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Red Internacional
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Provincia de Buenos Aires. Ley de Bosques PRO: a la medida del negocio inmobiliario y por más inundados

El territorio de la provincia de Buenos Aires solo cuenta con un 3 % de superficie de bosques nativos, por lo que es prioritario asegurar su protección. Aun así, esta Ley de Bosques, lejos de protegerlos, paradójicamente, avala emprendimientos inmobiliarios y extractivos en ellos, con consecuencias para toda la población.

Lunes 12 de diciembre de 2016 17:04

El miércoles 30 de noviembre en a la Legislatura Provincial se planeaba dar curso a la votación del Proyecto de Ordenamiento Territorial de bosques que permite arrasar con los pocos que quedan en Provincia de Buenos Aires. Distintas asambleas vecinales y organizaciones políticas y sociales como Inundados La Plata exigieron que no se vote, y frente a la fuerte presión de los manifestantes no se logró llegar a la mayoría. El miércoles próximo desde el recinto intentarán nuevamente votarla por mayoría simple. De aprobarse esta segunda sanción en Diputados, se da autorización inmediata para que las empresas desmonten legalmente miles de hectáreas de bosque. Frente al alarmante escenario una nueva convocatoria tendrá lugar el miércoles 14 de diciembre a las 13 horas en la puerta de la legislatura, calle 7 e/51 y 53 de La Plata, para repudiar esta maniobra y exigir una Ley de Bosques que proteja los intereses de la mayoría de la población y no atente más sobre la misma.

El proyecto de ley fue presentado en el gobierno de Scioli por el PJ y votado en ese periodo por la Cámara de Senadores, quienes lo incluyeron en un paquete sobre tablas con una ley que aprobaba el presupuesto para obras hidráulicas para la cuenca del río Luján por las inundaciones. Paso a la Cámara de Diputados en el gobierno de Scioli durante el periodo del 2015 pero debido a las elecciones se frenó su aprobación. En 2016 asume el gobierno de Vidal y ahora es el PRO el más interesado en llevar adelante este proyecto.

Así como en otras provincias uno de los problemas es la megaminería y los agronegocios, en el AMBA es el hiperurbanismo. Desde el 2011 distintas asambleas vecinales, organizaciones sociales y profesionales (biólogos, abogados, geógrafos, entre otros) participan de las audiencias y talleres que se contemplan en el marco de la Ley, a fin de que diversas zonas de interés para los habitantes de cada localidad sean incluidas en el mapa de bosques confeccionado por el organismo de aplicación, el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS). Pero en el último mapa presentado por dicho organismo, se encontraron con una situación preocupante: se omitía información e incumplía el deber institucional. Muchos bosques no figuraban, y en otros casos el mapa se hizo acorde a los intereses inmobiliarios y negociados políticos. Así mismo, en lugar de tomarse estudios científicos de biólogos de UNLP y UBA presentados al mismo OPDS, este organismo prefirió utilizar los de consultoras privadas pagadas por la empresa multinacional Techint. Es decir, se trata de una Ley de Bosques a medida de intereses privados. Así, se transformó en una ley de entrega de bosques a grupos económicos dominantes para que puedan desmontarlos y urbanizarlos sin problemas, siendo de esta manera juez y parte de un negocio que transgrede derechos fundamentales para el desarrollo de la vida.

Particularmente, en el caso de Quilmes y Avellaneda sabemos que la empresa Techint pretende construir una mega-ciudad de lujo sobre el bosque nativo que se extiende en la costa de estos partidos. Este bosque, declarado con anterioridad Reserva Natural a nivel municipal, cumple una serie de funciones ambientales: amortigua inundaciones; recibe el agua de la crecida del Rio; refrigera el aire; contiene los vientos huracanados; absorbe la contaminación que llega al Rio de la Plata (donde está la toma de agua de AYSA). Esto repercute en la calidad de vida de toda la población. Justamente, Techint para urbanizar la zona elevaría la altura de la costa a 6 metros, y esto implica un cambio completo del área que principalmente impactara en mayores inundaciones. Esto denuncian los asambleístas de “No a la entrega de la costa Avellaneda-Quilmes” desde hace más de 15 años.

Otras zonas afectadas son Berisso y Ensenada, por el puerto de contenedores TecPlata, que está desplazando a isleños y pequeños productores locales por desmontes, inundaciones y refulado; Tigre contiene bosques que al no aparecer en el mapa quedan librados para el urbanismo privado; Berazategui sufrió desmontes y la construcción de un murallón costero en su franja de bosque ribereño; entre otros.

¿Qué es este nuevo ordenamiento territorial de bosques y como nos afecta socialmente?

Si se llega a avanzar con el ordenamiento presentado por el OPDS en la Legislatura Provincial, denominado Proyecto A1 15-16, el Gobierno Provincial estaría autorizando automáticamente el desmonte de miles de hectáreas de bosque, con todos los daños sociales, ambientales y urbanos que ello conlleva.

En estos conflictos, el OPDS tomó una evidente posición a favor de los emprendimientos inmobiliarios, amparado primero por el Gobernador Daniel Scioli y luego por la Gobernadora María Eugenia Vidal. Tal es el caso de “Nueva Costa del Plata”, de Techint, en Quilmes y Avellaneda; el Puerto de contenedores de TecPlata, en Berisso y Ensenada; el murallon en Berazategui, el Vial Costero en Vicente López, Colony Park en Tigre, el Puerto de Escobar, los barrios privados en la cuenca baja del Río Lujan, entre otros . Este organismo que debería bregar por las necesidades de los ciudadanos a partir de un ambiente sano, con este nuevo ordenamiento legitima y prioriza los negociados por sobre el bienestar de la personas.

¿Qué queremos decir con esto?

Los bosques nativos generan innumerables servicios ambientales, especialmente la amortiguación de las inundaciones. Por lo tanto el Estado, aprobando el mencionado Ordenamiento Territorial de Bosques (OTBN) sería nuevamente responsable de crímenes sociales como el sucedido en 2013 en La Plata y Buenos Aires.

No podemos permitir que siga siendo el negocio inmobiliario y los intereses de los funcionarios de turno los encargados de moldear nuestros territorios, a sabiendas de que los perjuicios son cada vez más evidentes a través de las inundaciones, olas de calor, vientos huracanados cada vez más fuertes, la concentración de la tierra, la pérdida de biodiversidad nativa y el creciente hacinamiento en las ciudades.

La Ley de Bosques Nativos tiene por objetivo impedir el avance inmobiliario sobre el escaso 3 % de superficie de bosques que quedan en la provincia, no permitamos que la tergiversen y la utilicen para legitimar sus negociados. Las inundaciones también son decisiones políticas.