Jueves 11 de septiembre de 2014
En estas elecciones el PSOL de Luciana Genro recibió un aporte financiero de la quinta mayor red de hipermercados del país, el grupo Zaffari. Esto no es novedoso. En las elecciones anteriores este partido recibió dinero de la empresa Gerdau, uno de los mayores monopolios de acero de Brasil; de Marcopolo, una de las mayores industrias de fabricación de ómnibus; de Taurus, una de las mayores empresas de armas del mundo y de otras empresas que financiaron la candidatura de Edimilson Rodrigues para la intendencia de Belém en 2012.
Alianza con los partidos de la “vieja política”
La principal figura parlamentaria del PSOL es el senador Randolfe Rodriguez. Su “feudo” electoral es el estado de Amapá, donde va como candidato a vicegobernador en la lista de Camilo Capiberibe, miembro del Partido Socialdemócrata Brasileño (PSB) de Marina Silva, actual gobernador y candidato a la reelección en una coalición con el PT de Dilma.
En Pernambuco, el PSOL va en coalición con el Partido de la Movilización Nacional (PMN) conocido por su apoyo al ex presidente Fernando Collor de Mello. En estas elecciones, el PMN integra la coalición en el plano federal nada menos que con el partido de Aécio Neves.
En Alagoas, el PSOL de Heloísa Helena recibió el apoyo del Partido de la Socialdemocracia Brasileño (PSDB). Sin embargo, dada la histórica proximidad con Marina Silva, no debería sorprender que también reciba de ella alguna ayuda.
Gobierno al servicio de los capitalistas en Macapá
En Macapá, capital del estado de Amapá, el PSOL fue elegido en 2012 en una amplia coalición que incluyó al Partido Comunista Brasileño (PCB) y contó con apoyo del partido Demócrata (DEM) y del PSB. Actualmente gobierna junto a los más variados partidos burgueses, respetando la llamada “Ley de Responsabilidad Fiscal” que obliga a los gobiernos a postergar gastos sociales para garantizar el pago de intereses y amortizaciones de deudas con los grandes millonarios e inversores internacionales. Con tal fin, reprimió con la guarda civil municipal a los profesores en huelga por mejoras salariales y en defensa de la educación.
Candidatos reaccionarios
La “frutilla del postre” del PSOL son los candidatos reaccionarios que han tomado estado público en estas elecciones, concentrados curiosamente en la ciudad de Río de Janeiro: la sionista Solage Pacheco que defendió al Estado de Israel frente a las masacres en Gaza; el policía militar Paulo Ramos sobre el cual pesan denuncias de vínculos con grupos de exterminio; y el pastor homofóbico Jefferson Barros.
El discurso engañoso de Luciana Genro
Luciana afirma que su candidatura es “de enfrentamiento con los bancos”, que hará una “auditoría de la deuda pública” y “aumentará los impuestos a las grandes fortunas”. Pero el gobierno del PSOL en Macapá “reza el rosario” del capital financiero y gobierna en armonía con los capitalistas. Luciana dice que no acepta dinero de empresas y multinacionales y defiende el financiamiento público de la campaña. Pero ¿qué son entonces la Gerdau y las empresas que financian la candidatura de Edmilson en Belém? Afirma ser la voz de las manifestaciones de Junio pero la empresa Marcopolo lucra con el sistema privatizado de transportes. Se posiciona contra el genocidio sobre la juventud negra en las favelas pero tal genocidio es llevado adelante con armas de empresas como la Taurus. Cada centavo que proviene de estas empresas se obtiene de la explotación de sus trabajadores. Afirma estar en contra de la precarización del trabajo pero en el Congreso apoyó la Ley de Supersimples, que autoriza a las pequeñas y medianas empresas a flexibilizar los derechos laborales.
Muchos jóvenes y trabajadores que rechazan votar al PT y a otros partidos capitalistas ven al PSOL como una alternativa, sin embargo, este apego por la “vieja política” que, como hemos visto, salpica las más amplias prácticas del PSOL, desde los cogobiernos, la financiación, hasta sus candidatos, se contraponen abiertamente con la necesidad de la juventud y de los trabajadores de fortalecer sus luchas, como las que vienen dando en forma creciente desde las jornadas de junio del año pasado.