En el centro migratorio Siglo XXI en Chiapas, elementos de la Guardia Nacional reprimieron a migrantes haitianos y africanos cansados de las deplorables condiciones en las que los mantienen.
Óscar Fernández @OscarFdz94
Miércoles 26 de junio de 2019
Foto: María de Jesús Peters (El Universal)
Los migrantes habían sido retenidos por días en uno de los anexos del centro migratorio Siglo XXI, en Chiapas, en condiciones inhumanas como dormitorios de 3x4m, baños desbordados, hacinamiento, falta de alimento, abuso por parte de las autoridades y la presencia constante de ratas y cucarachas.
Esto provocó un motín, el cual fue contenido por las autoridades que no dudaron en utilizar a elementos del Instituto Nacional de Migración, la Policía Federal y la recién formada Guardia Nacional contra los migrantes para evitar su escape.
Una de las imágenes más impactantes fue la de una madre haitiana desesperada rompiendo en llanto frente a una cámara situada bajo el borde de una puerta con su hijo de 5 años. La mujer contó que se encuentra retenida con sus dos hijos y no ha recibido alimento:
"¡Por favor, por favor, ayúdame! Mi hijo está enfermo. Muchos días de sufrir. Pásame un poquito de comida. Todos los días no hay agua potable. ¡Ayúdame! ¡Libertad, libertad, libertad!", exclamó hacia la prensa que se encontraba en el lugar.
Posteriormente fue removida por elementos de la Policía Federal, que junto a las otras instituciones represivas trató de mantener a los migrantes alejados de las cámaras y los periodistas. Estos son los verdaderos efectos del pacto entre Trump y López Obrador para frenar la ola migratoria hacia Estados Unidos y que México se convierta en el freno para quienes pretenden llegar a suelo estadounidense.
Una vez que Trump amenazó con imponer aranceles, los presidentes de ambos países sostuvieron negociaciones en las cuales ratificaron una posición contra las oleadas y caravanas provenientes de Centroamérica, ante lo cual López Obrador envió 6 mil elementos de la Guardia Nacional a la frontera guatemalteca como fuerza represiva, situación que desde este diario ya anticipábamos en un artículo anterior.
A este sombrío panorama se añaden los cuerpos ahogados de Óscar Alberto y Valeria Martínez, dos salvadoreños que murieron intentando cruzar el río Bravo hacia EE.UU. El discurso que AMLO prometía de dar un trato humano a los centroamericanos contra la política de Peña Nieto del Plan Frontera Sur ordenado por Obama hoy ha quedado en letra muerta.
Óscar Fernández
Politólogo - Universidad Iberoamericana
