Sábado 29 de noviembre de 2014
Tras el paro convocado por el Supeh (Sindicato Unido de Petroleros e Hidrocarburíferos) contra el impuesto al salario hace pocos días, esta semana volvieron a estar bloqueados los accesos a la refinería de Luján de Cuyo. Esta vez, el paro fue convocado por la Federación Nacional de Yrabajadores de Petróleo y Gas Privado, por la anulación de las elecciones en las que, escándalo
mediante, el massista Sergio Roberti se habría impuesto sobre el kirchnerista Dante González.
A principios de octubre pasado, las elecciones del Sindicato de Trabajadores del Petróleo y Gas Privado terminaron en un escándalo y con su anulación por parte del Ministerio de Trabajo, luego de que la lista Naranja, ligada al diputado nacional por el Frente Renovador Sergio Roberti, le ganara al oficialismo encabezado por el diputado kirchnerista Dante González. Con acusaciones mutuas de agresiones, robo de urnas y pago de votos, las elecciones en las que González había perdido tras 25 años al frente del gremio, fueron anuladas y se fijó una nueva convocatoria para principios de 2015, aunque aún no fue confirmada la fecha.
Desde la Federación Nacional, ligada a la lista Naranja supuestamente ganadora, lanzaron un paro por 48 horas, que se desarrolló el martes y miércoles pasados, y que incluyeron bloqueos a los accesos de la refinería de Luján de Cuyo. Los bloqueos impidieron el ingreso de personal contratado de la refinería, ya que los efectivos se encuentran en su mayoría afiliados al Supeh, el otro gremio petrolero.
Dante González salió al cruce del paro, y en vario medios locales acusó a la Federación Nacional de querer "quedarse con el último bastión, que es Cuyo, tras haber perdido representación entre muchos trabajadores de todo el país".
Mientras el kirchnerismo y el massismo se disputan la conducción del gremio, los trabajadores petroleros siguen sufriendo la precarización laboral y la persecución de las patronales, como mostró La izquierda Diario esta semana.
En el caso de Mendoza, tanto esta disputa entre el kirchnerismo y la oposición patronal, como el paro convocado por el Supeh de hace algunos días, puso al descubierto la realidad de los trabajadores petroleros, que nada tiene que ver con las internas de los partidos patronales.
