley Nacional de Identidad de Género.
No íbamos a esperar menos del Papa Francisco, representante de una institución que es la primera en ponerse en contra del matrimonio igualitario o del aborto. Que teniendo a su alcance a millones de personas en todo el mundo no duda en comparar con total desenvoltura a las personas trans con armas nucleares. Señala todo estos como pecados que no reconocen el orden de la creación y van en contra de Dios, pero a la hora de encubrir abusadores hace oídos sordos y mira para otro lado.
Esa ideología homofóbica y retrógrada es el caldo de cultivo que alimenta los crímenes de odio, y se amparan en el discurso reaccionario y clerical de la iglesia para luego cobrarse la vida de luchadoras como Diana.
Contra este discurso y sumadxs al grito del #NiUnaMenos este miércoles vamos a gritar ¡BASTA DE TRAVESTICIDIOS! Para reivindicar las luchas de nuestras compañeras trans y que sus muertes no puedan ser obviadas.
Por eso, este miércoles, gritamos por Diana Sacayán, referente del activismo e impulsora de las leyes de Matrimonio Igualitario, de Identidad de Género y de Cupo Laboral Trans. Brutal travesticidio del que en octubre se cumplen dos años y por el cual la Comisión de familiares, amigos y compañeros organizaron el 28 de junio pasado la primera marcha en contra de los Travesticidios.
Gritamos por Laura Moyano, asesinada en la madrugada del 25 de julio de 2015 en el barrio Villa Allende de Córdoba. Crimen puesto en duda por la justicia y por el cuál no existen aún detenidos ni culpables.
Gritamos por Marcela Chocobar. Cuya denuncia de desaparición hecha por parte de los familiares fue primeramente rechazada por la policía de Río Gallegos que sostuvo en principio que debía de “andar enfiestada por ahí”. Para una semana después encontrar parte de sus ropas y cuerpo sin vida en un baldío de la zona.
Ni una trava menos
Para el militante del PTS/FIT Tomás Máscolo: “Es necesario avanzar en la organización de miles de mujeres y personas LGTBI junto a las y los trabajadores y estudiantes, para poner en pie un movimiento amplio y extendido, de lucha, independiente del Estado y de todas las variantes políticas que representan los intereses empresariales y desprecian nuestras vidas. Una fuerza combativa que dé una enorme batalla para enfrentar la violencia machista, los travesticidios y los femicidios”.
Salgamos a las calles a luchar, pongámonos en acción, haciendo verdaderamente real aquello que siempre decimos de que "si tocan a una, nos organizamos miles".