×
×
Red Internacional
lid bot

MANIFESTACIONES EN EL ESTADO ESPAÑOL. Gran jornada de protestas en el Estado español contra la miserable subida en las pensiones

Decenas de manifestaciones en todo el Estado español en protesta por la subida del 0,25% de las pensiones y el saqueo de los fondos de la Seguridad Social.

Viernes 23 de febrero de 2018

Foto: @Cazatalentos

Este jueves miles de pensionistas organizados a través de diferentes asociaciones de Jubilados han vuelto a salir a las calles de más de treinta ciudades del Estado para reclamar unas pensiones dignas y contra la subida del 0,25%.

Unas manifestaciones multitudinarias en ciudades como Madrid, Bilbao y Barcelona y que han demostrado una vez más el cabreo de millones ante el permanente saqueo a los fondos de la Seguridad Social y que mantiene titiritando la hucha de las pensiones públicas.

En Madrid, miles de manifestantes han conseguido algo insólito, romper el cordón policial próximo al Congreso de los Diputados, y han podido acceder y rodear el propio edificio de la Cámara Baja.

Minutos antes habían iniciado una concentración al grito de “Que vergüenza”, “Ladrones, ladrones” o “Nos las pensiones y también la dependencia”.

En el punto de mira de sus denuncias se encontraba una vez más Fátima Báñez, ministra de Empleo y Seguridad Social por la publicación de la subida de las prestaciones de un 0,25% prevista por el Gobierno para 2018. Además, la ministra ha sido duramente denunciada también por la carta que hizo llegar a todos los pensionistas explicando la revalorización del 0,25%.

En este sentido, los miles de pensionistas afectados también reclaman que se derogue el actual indice de revalorización al ritmo de la subida de la inflación.

Duramente criticada ha sido también Celia Villalobos, presidenta de la comisión del pacto de Toledo y diputada del PP, al recriminarle las declaraciones en las que afirmaba que “hay pensionistas cobrando más tiempo pensión que trabajando”.

En Barcelona, miles de pensionistas concentrados han llenado también la céntrica plaza Catalunya. Allí han puesto de manifiesto lo miserable de la subida del 0,25%, o lo que es lo mismo para muchos, una subida de un euro en sus pensiones. Es decir, después de trabajar toda la vida, ahora ven como el Gobierno y los mercados le siguen robando el fruto de su trabajo.

En Bilbao también han sido miles los pensionistas que han rodeado el Ayuntamiento con las mismas denuncias y exigencias, llenando hasta los topes los dos márgenes de la Ría del Nervión. Y así en un sinfín de ciudades más en todo el Estado español.

Sin duda, la jornada de protestas de este jueves pone de relieve el saqueo de los fondos de la Seguridad Social destinados a los millones de personas que tras una vida dura de trabajos precarios, recortes y pérdidas de derechos, esperan poder disponer de una pensión digna. Y es que mientras las pensiones suben un miserable 0,25% o son congeladas como los últimos ejercicios anteriores, el Estado mete la mano en la arca de los fondos públicos para correr con otros gastos.

Sin embargo, esto no es nada nuevo. La situación actual viene precedida por años y años de socavar los fondos de la Seguridad social como demuestran los Informes de la Intervención General de la Seguridad Social, que cuantificaron que desde 1990 a 2012 estos fondos financiaron con 72.371,5 millones de euros los complementos a mínimos. Obviamente nunca se compensó a la Seguridad Social por esos gastos que debían correr a cargo de los Presupuestos Generales del Estado.

En 2011, el Gobierno de Zapatero desvió 14.000 millones de euros de cotizaciones sociales hacia otros gastos de su interés. Este dinero nunca se devolvió a los fondos de reserva. Desde 2012 el Gobierno Rajoy ha seguido la misma línea que el PSOE y continúa con el saqueo de los fondos de reserva, pasando de 63.008 millones de euros a los 8.095 millones actuales.

Ante todo ello, hoy es más importante que nunca que todas las organizaciones políticas, sociales y sindicales de izquierda den todo su apoyo a las demandas de los pensionistas. Empezando por Podemos, los comunes y los grandes sindicatos de CCOO y UGT. Organizaciones que por su peso deberían ponerse a la cabeza de un movimiento en las calles que lleve a la convocatoria de una huelga general para acabar con la política de saqueo del Gobierno que en la práctica lleva a una mayor pérdida de poder adquisitivo para la mayoría de los trabajadores y las clases populares.