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Red Internacional
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Los aportes de Madygraf para pensar la Educación Sexual Integral

La ESI no debiera ser solo parte de la educación sistemática en las escuelas, sino también de la educación no formal y asistemática porque es una forma de ver y vivir la vida. Desde Pan y Rosas, queremos contarte una de las experiencia más ricas en este terreno que se desarrolla en la fábrica recuperada MadyGraf de la zona norte del GBA.

Viernes 6 de marzo de 2020 14:23

La sexualidad es un aspecto central en la vida de las personas. Hoy la sexualidad se entiende como social y cultural y el enfoque integral la pone en diálogo con aspectos cruciales como la igualdad, la diversidad, la identidad, los roles y el acceso al conocimiento y al trabajo. Por ser seres sociales las personas construimos nuestra sexualidad con otras personas y así nuestros cuerpos están atravesados por la cultura.

Por esto también pensamos que la aplicación de la ESI no solo debe limitarse a la educación sistemática en las escuelas, sino también ser parte de la educación no formal, asistemática, porque es una forma de ver y vivir la vida. En los lugares de trabajo, en los hogares y lugares deportivos y de recreación. Es además una manera de escuchar los medios de comunicación, entendiendo que en muchos casos nos dan desinformación. Muchos están impregnados de falta de respeto por los derechos que defienden las leyes establecidas ganadas con la lucha. O también cuando la existencia de una ley le falta el respeto al derecho porque no garantiza su aplicación. La igualdad ante la ley no es la igualdad ante la vida porque no todos somos iguales.

Recreación por el día de la familia en Madygraf

La gestión obrera desde la perspectiva de relaciones inclusivas y sin discriminación

En la imprenta MadyGraf, ex Donnelley, por ejemplo, a pesar de las presiones de este sistema laboral-social en el que nos encontramos inmersas se hacen actividades para visibilizar y para desnaturalizar situaciones injustas y de desigualdad. Entre esas actividades están las asambleas y consejos de fábrica para debatir entre las trabajadores y los trabajadores. También se encuentran la construcción de la Comisión de Mujeres que participa en la Campaña Nacional del aborto legal, seguro y gratuito, el apoyo a las luchas obreras, las manifestaciones en las calles, las actividades político-culturales, el club obrero y la juegoteca.

Dentro del espacio de la juegoteca niños, niñas y adolescentes reciben ESI. Allí mismo hay un lactario para las que son mamás con niños y niñas muy pequeños. Garantizar un cuidado colectivo de hijos e hijas en un espacio acorde y agradable, permite el acceso de estas mujeres al derecho al trabajo. Otros aspectos como contar con reconocimientos de ausencias del puesto de trabajo por hijos e hijas enfermas, tener el día femenino o una mayor licencia por embarazo que son otras de las cuestiones que la gestión obrera aporta a ellas y a la ESI no formal al reconocer los derechos de las mujeres.

Afiche realizado por docentes y niños de la juegoteca

Los integrantes de la fábrica establecen relaciones constantes, no corporativas, con otros trabajadores de la zona, ya sea de otras fábricas, pero también con docentes, técnicos, jóvenes, estudiantes, con artistas, con vecinos y ambientalistas; relaciones políticas, culturales, recreativas.

La unidad con otros trabajadores en lucha y el apoyo a sector sobre los que pesa la xenofobia esparte de la identidad con la que estos obreros y obreras pusieron en marcha su gestión de la fábrica. En 2010, se solidarizaron con los trabajadores que residían en el Parque Indoamericano que fueron desalojados y reprimidos.

Lo mismo puede decirse de las disidencias, ya que antes de la gestión obrera había una trabajadora que transformó su identidad de género estando trabajando allí, y sus compañeros la apoyan para que la empresa le garantizara su continuidad y condiciones.

¿Podemos aplicar los avances de la ESI en Madygraf a otros ámbitos?

Todos los ejemplos mencionados anteriormente cuales son producto de la organización propia de los trabajadores muestran a Madygraf como un gran laboratorio de prácticas que pueden trasladarse hacia toda la comunidad, los lugares de trabajo y estudios.

La Comisión de Mujeres puesta en pie incluso antes de la gestión obrera, la juegoteca multiedad, el club social cultural y político, los campeonatos de fútbol, la escuela de deportes, la construcción de una secundaria de adultos este año y las experiencias de organización y militancia desde los mismos trabajadores y trabajadoras con otros independientemente de los empresarios, sus partidos y los gobiernos, forjan una conciencia obrera que aporta a la construcción de sujetos de cambio y abiertos a la diversidad e inclusión.

Flyer de la juegoteca por el día de la familia

Actividad de la juegoteca por el 24 de marzo

¿Qué es una "sexualidad integral" y cómo educar para ella?

Las mujeres que nos reivindicamos socialistas y que participamos del movimiento de mujeres y de la marea verde lo hacemos entre otros derechos que perseguimos, como el aborto seguro y gratuito y contra los femicidios y todo tipo de violencia machista, por la la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral. Lo hacemos porque consideramos que hay que arrancarle a este podrido régimen social todos nuestros derechos, y que luchando juntas avanzamos. Pero a la vez somos conscientes de que solo bajo una sociedad con otras condiciones que no sean la explotación y la opresión de millones -en especial de niñas, niños y mujeres- es que podremos tener un desarrollo pleno de la sexualidad, de libre elección, autonomía y autodeterminación de nuestros cuerpos.

Todos los días hay que salir a defender la ESI e ir superándola. Todos los días tenemos que desde temprano por la mañana mirarnos al espejo y no ver una mujer, un varón, un niño, una niña, sino vernos como personas que se relacionan con otras personas en situación de paridad, sin jerarquías ni de categorías ni de género ni de edad. Sabemos que la sociedad está dividida en clases y que la nuestra debe retomar las conquistas que obtuvimos con la pelea constante contra este sistema de desigualdades hasta poder terminar con él. Las experiencias de Madygraf son puntos de apoyo que tenemos.