Más de 60 días de cuarentena en algunas comunas de La Araucanía, con miles de trabajadores sin empleo, sosteniendo la crisis con sus ahorros previsionales, mientras tanto el gobierno solo propone un aumento de 10 mil pesos.
Miércoles 5 de mayo de 2021
La comuna de Temuco y Padre Las Casas en la Araucanía llevan más de 60 días en cuarentena total debido al aumento de casos que enfrenta la región. La región de la Araucanía se presenta como la más pobre de Chile, donde el mantener inclusive los mts. de distancia que propone el gobierno es imposible para más de 22 mil familias que viven en hacinamiento crítico y medio (Casen 2017).
Sumado a esto, son los altos índices de trabajo informal que presenta la región que siempre han destacado (sin covid19) por ser los más altos a nivel nacional, actualmente la tasa de empleo informal es de 31%, mientras tanto, al año 2019 la deuda mediana de las personas en la región alcanzan $1.997.921, sumado a esto, el salario mediano de las personas que trabajan es de tan solo $399.656. Durante la pandemia la precariedad y pobreza en millones de familias de Chile se ha acelerado, y es que los miles de despidos y el arribo de la ley de protección del empleo, ha dejado a miles de trabajadores o sin su fuente de trabajo o pagando la crisis con sus propios ahorros.
Frente a esto hemos podido ver que el actuar del gobierno se sigue enfocando en entregar ayudas limitadas al conjunto de la población, mientras tanto millones de personas se han visto en la necesidad de cubrir la crisis con sus ahorros, esto hasta con el tercer retiro de los fondos de AFP. Así mismo en la región, hemos visto un aumento considerable de familias que han llegado a vivir a campamentos para construir un espacio donde vivir, ya que producto del aumento de la precariedad de la vida no han podido pagar un arriendo o simplemente la solución habitacional no ha llegado nunca.
Mientras la región de la Araucanía es una de las más pobres, esta cuarentena solo afecta ha afectado a la clase trabajadora , con suspensiones laborales, despidos injustificados y con la xenofobia característica de la derecha. Llevando más de 60 días de cuarentena podemos apreciar cómo ha afectado a la salud mental de muchos, pero también nos muestra como el toque de queda no sirve y solo está impuesto para la normalización de militares armados, como esta dictadura disfrazada de pandemia ha sido una ganancia para la derecha, para empresarios que siguen haciéndose mas ricos.
El aumento de la precarización laboral, la pobreza, la salud y la vida en la región ya es un hecho, mientras los que concentran las mayores riquezas en el país se reparten las utilidades ganadas a través de la fuerza de trabajo de millones, quienes terminan pagando las consecuencias del mantenimiento del régimen siguen siendo los mismos, las y los trabajadores y el pueblo pobre.
Mientras tanto la discusión del gobierno por el aumento del salario mínimo es de tan solo $10.500, lo que no alcanza a cubrir ni siquiera un galón de gas y menos pensar en calefaccionarse en plenas temperaturas bajo cero que ya se sienten en la región. ¡Exigimos un ingreso universal fijo de $650.000! prohibición de despidos y suspensiones. Es necesario un plan de emergencia ante la situación actual, impuesto a las grandes fortunas como los Luksic, Angelini y Paulmann, quienes siguen enriqueciéndose en plena pandemia, mientras tanto las y los trabajadores siguen pagando una crisis con sus dineros.