El círculo cercano a Martínez Justo se conforma con militantes de varios partidos políticos, estos están repartidos en distintos cargos dentro de la FES Acatlán.
Miércoles 22 de agosto de 2018
La semana anterior fue presentada María Guadalupe Alonso Quintana como Jefa del Programa Político de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán (FES Acatlán), el campus más grande de la Universidad Nacional Autónoma de México después del de Ciudad Universitaria.
Alonso Quintana se sumó a la polémica administración de Manuel Martínez Justo, después de que organizara durante el mes de junio de este año el Primer Modelo Legislativo para alumnos de Acatlán en el recinto que alberga al Poder Legislativo del Estado de México. Y es que María Guadalupe Alonso Quintana es diputada local y está a cargo de la Comisión de Asuntos Indígenas.
El caso de la legisladora panista en activo, que ahora se desempeña como funcionaria de la Universidad, no es aislado. Es conocido que el Secretario de Estudios Profesionales de la FES Acatlán, Rodrigo Zenteno Gaeta, es también Coordinador General de Asesores de la Presidencia Municipal del Ayuntamiento de Tlalnepantla de Baz. Tanto Alonso Quintana como Zenteno Gaeta asumieron funciones administrativas universitarias y el pago por las mismas, sin dejar de recibir los sueldos y las compensaciones de sus cargos gubernamentales. La legislación de la Universidad en este sentido es clara, pues no permite “la acumulación de empleos, y en consecuencia, los funcionarios o empleados de la Universidad sólo podrán desempeñar el cargo administrativo que les haya sido conferido”.
No es el caso del equipo cercano del director Martínez Justo, pues una vez que fue designado director de la Facultad e incluyó a funcionarios de gobiernos locales en su equipo de trabajo, aunque éstos presentaron su renuncia en las administraciones municipales próximas a concluir. Tal es el caso de Christian Salazar Montiel, quien se desempeñaba como Secretario de Planeación de Uruapan, y de Alberto Guerrero Meneses, quien era Jefe del Área de Difusión Social de la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del mismo municipio. Martínez Justo invitó al primero a fungir como Coordinador de Gestión de la Facultad, y al segundo como Coordinador de Comunicación Social.
No sólo la estructura administrativa de la Facultad ha acogido a burócratas gubernamentales, también la estructura académica ha sufrido modificaciones para albergar a funcionarios y ex funcionarios. Alumnos de la FES Acatlán denunciaron en redes sociales que sus profesores han sido reemplazados por “políticos priístas de segundo y tercer nivel que han entrado bajo el cobijo del director”.
Los vínculos con los políticos y expolíticos que hoy desempeñan funciones académicas y administrativas en Acatlán surgieron de los servicios profesionales de asesoría y capacitación principalmente en contraloría municipal y diplomacia local brindados por Manuel Martínez Justo en el pasado, como el curso-taller “Entrega –recepción de la administración municipal 2015-2018” impartido en Uruapan, Michoacán, cuando el hoy director era solamente Profesor de Tiempo Completo Definitivo de la UNAM.
No es la primera vez que esto ocurre en la Universidad. En el año 2000, el político y académico Francisco Paoli Bolio expresó a propósito de la incorporación de priístas al cuerpo docente y administrativo de la Máxima Casa de Estudios: “la UNAM no puede ser vista ni sería admisible que fuera basurero del gobierno que termina (…) ni puede utilizarse como trinchera político-académica, en espera de mejores tiempos para regresar a la nómina oficial”. La legislación de la institución no es ajena a este tipo de asuntos, pues considera como una falta grave de responsabilidad “El desarrollo de actividades que tiendan a destruir los principios básicos de la Universidad, así como las de índole política que persigan un interés personalista”.