Con este nombramiento en el Ministerio de Seguridad, el gobernador refuerza el régimen de persecución gremial, social y político en la provincia que se suma a la asunción de Ekel Meyer en el Superior Tribunal de Justicia de la provincia.
Juan Rovere @juanroverepts
Martes 22 de diciembre de 2020 19:44
La creciente protesta social en la provincia tuvo en los recientes nombramientos una primer respuesta de Morales quien apuesta a blindar el régimen represivo en Jujuy. Primero haciendo nombrar en el Superior Tribunal de Justicia de la provincia a Ekel Meyer, principal brazo ejecutor de la persecución a organizaciones sociales, sindicales y disidentes políticos. Y ahora, en su reemplazo en el Ministerio de Seguridad es nombrado el actual Jefe de la Policía de la provincia, Guillermo Corro.
¿Quién es el comisario Corro?
Fue la mano derecha de toda la gestión de Ekel Meyer, encabezando los operativos dispuestos por el ministro asumiendo la jefatura de policía en dos momentos.
Su primer cargo fue el de Coordinador General de Seguridad dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública, colaborando en los operativos persecutorios al inicio del gobierno de Gerardo Morales y que terminaron con la cárcel de la dirigente Milagro Sala.
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Pocos meses después, en abril de 2017 un nuevo escándalo sacudía la provincia con el ingreso de la policía a la Facultad de Ciencias Agrarias deteniendo al presidente del Centro de Estudiantes. Como forma de descomprimir el descontento social, Morales designó a Guillermo Corro como Jefe de Policía de la provincia.
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Pero eso no significo un cambio en la política represiva, sino que el nuevo jefe llevó adelante las represiones a los trabajadores del Ingenio La Esperanza y organizó el operativo de traslado ilegal de los detenidos desde las comisarias de San Pedro y La Mendieta hacia el penal de Alto Comedero. En abril de 2018, un años después de asumir, llevó adelante la represión a los manifestantes que protestaban en el inicio de sesiones legislativas y que derivo en un juicio contravencional contra dirigentes políticos, sociales y gremiales.
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Entre otros favores al régimen represivo, Corro realizo la detención de los estudiantes de los CEIJA’s, jóvenes que protestaban por el cierre de los colegios que les estaba permitiendo terminar el colegio. Junto con ellos fueron detenidos estudiantes solidarios y la concejal del PTS – Frente de Izquierda Andrea Gutiérrez.
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En diciembre de 2019, fue designado secretario de Relaciones con la Comunidad del Ministerio de Seguridad hasta junio de 2020, para volver a la jefatura de la policía luego de que dos policías fueran acusados de iniciar el brote de coronavirus en la provincia después de cruzar ilegalmente a Bolivia en busca de hojas de coca.
Corro, quien colaboro durante el inicio de la cuarentena con Ekel Meyer siguió llevando adelante la política represiva y el encubrimiento del asesinato de Ariel Valerian en una comisaria de Alto Comedero.
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Uno de los últimos hechos represivos del entonces jefe de policia, Guillermo Corro, tuvo que ver con la detención de los dirigentes del SEOM Santiago Seillant y Ariel Wayar durante una protesta en el marco de un paro por 48 horas.
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Estos son sólo algunos de los antecedentes de quien fue designado como Ministro de Seguridad de la provincia, lo que muestra que el gobierno de Morales busca reforzar el régimen de persecución y represión frente a la creciente demanda social, gremial y política en la provincia.