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Red Internacional
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San Lorenzo. “La red de incendios de Vicentin no andaba”

La semana pasada nuevamente Vicentin fue noticia. En la planta del puerto de San Lorenzo tuvieron que actuar los bomberos para sofocar un incendio en uno de los silos, pero no es la primera vez: en las plantas cerealeras o en el puerto de Rosario abundan las condiciones inseguras y los accidentes. Los trabajadores denuncian vaciamiento y falta de inversión en seguridad.

Miércoles 28 de agosto 10:23

“Les quería contar que por el incendio ahí en el silo de Vicentin tuvimos que hacer malabares, la situación está muy precaria ahí en Vicentin”, escribe un trabajador a nuestro diario. El martes a última hora del día un silo se prendió fuego.

Y hubo controversias: pese a que en la planta parte del personal pertenece a la brigada de incendios,
tuvo que sofocarlo bomberos de la prefectura. ¿La razón? Falta el mantenimiento indispensable para que los trabajadores puedan realizar sus tareas con los elementos mínimos de seguridad. Y los antecedentes son graves: explosiones de silos se han cobrado la vida de trabajadores, como en el caso de la ex Nidera COFCO de Puerto general San Martín en el 2017, el incendio de silos en Vicentin en 2018, la muerte de un trabajador en 2020 en su planta de San Lorenzo o recientemente el fallecimiento de otro por falta de condiciones seguras de trabajo en el puerto de Rosario, controlado también por Vicentin.

“La red de incendios no andaba. La que se tenía que utilizar para apagar el silo no estaba en condiciones, faltan accesorios, están tapados los caños que se usan para conectar la manguera para poder apagar el fuego. Por suerte se destapó uno de los hidrantes y con los muchachos del puerto que vinieron a darnos una mano pudimos tirar una línea y mantener estable el silo porque si no nos llegamos a enfriar se venía para abajo. Pero igual, todo muy precario”, relata un laburante sobre el incendio del martes.

Vicentin robó, estafó y (quiere) huir

Para los dueños es muy fácil porque no están ahí en la situación, expuestos. Están en sus casas. En esta planta falta mucho mantenimiento, todo es muy precario; no hay inversión estructural y tampoco en seguridad. Lo peor de todo es que la gente hace su trabajo: la gente de seguridad gestionó los pedidos de materiales, de los hidrantes tapados, la gente está capacitada, pero bueno, falta el aporte de arriba, que es el económico para comprar lo que hace falta.”

A cuatro años del anuncio de expropiación y su marcha atrás por el presidente Alberto Fernández, el fraude por U$S 1.574 millones sigue sin resolución. Desde entonces los empresarios se deshicieron de acciones y vaciaron las empresas que controlan. La falta de mantenimiento potencia los riesgos para los trabajadores y la población. “Imagínate que explote un silo, no es algo así nomás. Ya lo vimos en Nidera y el desastre que hizo."

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“Lo que falta es inversión. Falta inversión porque hay cañerías de la red de incendio que están todas tapadas. En la celda 3, en la sobrecelda 3, está todo tapado. ¿Qué pasa? Ellos toman el agua directo del río con las bombas y bueno, en el río hay sedimentos, hay barro, hay conchillas del río, entonces lo que hace es que se tape toda la red incendio, se pinche, pierde por todos lados, no tienen la presión que debe tener la red incendio para poder apagar algo en altura y bueno, como esas un montón de cosas. Faltan mangueras. Por ejemplo en el sector ese que se prendió fuego el silo, no había mangueras, no había un hidrante ahí al lado, estaban tapados los hidrantes que estaban un poco más retirados de la cinta… Hay túneles que por ahí no tienen salida, una entrada nomás, no tienen una salida de emergencia. Si te llega a pasar algo, quedás a la buena de Dios ahí abajo, que te saque monchota. Es un peligro.”

“Todo lo que es el personal de Vicentin hace su trabajo, está capacitado, respondió como tenía que responder, pero a la hora de llegar allá arriba no tenían los materiales para poder apagar, tuvieron que salir corriendo a buscar a otro lado lo que conlleva un montón de tiempo; traer las mangueras de otro lado, subir por las escaleras, toda una demora que es innecesaria, que se supone que ante un evento así tenés que tener todo a mano para poder apagarlo. Pero sobre todo es falta de inversión. En las extracciones también hay pérdidas de hexano, de solvente que es explosivo, que es nocivo para la salud de los trabajadores. Está muy deteriorada la fábrica estructuralmente y bueno, la gente de Vicentin se ve que ya está yendo y no quieren poner un mango. El que se expone es el trabajador.”

La estafa de Vicentin no la pueden pagar los trabajadores y la población con su vida. El gobierno de los Fernández amagó en el 2020 y luego reculó. La izquierda propone la expropiación y gestión de sus trabajadores. Pero mientras tanto, el sindicato puede pelear por condiciones seguras de trabajo, imponiendo comités de seguridad independiente de los empresarios vaciadores, eligiendo sus miembros en asamblea entre los compañeros más capacitados y que puedan parar las tareas riesgosas para defender la vida de los trabajadores.