Los versos surgen a borbotones de los dedos de los que han mandado a callar y que padecen en una letanía que alecciona vanamente a los parias del sistema.
Jueves 11 de agosto de 2016
PH: Nicolás Vives, publicada en el libro “Entre mandarinas y tumbas”
Desde un taller literario dentro de la Unidad penitenciaria n° 6 de Rosario, los versos surgen a borbotones de los dedos de los que han mandado a callar y que padecen en una letanía que alecciona vanamente a los parias del sistema. Los recuerdos, la rutina carcelaria y las ansias de un mañana. Se entremezclan en relatos costumbristas y sobrenaturales de vidas colmadas de heroicos fracasos y gris trajinar.
Los autores son Víctor Hugo Saldaño, Darío Roldán, Juan Alberto Aricaye, Víctor Fabián Molina, J.F., Iván Ezequiel Galarza, Víctor Manuel Álvarez, Raúl Ledesma e Iván Baiz. Sus voces fueron recopiladas en el poemario “Entre mandarinas y tumbas” por la poeta y dramaturga Ariana Daniele, que coordinaba desde octubre el taller literario dentro de la unidad penitenciaria.
Entre cuatro paredes las voces retumban calando las rejas y los huesos. Las voces se preguntan y responden sobre el porqué de la vida, de la existencia y del pasar de los cuerpos marcados. Las sensaciones de la niñez interpelan desde afuera, “el trinar de los pájaros lo hacen más real me imagino esos grandes montones de pasto/donde solíamos jugar a las escondidas/hasta el grito de pororero me hace imagina” relata Saldaño. Atravesando el encierro, la voz también responde: “afuera hay peores/Hasta le quitan el pan a los que no tienen” cuenta “Vitor” Saldaño. “Hay puños cerrados/confianza que serán escuchados sus gritos de pan y trabajo” clama Darío Roldán.
Las voces de “Entre mandarinas y tumbas” pueden leerse en la Biblioteca Argentina y en la librería “El juguete rabioso”.
Agua de Aljibe
También entre cuatro paredes, encontramos a otras dos protagonistas que gritan, desde el encierro más interno, una proclama íntima y carnal. La libertad también es un actor ausente y repercute en los gritos y los silencios.
Ellas son Clelia y Rina, y también miran afuera esperando a Grecia. Son personajes que nacen de la pluma de Ariana Daniele en una obra llamada “Agua de Aljibe” .
Los recuerdos de la infancia, “Ahí donde siempre soñamos con volver, la dulce inocencia que vestía los días…” como último vestigio de la libertad, y el vacío, casi de reclusión, como lugar para pensar hacia adentro de los huesos y hacia afuera de las paredes: “dicen que las grandes almas nacen donde hay casi nada”. Tan contradictorio como certero, el encierro que busca invisibilizar termina siendo el escenario.
La presentación del Libro "Agua de Aljibe" de Ariana Daniele. Tendrá lugar mañana jueves 11 a las 20h en Oui Bar de Sarmiento y Mendoza.
