En medio de la pandemia, buscan aprobar un convenio con la multinacional para la investigación de las formaciones de Vaca Muerta, Los Molles y Agrio, en Neuquén, para fracking. El trasfondo de los intereses del Gobierno de Fernández en la búsqueda de dólares para el pago al FMI. Universidad para los negocios y al que no le gusta, se jode.
Lucien Kerplunk @LuK3rplunk - Alerta Roja
Domingo 21 de junio de 2020 20:19
¿De qué se trata el convenio?
Según el proyecto que circuló en estas horas (que publicamos abajo), la finalidad del convenio que el decano Juan Carlos Reboreda de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (FCEN), busca aprobar, en un nuevo gesto de entrega de la universidad pública al servicio de las empresas extractivistas, es “mejorar la comprensión de la geología de los sistemas no convencionales de las formaciones Los Molles, Vaca Muerta y Agrio [...] y detección de los intervalos más productivos de estas unidades”. La Cuenca Neuquina es El Dorado para las empresas de hidrocarburos, y una “zona de sacrificio” para el modelo extractivista. Disponer de esta información le permitirá a Shell y otras empresas obtener nuevos beneficios económicos, sobre la base de “sistemas no convencionales”, un eufemismo para el repudiado método de fractura hidráulica conocido como fracking, mediante el cual se extrae gas y petróleo “shale”.
La Facultad se compromete a “Suministrar el lugar físico y la utilización del equipamiento existente [...]con el objeto de desarrollar las tareas previstas en este Convenio”. Por su parte, la empresa aportará 30 mil dólares en tres pagos consecutivos anuales por el “asesoramiento técnico”, (un vuelto para el gigante petrolero).
Las cláusulas del convenio establecen que la FCEN y el CONICET podrán disponer de la información científica que resulte de la investigación, pero si los investigadores quisieran publicar sus trabajos la multinacional petrolera es la que decidirá si se pueden publicar o no, es decir que tiene poder de veto.
El acuerdo con Shell no sería el primer convenio de la UBA con empresas. La FCEN, por ejemplo, tuvo convenios con Pan American Energy y Papel Prensa. Es el modelo de “Extensión universitaria” de la Ley de Educación Superior, vigente desde 1995 y sostenida desde entonces por todos los gobiernos, en este caso en el área de posgrado. Poco o nada interesa si las empresas privadas disponen del conocimiento producido en la Universidad para mejorar técnicas como el fracking, que atentan contra la biodiversidad, no tienen en cuenta la dinámica y los procesos naturales de los ecosistemas locales, ni el resguardo de los territorios y el buen vivir de sus habitantes. La lógica mercantilista del conocimiento científico es una herramienta de producción para la ganancia capitalista.
No podemos permitir que avance el lobby minero y petrolero. En la Facultad podríamos, por el contrario, discutir la matriz productiva extractivista, demostrar las consecuencias devastadoras para el medioambiente y las comunidades, y proponer alternativas sustentables para una transición energética.
El detrás de escena: Vaca Muerta y el FMI
Mientras a nivel mundial se discute la necesidad de abandonar la dependencia a los combustibles fósiles, por su relación con la crisis climática y ecológica, el Gobierno de Alberto Fernández profundiza el rumbo extractivista. A fines de 2019 vimos cómo tuvo que dar marcha atrás el gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, con la norma que permitía la megaminería contaminante. Se había votado tras un acuerdo entre el Frente de Todos y la UCR. La reforma de la Ley 7722 no pudo pasar por el enorme repudio en masivas movilizaciones en toda la provincia y con apoyo nacional. Docentes, investigadores y estudiantes de la Facultad fuimos parte de apoyar este reclamo.
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En su último viaje a Neuquén, el presidente aseguró que “Vaca Muerta tiene un rol central porque es esencialmente producción que se exporta y genera divisas para el país”. Divisas para pagar la deuda externa, le faltó agregar a sus declaraciones, trascendidas luego de rescatar a las petroleras con el Barril Criollo, y beneficiarlas con retenciones del 0 % e inclusive con el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP). Un verdadero subsidio a las grandes fortunas.
En verdad, lejos de generar divisas, Pampa Energía, Shell, YPF, Petrobras, entre otras empresas del sector, fugaron USD 3.457 millones durante el mandato de Mauricio Macri.
El extractivismo asociado a la dependencia, con importantes costos sociales, económicos, ambientales y en la salud humana, ya no va más. Una salida a este modelo debe comenzar por el desconocimiento soberano de la deuda externa. Expropiación bajo control de sus trabajadores y trabajadoras de las empresas de hidrocarburos, megamineras y del agronegocio para terminar con el fracking y el monocultivo, con el objetivo de cambiar la matriz productiva en el camino de una transición energética. Esta es una de las propuestas que impulsamos desde el Frente de Izquierda Unidad como parte de un plan de conjunto de salida a la crisis en curso, medidas que solo podremos imponer con la movilización en las calles del pueblo trabajador junto a estudiantes e investigadores.
Sumate a una gran campaña de No al Convenio de Exactas con Shell
En Exactas tenemos una pelea muy importante contra el avance extractivista, que empieza por frenar este convenio. La conducción del Centro de Estudiantes (CECEN) dirigido por La Cámpora, tiene que repudiar este convenio y garantizar que la transmisión pública de la reunión del Consejo Directivo llegue por todas las redes sociales a todes les estudiantes y la comunidad educativa, para que puedan participar, expresar sus opiniones y abrir el debate. Estas propuestas fueron votadas en la Comisión de Ambiente del Centro de la cual participaron todas las agrupaciones y hubo un rechazo unánime al acuerdo con Shell. Pero como sabemos, los intereses empresariales en la universidad pública solo pueden frenarse con la fuerza de estudiantes, docentes e investigadores, el apoyo de la comunidad educativa y científica y de les trabajadores. Por eso desde la agrupación En Clave Roja y la Juventud del PTS hemos propuesto al Centro de Estudiantes una campaña que rechace este acuerdo. Si realmente la conducción de la Cámpora rechaza este avance de una de las principales petroleras del país en Exactas, debería poner todos sus recursos a disposición de esta pelea, como los centros de estudiantes, representantes docentes y en distintos gremios de la Ciudad para rechazar de plano que Shell entre en la Facultad.
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En esta perspectiva se vuelve fundamental el rol de todos y todas las estudiantes, y en especial de aquellos que pensamos que es necesaria una pelea porque la Ciencia no esté marcada por el lucro capitalista. Sumate a decirle No al Convenio de Exactas con Shell, a participar del tuitazo y difusión por redes con los hashtag #NoAlConvenioConShell
#ExactasUBA, #FueraContaminantesDeExactas, y a dar esta pelea con nosotros y nosotras.
Convenio entre Facultad de Ciencias Exactas y Shell by La Izquierda Diario on Scribd