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Red Internacional
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MÉXICO ECONOMÍA. México será de los últimos países en salir de la crisis

México no va a salir rápido de la crisis, ya que el gobierno no está dispuesto a tomar medidas que puedan beneficiar al pueblo pobre y trabajador, mientras intenta negar que haya declive en la economía.

Viernes 28 de agosto de 2020

Según las cifras dadas a conocer por la calificadora Mody´s Analitycs, México será de los últimos países de América Latina en salir de la crisis económica, la empresa afirmó que nuestro país podría recuperarse en 2021 pero con tasas que sólo alcanzarían el 2% a mediano plazo, el 3% en el mejor de los casos, pero nada más. Lo que implicará que el tiempo de recuperación será muy prolongado, poniéndolo en el segundo lugar en las naciones de más lenta recuperación en la región, sólo por detrás de Perú, lo cual puede tardar hasta cinco años o más.

Pero siendo México la economía más grande de América Latina superada nada más por Brasil, ¿Por qué se va a recuperar más lentamente que los otros? ¿No se supone que por el tamaño de la producción tendría que alcanzar para ser de los primeros en salir de la crisis? Pues como suele suceder, la realidad supera a la lógica.

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La economía mexicana llegaría a caer 10% y es que el gobierno no está dispuesto a tomar muchas medidas para palear la crisis, es verdad que no es necesario endeudarse como señala Mody´s Analitycs, es cierto que los endeudamientos aumentan la expoliación y al final sólo terminan beneficiando a un puñado de magnates y gobiernos, pero entonces ¿qué se puede hacer?

Existen otras medidas como el cobro de impuestos a las grandes fortunas, la
reducción autentica de los privilegios de la alta burocracia, incautación de los bienes de los corruptos, cancelar la deuda pública (que implica la deuda interna y externa) y no podía faltar, la nacionalización de las empresas que no paguen impuestos o despidan a sus trabajadores. Y es que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), no está muy dispuesto a atacar las ganancias de los grandes capitales, más bien parece que apuesta a la gran inversión privada tanto nacional como extranjera (por ejemplo, la proveniente del T-MEC), sin pensar en implementar una política que verdad fortalezca el mercado interno.

Pero es que él tiene otros datos

Hay que dejar una vez más claro que la crisis económica actual no proviene exactamente de la pandemia, de hecho, ya venía asomándose más o menos desde el 2017, y en el 2018 y 2019 se mostraba ya casi como un hecho, pero como una crisis de poca velocidad que avanzaba lentamente hacia el desplome económico. Lo que hizo el Covid-19 fue acelerar ese proceso de forma muy estrepitosa, lo que pudo haber sido un proceso de años (no muchos tampoco), tardó meses en avanzar durante el 2020.

México por su puesto no es la excepción del concierto internacional, de hecho, entramos en recesión técnica durante la primera mitad de 2019, esto lo señalaron datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en noviembre de aquel año, y ¿Cuál fue la respuesta del presidente y del gobierno del Morena en general? Que estaba tranquilo y optimista porque la economía estaba blindada, AMLO que como siempre tiene otros datos declaró que: "No hay recesión. Vamos muy bien en lo económico y cada vez está mejor la situación económica y social en nuestro país”.

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Recordemos que el año pasado el indicador de producción industrial marcó una baja del 3.1% lo que lo llevó a su índice más bajo desde 2009, año en que se manifestó con mayor fuerza la crisis económica producto de la quiebra del banco Lehman Brothers, es decir, las advertencias de la crisis económica ya estaban presentes pero la administración actual decidió no hacer nada. Y es que una de las grandes promesas del Morena fue el no endeudamiento, eso está muy bien, pero como ya dijimos no es el único tipo de medidas que se pueden tomar para controlar el desastre.

Al parecer el ascenso económico sólo existía en la cabeza del presidente o era una herramienta más para dirigir la opinión pública, ya que las afirmaciones de López Obrador no corresponden a la verdad, más bien eran un mecanismo para evadir la crítica y evitar el desgaste acelerado de su gobierno. Dicha medida fue efectiva mientras la recesión no se convirtió en crisis franca y clara, lo cual ya pasó, así que posiblemente desde ahora en adelante el gobierno podría ser cuestionado con mucha mayor frecuencia.

¿Es tarde?

Iniciamos este apartado con la pregunta ¿Es demasiado tarde para aplicar las medidas que podrían estabilizar la economía y mejorar las condiciones de vida de las mayorías trabajadoras? Claro que no, pero ese no es el problema, el problema es que esas medidas significarían atacar y/o limitar las ganancias de los capitalistas. De modo que la riqueza social que se produce pase a beneficiar a la clase obrera, si bien es algo que AMLO no quiere hacer, es posible que desde una posición independiente se le puedan plantear exigencias.

Por ejemplo, se puede exigir de la manera más enérgica tomar medidas como aumentos salariales de emergencia para los trabajadores, subsidios y créditos baratos para los pequeños y medianos propietarios (campesinos, tenderos, emprendedores), que es donde se produce la mayor parte del empleo. Además de invertir más en educación, así como en salud e invertir mucho menos, en seguridad, lo cierto es que tener médicos bien pagados y dispuestos a trabajar, es mucho más útil que el Ejército y la Guardia Nacional en esta pandemia.

Las políticas pro empresariales son las que tienen sumido a México en la crisis, tanto económica como de salud, por el hecho de que no se invierte en el mercado interno favoreciendo a los grandes capitales, donde industrias como la automotriz son declaradas esenciales provocando el contagio de miles de obreros, mientras que esas mismas empresas no pagan impuestos o pagan el mínimo, al mismo tiempo que implementan políticas precarizadoras que niegan los derechos laborales a los trabajadores, las mayorías no pueden esperar, necesitan conquistar sus propias demandas ya.