El presidente mexicano convocó a los jóvenes a incorporarse a una nueva fuerza represiva que espera reunir hasta 50.000 nuevos agentes.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Jueves 3 de enero de 2019 00:38
En su conferencia de prensa matutina, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador (AMLO), convocó este miércoles a los jóvenes a incorporarse a la Guardia Nacional, la nueva fuerza represiva que será integrada también por militares y policías responsables de los cientos de miles de desapariciones forzadas, ejecuciones y torturas.
En su primera conferencia de prensa de 2019, acompañado por los secretarios de Seguridad, Alfonso Durazo; de la Defensa, Crescencio Sandoval, y de la Marina, José Rafael Ojeda, el presidente López Obrador anunció la convocatoria de reclutamiento de jóvenes para formar parte de la Guardia Nacional.
Señaló que “quienes pertenezcan a la Guardia Nacional tendrán la misión de cuidar a los ciudadanos, a todos, de dar seguridad”.
Para justificar el mantenimiento de la militarización -que durante su campaña rechazó-, el mandatario afirmó que México, comparado con otros países, “tiene pocos policías para atender el problema de inseguridad, por lo que es necesario reclutar 50 mil elementos, en un periodo de tres o cuatro años aproximadamente”.
En línea con su postura conciliadora con los llamados “poderes fácticos -a los que prometió combatir durante su campaña-, subrayó que “es un trabajo honrado, digno de dimensión social y una contribución a la nación.” A su vez, prometió a los jóvenes que se inscriban “un empleo remunerado, con seguridad social, además que se puede convertir en una forma de vida, de satisfacción y orgullo trabajar en las Fuerzas Armadas de México”.
Se trata de un discurso hecho a la medida para legitimar al Ejército y la Marina, profundamente cuestionados durante el sexenio de Peña Nieto, tras la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa –y los nexos de policías, militares y altos funcionarios con el crimen organizado– y masacres como la de Tlatlaya, Tanhuato, Apatzingán, la brutal represión y la violencia sexual en Atenco en 2006.
López Obrador busca tentar a los jóvenes con menos recursos y oportunidades –la mayoría de los cuales sólo tiene acceso a trabajo precario o informal, con salarios muy bajos–, que se combina con la “oferta” de trabajar de aprendices por 3600 pesos mensuales y las becas de 2400 para estudiantes de licenciatura.
Es la juventud que ha sufrido innumerables agravios de esas Fuerzas Armadas a las que López Obrador quiere recomponer y fortalecer para garantizar la estabilidad de los negocios capitalistas (a lo que llama “paz republicana”).
Son incontables los casos de jóvenes desaparecidos y torturados a manos de las fuerzas de seguridad en todos los estados, y es conocida la impunidad con que siguen actuando las distintas policías y militares ante estos lamentables hechos. Por eso es justo el reclamo de la población y familiares que demandan ¡Ni perdón ni olvido!
Ni aprendices de verdugos de las Fuerzas Armadas ni juventud precarizada: todas y todos los jóvenes deben tener acceso a la educación y a trabajos con salarios equivalentes al costo de la canasta básica, ajustable por inflación.