Relaciones México-Estados Unidos. Inicia tercer Diálogo de Alto Nivel en Seguridad

La reunión fue precedida por Rosa Icela, quien dio la bienvenida a la delegación estadounidense y presentó el orden de las participaciones. No escatimó en halagos a la cooperación entre ambos países para hacer frente a los temas de seguridad y migración, destacando la “soberanía” con la que es abordado el tema.

La delegación mexicana está compuesta por Alicia Bárcena Ibarra (secretaria de Relaciones Exteriores), Rosa Icela (secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana), Gertz Manero (fiscal general de la república), Luisa María (secretaria de Gobernación), Luis Crecencio Sandoval (titular de la Sedena), José Rafael Ojeda Duran (marina), (embajador de México en EE. UU.) entre otros. Mientras que en la delegación estadounidense estuvieron presentes. Antony Blinken (secretario de estado), Merrick Garland (fiscal general de justicia), Alejandro Mayorkas (secretario de Seguridad Nacional), Elizabeth Sherwood-Randall (directora de seguridad transfronteriza y asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Ken Salazar (embajador de EE. UU. en México), entre otros funcionarios encargados de departamentos de antinarcóticos, migración y antiterrorismo.

Ambas delegaciones agradecieron el diálogo y cooperación bilateral que esperan pueda fortalecerse a futuro. Aprovecharon para agradecer la cooperación para la extradición de Ovidio Guzmán, una verdadera “medallita” del gobierno de México. Reiteraron que continuarían con la colaboración para detención de bandas criminales en territorio mexicano.

Aunque la delegación mexicana quiso poner por delante la soberanía de ambos países, ha quedado claro el involucramiento de fuerzas estadounidenses en territorio mexicano en materia de seguridad.

Lo que llama la atención es que en esta ocasión, a diferencia de las dos reuniones anteriores, se integra el tema de migración, y aunque ambas delegaciones apuntaron a que se trataría el trasfondo del problema migratorio, es preocupante que se aborde en un diálogo que habla sobre “seguridad”, sobre todo porque, más allá de la retórica “humanista” del gobierno mexicano sobre la migración, lo cierto es que la Guardia Nacional sigue siendo el muro humano que ha detenido y deportado a miles de migrantes centroamericanos en su paso por México, sobre todo en la frontera sur. Y ha sido precisamente la promesa de detener el flujo migratorio en México una condicionante para algunos de los puntos del TMEC.

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