MENDOZA // MAIPÚ. Maipú: siguen ganando los que fundieron GIOL

En la sesión de este jueves se llevó a consideración de los concejales de Maipú la aceptación de un espacio de equipamiento determinado por la Ley Provincial de loteos 4341 en su artículo 26. Desde el sentido común podría no haber cuestionamiento a que un municipio reciba en donación una parcela de terreno. Pero resulta que el espacio en cuestión proviene del proyecto de un loteo privado iniciado en el año 2011 por la empresa “Obras Andinas S.A.”, propiedad del multimillonario empresario noventista y kirchnerista Omar Álvarez.

Como denunciamos en la sesión, pretenden que cerremos el periplo de un proyecto que viene avanzando desde el 2011, a favor de este empresario que, entre otros negocios, estuvo involucrado en el vaciamiento y posterior privatización de la que fuera en su momento la empresa vitivinícola más grande del mundo, la estatal Bodegas y Viñedos Giol ubicada en Maipú; fue ganador de licitaciones en áreas petroleras iniciadas durante el gobierno de Cobos y adjudicadas por Jaque, áreas que no fueron explotadas, sino utilizadas para desarrollar un negocio especulativo redondo que terminó con la reventa de las mismas a precios superiores a los desembolsados para adquirirlas; fue ganador, a través de una UTE con Cartellone de la megaconstrucción proyectada del dique Los Blancos, cuyo proveedor será el siempre infaltable Pescarmona a través de la empresa “en crisis” IMPSA.

Pero, como si fuera poco, Álvarez también fue investigado por su participación en la liquidación del Banco de Previsión Social y Banco Mendoza, y acusado de vender a precio de remate el stock de una de las plantas que bodegas y viñedos GIOL tenía en el sur, a una empresa propiedad de familiares, cuando aún integraba el directorio de la empresa estatal.

Según informan los portales web, el valor de las parcelas en el loteo privado Portal Andino, una vez finalizadas las obras de urbanización y conexión a los servicios, ronda los $435.000.

Es impensable que algún trabajador de nuestro departamento, que en su enorme mayoría pertenecen a la “argentina en negro” y cobran salarios de entre 5 y 6 mil pesos, pueda acceder a esta cantidad de dinero. Lo que ya está sucediendo es lo contrario. El desarrollo de loteos privados y urbanizaciones cerradas que se evidencia en Maipú favorece a los especuladores inmobiliarios, produce un vertiginoso aumento de la renta inmobiliaria y como consecuencia el encarecimiento de los terrenos, que se van haciendo cada vez más inaccesibles para el pueblo trabajador. Como si no alcanzara saber que según las estadísticas oficiales 5mil personas viven en Maipú en ranchos o casillas, 11mil personas en condiciones de hacinamiento y que el 17% de la población vive con lo que la DIE llama Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), en los concejos deliberantes se sigue dando curso al desarrollo de estos emprendimientos privados.

Otros de los afectados son los pequeños productores, quienes ven empobrecidos sus cultivos y sus tierras, que son compradas por los especuladores a precios de remates, levantándose las zonas productivas para la construcción de estos verdaderos “oasis para ricos”.

A pesar que el expediente con pedido de informes fue devuelto al Concejo Deliberante el día miércoles, y luego de una semana sin que pudiera ser estudiado y debatido, el oficialismo insistió en la necesidad de su tratamiento al día siguiente. Claro, se trataba nada menos que de seguir garantizando negocios a empresarios noventistas y de “tropa propia”. Otro lugar en que Álvarez pisa fuerte es en San Rafael, en donde también gobierna el sector azul del peronismo.

Con estos fundamentos, desde la banca del PTS/FIT solicitamos la abstención en la votación. El posicionamiento era en contra de tomar responsabilidad política la culminación del desarrollo del emprendimiento privado cuya donación en concepto de espacio de equipamiento se aceptaba sin cuestionamiento, surgiéndonos una vez más la pregunta de si los ediles se tomaron el trabajo de leer el expediente. Todos los partidos votaron en contra de la solicitud de abstención, y luego a favor del despacho en cuestión. Es que la denuncia que presentamos incomodó a los concejales que de discurso posan de antinoventistas y populares, pero en los hechos levantan la mano a favor de los empresarios, las corpos y la especulación.