Soy Candela, ingresante por la Licenciatura en Ciencias Políticas y quiero dirigir esta nota a los 18.000 estudiantes que este 25 de Julio arrancaron el curso de ingreso llenos de expectativas superadoras
Lunes 1ro de agosto de 2016 11:07
Este 25 de Julio cerca de 18.000 jóvenes entramos a las aulas de la UNLaM para iniciar el curso de ingreso a la universidad. ¿Sabías que en la UNLaM, no existe realmente ingreso irrestricto? El curso de ingreso es arancelado ($300) y con cupos.
Cada año se inscriben 24.000 estudiantes, lo que significa un ingreso en concepto de arancel al curso de ingreso, por fuera del presupuesto estatal, de $7.200.000 anuales extras. Pero solo ingresa el 60% de los anotados, dejando a 9.600 estudiantes afuera de la universidad.
Tras seguir investigando, descubrí que la UNLaM es la primera y única universidad nacional con una escuela de policías dentro: La Vucetich, el gran orgullo de la política del PJ, ya que no hay otra universidad donde hayan egresado esa enorme cantidad de policías. Y esos futuros policías reciben becas de más de $3000 mensuales mientras "estudian", cosa que no ocurre con los aspirantes a ser médicos, abogados o ingenieros. Resulta injusto ¿verdad?, mientras miles de nosotros pagamos un ingreso para poder educarnos y avanzar miles de aspirantes a ser policías reciben becas. Los mismos pitufos que siguiendo con el proyecto de policía local reprimen a trabajadores/as, hostigan y criminalizan a la juventud. Para ellos no hay curso de ingreso, ni cuotas, ni cupos.
Cuando llegué a Dirección de Alumnos me justificaron el pago del ingreso por el otorgamiento del material de estudio, pero no está de más decir que en una segunda instancia aquel pago se debe volver a efectuar. ¿Por qué? El material de estudio es el mismo ¿Cual es la justificación?
El ingreso restricto no solo tiene que ver con el carácter de pago del curso sino también con la evaluación meritocrática con la que se nos mide a los ingresantes. Somos muchos los que venimos de las escuelas públicas de Buenos Aires que tienen programas de muy baja calidad educacional, en las que las paredes se caen a pedazos y en lugar de ocuparse por la crisis estructural de la infraestructura, Vidal destina un presupuesto millonario al "observatorio" para la persecución a docentes y estudiantes por las redes sociales.
¿Sabías que, además, en la UNLaM 17 carreras de Formación Continua son pagas, en la cual cada estudiante debe abonar $500 por materia, y que 11 posgrados y 9 especializaciones tienen una matrícula de $2.400 con un valor anual que ronda los $20.000? ¿No es esto contradictorio con la educación pública?
Creemos que las universidades públicas como la UNLaM deberían financiarse desde el Estado y no imponerles a sus estudiantes el pago de cuotas injustificables o contar con convenios con empresas para precarizar a los mismos, junto a la Liga Federal Universitaria (Juventud Universitaria Peronista), quienes conducen el centro de estudiantes, que lejos de posicionarse como un espacio de organización de los estudiantes y resistencia en defensa de la educación pública, avala la precarización estudiantil administrando pasantías con las empresas. ¿No deberíamos tener un centro de estudiantes que pelee porque todos los ingresantes puedan efectivamente acceder a la educación universitaria? Nosotros ni siquiera tenemos derecho a votar nuestro centro de estudiantes. La LFU es cómplice de la política del rector Martínez (quien fue el autor de la cautelar contra el ingreso irrestricto en las universidades) ofreciendo trabajo precario cuyos sueldos cínicamente alcanzan para sostener los propios estudios y contentándose con "darnos la bienvenida" a los ingresantes.
Daniel Eduardo Martínez y el centro de estudiantes (LFU) insisten en su plan de exclusividad y mercantilización de la universidad. Multiplican los convenios con empresas (ya son más de 269 las empresas asociadas a la universidad), se devalúan los títulos de las carreras de grado mediante la generalización de los posgrados pagos, se prohíbe el ingreso irrestricto y la organización política dentro pero paradójicamente la universidad funciona como unidad básica del Partido Justicialista, como se vio una vez más el martes 26 de Julio cuando los principales dirigentes del PJ fueron recibidos por el rector, para luego integrar el panel central del acto y dirigir sus palabras a la militancia que colmó cada espacio del auditorio universitario. La convocatoria del Partido Justicialista en la UNLaM se vio acompañada por militantes de distintos lugares del país, con la presencia de dirigentes gremiales y territoriales, legisladores y secretarios del gobierno comunal, referentes políticos como José Luis Gioja, Daniel Scioli, Fernando Espinoza, Verónica Magario, Lucia Corpacci, entre otros.
Por eso quiero invitarlos a que abramos un debate sobre estas problemáticas que nos afectan no solo como ingresantes sino también a los y las estudiantes, para que todos los que pensamos que es injusto el ingreso restricto, entre otras cosas, e incluso los que piensen diferente puedan expresarlo en las páginas de La Izquierda Diario. Este diario es el único que denuncia esta situación, que expresa la necesidad de organizarnos para defender la educación pública, por un curso irrestricto, nivelatorio y gratuito para que todos puedan acceder a una educación superior y sobre todo de calidad, por cátedras paralelas, becas para todos los/as estudiantes con necesidad, contra la precarización a los/as mismos/as, libertad de expresión y organización política. Es por esto que a lo largo del curso de ingreso escribiré notas semanales denunciando la situación universitaria de la UNLaM y los invito a ser parte de este organizador colectivo en defensa del movimiento estudiantil, contra el ajuste de Macri y Vidal y en defensa de la educación pública.