Debate publico. Medicina UBA: ni con los rectores amigos de Milei, ni como el peronismo cómplice, organicemos nuestra fuerza

Venimos de semanas donde más de 100 facultades de todo el país amanecieron tomadas, incluyendo la Facultad de Ciencias Médicas de la UBA. En una asamblea autoconvocada, que Nuevo Espacio (UCR) no convocó ni se hizo presente, votamos esta toma, bronca generada desde abajo que tuvimos les estudiantes ante el veto de Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, ajustando el presupuesto y el salario docente y no docente. A partir de eso, estudiantes decidimos organizarnos en comisiones con el rol de bancar la toma, pero también organizando distintas actividades, como el corte en Córdoba y Junín, colaborando en organizar las clases públicas que vimos en Plaza Houssay, en las escalinatas, el Hall y los pasillos de la facultad, llevadas adelante, en su mayor medida, por docentes ad honorem. Elles no solo se ponen al hombro la educación pública, sino también su defensa.

Mientras, Milei continúa su ataque a la educación pública. Ahora volvió al ataque con las auditorías, pero no quieren auditar las universidades para que los miles de docentes ad honorem que las mantienen en pie cobren un salario, sino que las quieren auditar para justificar aún más ajuste.

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En ese contexto, si algo quedó claro estas semanas entre las asambleas, cortes de calle, tomas de facultades, es que hay tres perspectivas en disputa para la defensa de la educación pública. La primera es la que plantean los rectores radicales y peronistas, agrupados en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN). Ya vienen de hablar contra las tomas, incluso persiguiendo en algunas facultades como Psicología de la UBA a les docentes que hacen clases públicas. Actúan en conjunto con el Frente Sindical, las conducciones de los gremios docentes y no docentes que en lugar de construir un plan de lucha desde abajo, quieren organizarlo por arriba con las autoridades.

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El problema está en que la salida que nos proponen es confiar en los diputados del Congreso, para que negocien ellos el presupuesto 2025 con Milei. Y por más que algunos como Lousteau, del ala de Yacobitti y Nuevo Espacio que dirige el CECiM, rompan con la UCR y formen nuevas alianzas para lavarse las manos, son los mismos que ya negociaron un presupuesto que dejaba afuera a los docentes, y vienen votando contra otros trabajadores como acompañando el proyecto del gobierno para la privatización de Aerolíneas Argentinas. Por todo eso Nuevo Espacio en fmed hizo lo imposible por boicotear las asambleas, desde la primera planteando que la toma no era legítima, diciendo que el único órgano válido para la toma de decisiones es la comisión directiva del centro, negando la asamblea de alrededor de mil estudiantes que nos hartamos de que decidan a nuestras espaldas, que queremos tener voz y voto. En ningún momento reconocieron lo que votamos, por ejemplo, la interfacultades en Plaza de mayo de la que fuimos parte muchísimos estudiantes para comenzar a unir nuestra fuerza.

Un segundo camino es el que plantea el peronismo, en la facultad el Torrente-La Cámpora y la Mella. En la última asamblea en la facultad, el Torrente planteó abiertamente que no sirve construir espacios asamblearios, que la salida es por otro lado. Y se nota porque cuando está Nuevo Espacio en las asambleas, votan con ellos, cuando no, tienen discursos más combativos. Pero en los hechos, el peronismo viene dividiendo las luchas, desde la facultadcuando se trata de espacios de debate y organización nunca son parte de convocar desde sus redes y construirlo pasando por todos los cursos como hacían en campaña electoral. En la universidad de La Matanza, tan en contra de la organización se demostraron que el intendente peronista envío patotas a evitar una asamblea estudiantil, que igualmente no pudieron quebrar y lograron tomar la universidad por primera vez en la historia. Se ve así también en los sindicatos que con la enorme fuerza que demuestran tener como en el paro del transporte, no han llamado a unificar toda nuestra fuerza desde abajo como con un paro general. La explicación la dió Maximo Kirchner, la salida es armarse para las elecciones de 2025. Y la Mella, por más que tenga un discurso más de izquierda y algunas propuestas para visibilizar el conflicto, no lo hacen en la perspectiva de plantear una delimitación política de quienes son nuestros amigos, y quienes nuestros enemigos. Por eso no se pusieron a la cabeza de construir espacios como la interfacultades, dirigiendo centros de estudiantes como el de Filosofía y Letras. Porque hasta el final, su estrategia sigue siendo la misma que la del kirchnerismo: orientar todo a 2025 y tener más diputados empezando por Juan Grabois. Pero el problema es que para nosotres, el ajuste es ahora.

Hay un tercer camino, que es el que apostamos a fortalecer desde En Clave Roja y la Juventud del PTS; el de la organización desde abajo. Las tomas, asambleas, cortes autoconvocados, surgieron de miles de pibes que estamos hartes de que nos digan desde arriba que hay que esperar a que lo solucione otro, y quienes nos vienen cagando siempre. La lucha del Hospital Bonaparte contra el cierre marcó un antes y un después, porque nos mostró que luchar sirve y que cuanto más nos quieren dividir, más tenemos que unir nuestra fuerza. También lo muestra la lucha del Hospital Garrahan, a la cabeza de la defensa de la salud pública. Con ellos tejimos lazos desde la Posta de Salud y Cuidado, para unirnos entre estudiantes y trabajadores en defensa de la salud pública. Ellos también se unieron a nosotres, viniendo a nuestras asambleas en Medicina a contarnos cómo se organizaron, y tenemos que continuar su ejemplo. Démosle fuerza a las comisiones de clases públicas, de organización, es la clave para que podamos llegar a cada estudiante de la facultad y transmitirle por qué es tan importante extender la organización. Por eso, peleamos para que sean cada vez más compañeres independientes quienes tomen esta tarea en sus manos, desde la moderación en las asambleas, hasta la difusión y pensar cada une de nosotres qué rol quiere tener en esta lucha.

Solo así podemos imponer nuestro propio plan de lucha a los centros, federaciones y sindicatos, evitar que nos dividan como quiere hacer Milei con estudiantes por un lado, trabajadores por el otro. No podemos aceptar que negocien dos pesos más para la educación, a costa de ajustar a les jubilades que son quienes atendemos en los hospitales públicos, a costa de ajustar las condiciones de vida de nuestras familias.

En ese camino tenemos una primera parada, la movilización que votamos para el 1 de noviembre del Obelisco a Plaza de Mayo, y luego a la CGT, ¡tenemos que ser miles! Que sea un primer paso en perspectiva de construir la tercera marcha federal del 12 que podamos mostrar toda nuestra fuerza en la calle, con nuestros reclamos a la cabeza y exigiendo que para ese dia convoquen los centros de estudiantes, gremios docentes, no docentes, y todas las centrales sindicales se sumen a convocar a un paro general para la fuerza de los estudiantes con la de los trabajadores, para enfrentar todo el plan de Milei y el FMI.