Tras trascender pruebas importantes que tiran por la borda la versión de que los menores estaban armados, los uniformados declararán el próximo 27 y sería imputados por homicidio agravado. Concentración en Tribunales
Jueves 21 de junio de 2018 14:16
Esta mañana desde las 9 familiares de Facundo y organizaciones políticas y de derechos humanos realizaron una concentración y corte de calle en los Tribunales de Tucumán.
Fueron recibidos por la fiscalia encabezada por la doctora Giannoni quien esta el frente de la investigación del caso que conmociona al país.
Hace unos días trascendieron que los resultados de las pericias realizadas tanto en la ropa, como en las manos y en el arma “plantada” por efectivos policiales dieron resultado negativo.
Ni Facundo ni Juan, su compañero que manejada la moto, empuñaron jamás el arma. Caía así finalmente, la coartada policial de que los niños iban armados y que los policías habrían actuado en "legítima defensa".
La doctrina Chocobar y el periodismo de guerra contra las víctimas de gatillo fácil
A poco tiempo del asesinato a sangre fría, por la espalda, de un joven por un policía en Buenos Aires, acto justificado por Macri y Bullrich, las fuerzas policiales de todo el país recibieron esta nueva política como un fomento para disparar a mansalva, con casos resonantes en distintas provincias, como fue el caso de Facundo Ferreira.
Inmediatamente tanto el diario de mayor tirada de la provincia, La Gaceta, como funcionarios del gobierno de Manzur tomaron con entusiasmo la agenda de justificar un fusilamiento aberrante, de un niño de 12 años.
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Cabe destacar que a Juan la bala que mato a Facundo le rozó la frente. Aún cuando testimonios y el mismo armado de los hechos hablaban a las claras de una escena “armada” por la policía, con increíbles contradicciones, tanto los medios como la fiscalía y los políticos nacionales y provinciales se hicieron eco de las mentiras que vertieron los asesinos.
Los familiares aún esperan sus disculpas públicas de Bullrich, quién dijo que disparar por la espalda “era sólo un detalle”, el ministro de seguridad de Manzur, Maley, que se preguntó “que hace un niño sólo a esa hora y ligado a la tenencia de armas”. Y finalmente la fiscala Gianonni también repitió frente a las cámaras, la misma mentira arbitraria basada sólo en los dichos policiales, sin ninguna prueba y basándose en esas falacias y en la fuerte presión ejercida por todo el arco político y los medios “bancando” el gatillo fácil, se explica que ni siquiera haya llamado a declarar a los asesinos.
Más aún, al día de hoy, se encuentran en funciones. Incluso trascendió que uno de ellos fue a declarar el viernes pasado en la misma fiscalía, por otra causa vinculada a “excesos” en cumplimiento de sus funciones.
La justicia la obtendremos con la movilización en las calles
El próximo 27 declararán finalmente Nicolás González Montes de Oca y Mauro Díaz Cáceres, los asesinos del niño, e incluso la investigación debería ensancharse para deslindar responasbilidades respecto de la manipulación de la escena, el plantado del arma, cuestiones que sirven para visibilizar una práctica común de las fuerzas policiales para encubrise ante el abuso del “gatillo fácil”.
Sólo la movilización en las calles será la garantía de que este caso no quede en la impunidad y desarrollar un fuerte movimiento por los derechos humanos para oponerse y derrotar a las fuerzas represivas del Estado que así como descargan su barbarie contra los sectores mas marginados por este sistema, se mantienen aceitadas para reprimir cuando los trabajadores salgan a enfrentar en las calles el brutal ajuste que se viene aplicando en nuestro país.