Los trabajadores del transporte local y de larga distancia se declararon en huelga este viernes. Se suman al conflicto que ya venían protagonizando los trabajadores de los aeropuertos. Las empresas se siguen negando al diálogo y a negociar los nuevos convenios y aumentos salariales ante la escalada inflacionaria.
Viernes 21 de abril de 2023 09:38

Los trabajadores de Deutsche Bahn y otras 50 empresas ferroviarias y de autobuses se declararon en huelga este viernes a pedido del sindicato ferroviario y de transporte (EVG). El tráfico regional y de larga distancia de Alemania, así como los trenes S-Bahn en todo el país, se paralizaron desde la madrugada. La reivindicación central del sindicato es un 12 % de aumento salarial tras el crecimiento de la inflación en el útlimo período.
El viernes y el sábado también hay huelgas en los aeropuertos de Colonia/Bonn, Düsseldorf, Hamburgo, Stuttgart y Karlsruhe/Baden-Baden tras la convocatoria del sindicato ver.di. Las disputas salariales en los aeropuertos se prolongan desde hace meses sin que se vislumbre una salida. Entre otras cosas, Ver.di exige pagos extras más altos por trabajar de noche, los fines de semana y los días festivos.
Ya el 27 de marzo, todo el sector del transporte se había declarado en huelga, junto con varios sectores de trabajadores públicos (TVöD). Hacía más de 30 años que no se producía una huelga de esta magnitud y con un impacto tan masivo en la infraestructura. Una expresión de que los trabajadores de diversos sectores no están dispuestos a tolerar la caída de los salarios reales frente a la inflación, un movimiento que se ve también en otros países de Europa como Francia o Reino Unido.
Sin embargo, las empresas se han negado hasta el momento a dar respuesta a las demandas. En el sector público, la comisión de arbitraje presentó una propuesta que es totalmente ruinosa para los trabajadores. Los ajustes solo contemblan pérdidas salariales reales para los últimos dos años y ningún aumento para este año. Escandalosamente, ahora estan aconcejando a las empresas de transporte ferroviario que sigan la misma propuesta que le hicieron a los empleados públicos.
En un comunicado la cámara que agrupa a las empresas ferroviarias y de transporte le dicen al sindicato "Estamos listos y preparados para acordar con ustedes un acuerdo ferroviario específico como parte de nuestra negociación colectiva el 25 de abril de 2023, cuyo efecto material se basa en el laudo arbitral del servicio público en puntos clave".
La carta también ataca el derecho a huelga mencionando las pérdidas que le ha provocado a las empresas y busca desligitimar la paralización del servicio para terminar logrando un acuerdo muy por debajo del 12 por ciento exigido por la EVG.
La lucha por el aumento de salarios y por las condiciones laborales o por la defensa de derechos históricos ha venido escalando en Europa, ya sea con el enorme movimiento contra la reforma de pensiones en Francia como con las huelgas masivas e históricas en Reino Unido o en Alemania. Sin embargo las direcciones sindicales suelen llamar a acciones aisladas unas de otras y a separar las jornadas de los distintos sectores en lucha, diluyendo su peso y fuerza. Esto ha permitido hasta ahora que gobiernos y empresarios se nieguen a negociar, sigan atacando o terminen ofreciendo aumentos muy por debajo de los pedidos. Como muestran todas estas acciones, la fuerza de la base entre los trabajadores de distintos sectores está intacta. Para ganar es necesario la convocatoria a una huelga generalizada y por tiempo indeterminado que ponga todo el peso de la clase obrera en la calle, mostrando que sí se puede descargar la crisis sobre los que la crearon, los empresarios y los capitalistas, y no sobre los trabajadores como lo vienen haciendo hasta ahora.