Coronavirus. Mendoza: organizar la solidaridad en tiempos de cuarentena

La virtualidad que muchas veces es solo algo trivial, de divertimento o algo muy personal, otras es una herramienta de trabajo o de formación. Esta vez se transformó en una herramienta colectiva para reflexionar, intercambiar y debatir a partir de los acontecimientos en esta pandemia. Encuentro totalmente necesario, entre tanto aislamiento, para el pensamiento colectivo y llegar a una visión más de conjunto de la realidad de la provincia.

La crisis sanitaria está gestando una crisis social de magnitud con impredecibles, aún, consecuencias. Las condiciones que ya veíamos en las comunidades de nuestras escuelas se agravan con el confinamiento general de la población, la abusiva militarización en los barrios obreros, y una propaganda estatal que refuerza los sentidos comunes del individualismo. En estas circunstancias, se muestra ante millones la emergencia de la mitad de la población que vive en la pobreza, un descomunal nivel de precariedad de los trabajos y una economía de supervivencia que se cortó de golpe por el aislamiento social preventivo.

Junto a esto, el estado de la salud pública es preocupante. Es preocupante la situación, faltan insumos y las condiciones en que viven y trabajan lxs trabajadorxs de la salud es muy precaria . Y ni hablar de las filas amontonadas de jubilados y beneficiarios de asignaciones y subsidios que fue un espectáculo aberrante que provocó la bronca e indignación de millones. No hubo ninguna planificación para los que han trabajado toda su vida.

En estos tiempos contar con un medio independiente como son las redes del Multimedio de La Izquierda Diario es imprescindible. Venimos informándonos y haciendo denuncias y poniendo voz para quienes son silenciados en los medios hegemónicos.

Lxs Trabajadorxs ante la pandemia

Millones de trabajadores que por abajo tienen iniciativas y refuerzan lazos de solidaridad, como la producción de alcohol en gel en laboratorios escolares o mascarillas de protección con las impresoras 3D de las escuelas técnicas o fueron parte del dispositivo de distribución de los bolsones (miserables) de alimentos que en cada escuela dieron un pequeño respiro a miles y miles de familias que, al cerrar las escuelas, se quedaron sin refuerzo en su alimentación.

Sin saber aún hasta cuándo puede extenderse la suspensión de clases presenciales, trabajadores y trabajadoras de la educación vienen sosteniendo, con mucho esfuerzo, dedicación, con sus propios recursos y mucho sobre trabajo, la conexión y el seguimiento con sus estudiantes. Piensan, planifican, adaptan, buscan material. Pero, en el marco de ese agotamiento, hay una posibilidad inédita de contacto con la comunidad, con la realidad de las familias de primera mano. Algo que ni los gobiernos ni los funcionarios tienen la menor idea. Tenemos una realidad: nadie está tranquilx en su casa o nos sobra el tiempo, como dijo el actual Director General de Escuelas de la Provincia, Thomas. Más bien hay bastante cansancio por el sobretrabajo escolar y de las tareas. Sobra actitud, compromiso, voluntad, solidaridad, falta presupuesto, insumos y voluntad política de hacerse cargo que esta cuarentena no es igual para todxs.

La negligencia del Estado se muestra en esos bolsones de pobreza para las familias que más lo necesitan, sin cuidar ni la cantidad ni la calidad nutritiva. En este sentido una buena propuesta fue el proyecto que presentó el PTS-FIT exigiendo que se cumplan pautas saludables para las ayudas alimentarias.

El rol de los sindicatos

Ante estos elementos de una crisis que no sabemos hasta donde llegará, las burocracias sindicales mantienen una actitud de apoyo al gobierno y las patronales sin ponerse en primera línea a defender la vida de millones de trabajadores que están atravesando situaciones muy difíciles. Aumenta la desocupación, las suspensiones y las rebajas salariales. Hay miles de trabajadores de la educación que se quedaron sin horas y cargos y no tienen ninguna posibilidad de acceder a suplencias y están sin cobrar.

Por todo esto y porque la crisis económica se va a profundizar, venimos discutiendo que el SUTE, como sindicato recuperado, tiene que cumplir un rol activo en la organización de la solidaridad. Desde la Corriente Nacional 9 de abril/Lista Bordó hemos propuesto funcionar a través de reuniones virtuales, que son posibles y es algo que hasta lxs docentes con sus alumnes ponen en marcha. Somos parte activa de la Comisión de Emergencia que se conformó para tener iniciativas solidarias, que comenzarán esta semana con la organización de una primera ayuda solidaria de 1000 bolsones de alimentos, con un gasto por parte del sindicato de 1 millón de pesos. Hemos propuesto un método democrático para la organización de la ayuda, confeccionando una planilla única virtual para toda la provincia, con criterios públicos y listado único para ir viendo las reales necesidades de compañeros y compañeras.

Organizarnos porque nuestras vidas valen más que sus ganancias

Que el aislamiento social preventivo no sea usado por los que nos gobiernan para desmovilizarnos y atacar nuestra organización. Que no impidan la solidaridad. Con nuestros compañeros y compañeras en las escuelas podemos acordar un día y hora, y haciendo uso del derecho a asamblea, conectarnos, intercambiar y debatir. Podemos organizar “reclamos virtuales colectivos”, junto a la comunidad. No tenemos por qué quedarnos callados.

Por esto el 10 de abril participemos de la PROTESTA VIRTUAL para llenar las redes de nuestra lucha con la comunidad y el reclamo de #ReconocimientoYa al trabajo docente. Pero también vamos a poner los recursos del sindicato, fondo de lucha solidario y lo que haga falta para, solidariamente, asistir a lxs compañerxs más postergadxs y , cumpliendo las medidas de prevención y cuidado, abriremos las puertas del sindicato para dar una primera ayuda a compañeros/as que están sin horas o muy pocas, a celadores que son lxs que menos cobran, a nuestras compañeras jubiladas. Así, mediante convocatoria pública y con criterios claros, se realizará esta próxima semana el primer operativo solidario.

A 48 años del Mendozazo donde Maestras, obreros y estudiante mostraron su enorme potencial para frenar atropellos hacía el pueblo pobre y a 13 años del asesinato de Carlos Fuentealba en defensa de la educación pública, nos sobran ejemplos históricos de solidaridad para dar vueltas las prioridades.

Vamos a poner al sindicato a la cabeza y como ejemplo de que la respuesta para los/as trabajadores/as en esta crisis vendrá de nuestras propias fuerzas.