El intendente de Ezeiza concurrió al ostentoso festejo de los 150 años de la Sociedad Rural mientras en las barriadas del municipio, los habitantes siguen reclamando obras de infraestructura.
Jueves 14 de julio de 2016
El último fin de semana el intendente de Ezeiza, y ex integrante del potencial gabinete de Daniel Scioli, Alejandro Granados concurrió a una pomposa celebración en la oligárquica Sociedad Rural Argentina. Fue con motivo de la celebración del 150 aniversario de la inauguración de esta nefasta institución promotora del genocidio de los pueblos originarios, y protagonista negativo y determinante en la vida política de la Argentina del siglo XX.
Lejos, lejísimo, parece estar el señor Granados de la situación de miles de trabajadores de las barriadas de su municipio. Por ejemplo, en el barrio "Sol de Oro" de la localidad de La Unión, partido de Ezeiza, la gente hace verdaderas peripecias para salir de entre el barro de sus calles después de cada lluvia. Las cloacas, por supuesto, son prácticamente una utopía. En verdaderos pantanos se transforman las calles de los barrios periféricos de Ezeiza y caminos con algunas mejoras, son los menos en pleno siglo XXI. Hay casos de familias con niños que tienen discapacidades que están, verdaderamente, en serios problemas para poder movilizarse cada vez que cae una tormenta.
Claramente definida quedó la posición del intendente Granados, festejando con la “cream de la cream” a 150 años del nacimiento de la Sociedad Rural de la mano del gobierno de Mauricio Macri. El "Sheriff" como solían decirle, el mismo que formaba escuadrones "mata guachos" y que fue hombre del menemismo, reciclado en duhaldista y luego kirchnerista. El mismo que compuso el potencial gabinete de la formula "Scioli presidente", que según los kirchneristas era "la única opción" contra el ajuste que se venía con Macri. Este señor festeja con las patronales del campo la inmensa transferencias de recursos desde la clases populares con la que se ven beneficiados desde hace siete meses a la fecha, mientras el barrio "Sol de oro" de la Unión en Ezeiza es lo más parecido a un chiquero.