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Red Internacional
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EDUCACIONAL. La desigual contienda entre los trabajadores de la educación y Piñera

A través de la Dirección del Trabajo, Gobierno quita derechos que igualan condiciones laborales de asistentes de la educación.

Miércoles 25 de septiembre de 2019

Hace algunos meses atrás se promulgo la ley miscelánea, que consistía en igualar derechos laborales a Asistentes de la Educación de colegios particulares subvencionados con aquellos que ejercen labores en escuelas y liceos municipales, dentro de estos se encontraban la media hora de colación incluida en la jornada laboral, la reducción de horas de 45 a 44 de la jornada laboral, vacaciones de invierno y verano igual que profesores y profesoras.

Claro que la respuesta de los sostenedores de estos colegios no se hizo esperar, solicitando a la dirección del trabajo que se pronunciara respecto a esta ley, la cual evidentemente beneficiaria a miles de trabajadores. En complicidad con la dirección del trabajo, la cual encabeza Mauricio Peñaloza Cifuentes elegido por el presidente Sebastián Piñera, esta resuelve que “los y las trabajadoras asistentes de la educación que cumplen funciones administrativas o auxiliares en establecimientos particulares subvencionados, se regirán por la normativa del Código del Trabajo y no por la nueva ley 21.152 de los Asistentes de la Educación Pública", arrebatándoles el feriado legal y otros derechos contemplados en ella un día antes de que muchas y muchos de ellos por fin pudieran tomar las vacaciones mencionadas en la ley.

Los sostenedores continúan con el ataque de Piñera

No contentos con todo esto, los sostenedores de colegios particulares subvencionados continuaron con la seguidilla de ataques a las y los trabajadores, poniendo de inmediato a funcionar el dictamen de la DT sin contemplaciones, peor aún, ingresando un recurso de protección a sus “negocios” Además de esto, para proteger aún más sus intereses, el pasado 26 de agosto el mismo grupo de sostenedores ingresó en el Tribunal Constitucional una solicitud de inaplicabilidad del artículo 56 de la Ley 21.109, por ser inconstitucional y porque según ellos dañan profundamente el patrimonio de cada sostenedor, pone en riesgo el servicio educacional.

¿Qué defensa tienen las y los trabajadores?

¿Que rol cumple la dirección del trabajo?

La gran duda de miles y miles de trabajadores, quienes cada día vemos con impotencia como resuelven y fallan a favor de empresarios inescrupulosos que pueden llegar a hacer hasta de los derechos más básicos un negocio lucrativo y “legal”.

Por el momento toda vía legal es fallo a favor de quienes hacen las leyes, de quienes ven mermados sus negocios por los “fastidiosos” trabajadores y sus derechos, pero, ¿qué rol cumplen también las centrales de trabajadores?

Sin una unidad concreta de todas y todos los trabajadores, un movimiento en defensa de estos para hacer frente a los sostenidos ataques de este gobierno, todo lo que sea por vía legal es un terreno ya conocido por ellos y lo deshacen como podemos ver a través de vías como el Tribunal Constitucional, caracterizado por beneficiar a quienes mantienen sus negocios a costa de la precarización de miles de trabajadores.

Con un Colegio de Profesores que, a pesar de la fuerza de miles, decidió claudicar ante la nada de este gobierno, donde ni siquiera mencionaron la Ley Aula Segura, que reprime a estudiantes inescrupulosamente en todo el país, donde sus cúpulas insisten en su gremialismo, el cual no hace más que dividir las luchas por los derechos de trabajadores de la educación.

Somos todas y todos compañeros de la misma área, trabajamos en educación, en los mismos establecimientos, haciendo funcionar juntos la institución educativa. Pero la división a la que nos lleva la ley de los empresarios y su gobierno, con contratos y derechos distintos, se va a mantener si los dirigentes de nuestras organizaciones siguen con reclamos y luchas separadas, siendo que la unidad como trabajadores de la educación es la única manera de derrotar al gobierno y su intento de dividirnos
Que mejor defensa que la unidad de miles en las calles, que mejor defensa que activar la central unitaria de trabajadores, no podemos permitir el constante y descarado ataque a nuestras vidas con sueldos de hambre, con jubilaciones que matan en la más profunda miseria a miles de ancianas y ancianos, con la salud y la educación convertidas en un lucrativo negocio para un puñado de miserables empresarios, nos queda pensar una y otra vez ¿Cuándo es el tiempo?¿Cuándo y quienes tienen el poder de dar vuelta todo?

Está en nuestras manos arrebatarles lo que nos pertenece.