La denuncia de una trabajadora contra el subsecretario del interior Manuel Monsalve abre una nueva crisis en el gobierno. La derecha hace un festín con el caso, sacando la calculadora electoral, tanto el progresismo y la derecha buscan disminuir costos, pero ¿Dónde quedan las demandas de las mujeres y la clase trabajadora?
Viernes 25 de octubre
Un nuevo golpe para el gobierno de Boric
La asesora de Monsalve presentó la denuncia por abuso sexual y violación el 14 de octubre por hechos ocurridos el domingo 22 de septiembre —el último día de tras Fiestas Patrias—, cuando después de una cena en un restaurant en el centro de Santiago, despertó al día siguiente en el hotel Panamericano. Pese a su entonces alto cargo, Monsalve se encontraba sin escoltas.
Monsalve, como subsecretario del Interior tenía potestad sobre la policía por su cargo como responsable de la seguridad pública del Gobierno. Días antes de que se realizara la denuncia encargó a personal de inteligencia de la PDI revisar las cámaras del hotel Panamericano, donde habrían ocurrido los hechos por los que se le indaga. Usando la maquinaria del estado y sus privilegios para sus propios fines. El gobierno frente al caso, actuó como cualquier otro gobierno y partidos tradicionales, permitiéndole a Monsalve viajar en un avión institucional, manteniendo el silencio durante horas frente a los hechos y dándole tribuna desde La Moneda. Demostrando que un gobierno que viene a administrar el estado capitalista no puede hacer más que reproducir la opresión hacia las mujeres.
La violencia sexual contra las mujeres es un fiel reflejo del sistema capitalista y patriarcal como lo ha denunciado el movimiento de mujeres históricamente. Los casos de delitos sexuales denunciados durante el año 2022 en el 89,3% de los casos las víctimas son mujeres, de ellos, el 27,7% corresponde a jóvenes entre 18 y 29 años, el 19% de los casos corresponde a adolescentes entre 14 y 17 años, la cifra mayor de casos de abuso sexual, corresponde al tramo de las menores de 14 años con un 31% de los casos denunciados. Golpeando con fuerza a las mujeres de la clase trabajadora y sectores populares donde el machismo sostenido por las instituciones del estado descarga toda su decadencia.
El gobierno de Boric, en el cual entraron muchas organizaciones feministas, conformando los frentes feministas de los partidos del Frente Amplio, como debatimos desde la agrupación de mujeres y disidencias Pan y Rosas, demuestra la crisis de la estrategia socialdemócrata de administración del estado capitalista para combatir la violencia machista. Un feminismo institucional alejado de la realidad de millones de mujeres, es la contracara de un gobierno que tranza con la derecha, reproduce políticas securitarias contra migrantes, y golpean a la clase trabajadora.
La doble moral y la decadencia de sus críticos
En una reciente entrevista, Cristian Valdivieso hablaba de que el mayor golpe al gobierno era sobre todo moral. El Mercurio, portavoz del empresariado y el conservadurismo chileno salió de lleno a nivelar la cancha, contra un gobierno que supuestamente se apoyaba en una superioridad moral feminista.
Lo cierto es que los críticos de derecha hablan de la crisis moral, para defender su doble moral, la que permitió al padre de Macaya presidente de la UDI pudiera abusar de menores, que encubre los casos de violación en las iglesias, la relación de políticos de derecha con el abuso infantil como lo demostraba el caso de Jovino Novoa, las fiestas de Hermosilla y los inumerables crímenes de la dictura que fueron a costa de violencia sexual ¿Una cancha difícil de nivel o no? Son hipócritas defensores de un régimen político que es anti mujeres y anti clase trabajadora, por eso este escándalo lo hacen con calculadora en mano para sacar un rédito electoral a la par que defienden su moral decadente.
No es un invento nuestro, la editorial de El mercurio del 23 de octubre después de analizar el caso Monsalve saca una insólita conclusión que llego a millones de personas “Las pulsiones de la naturaleza humana están siempre al acecho, y como algunas de ellas no conversan bien con los estándares morales a los que aspiramos, quienes actúan en política deberían internalizarlo y no adjudicarse superioridades que seguramente no estarán en condiciones de cumplir”. Conclusión, la denuncia que hace una trabajadora por violación demuestra que es mejor no hablar de estas problemáticas, porque “las pulsiones naturales están en cualquier lado” ¡Justifican el abuso por que les es beneficioso, esta es la moral de los explotadores!
La derecha y sus partidos se preguntan por los pronunciamientos del movimiento de mujeres frente al caso, pero lo hacen hipócritamente, para marcar un punto político contra el gobierno porque jamás les ha interesado las demandas de las mujeres, son opositores. Si hoy esto es tema de debate, ha sido producto de la lucha de miles de mujeres, que en los últimos años han vuelto instalar el tema, movimiento que la misma derecha reprimió.
Su crisis por arriba aumenta nuestro repudio
Pero mientras en los medios oficiales se hace festín sobre las consecuencias del caso, los debates en el palacio de gobierno y los réditos electorales de lado y lado la crisis política del régimen sigue sin resolverse. El desafuero de Vivanco, la acusación constitucional de Muñoz, un descabezamiento de la Corte Suprema.
Todos los partidos del régimen proponen aumento de financiamiento a las fuerzas represivas y resulta que la PDI fue la primera involucrada en el caso Hermosilla y ahora también en el caso Monsalve. Son sus instituciones.
En una reciente encuesta realizada por Voxkom muestra que el 79% de las personas sigue desconfiando del congreso, el poder judicial y los gremios empresariales siguen dentro de los más cuestionados. Entre las empresas que generan más rechazo siguen encontrándose las AFP y las empresas de energía, que este mes volvieron a registrar alzas en los precios de la luz cuestión que golpea los bolsillos de las familias trabajadoras.
¿Estamos peor? Era algo que los partidos del régimen concluían a 5 años de la revuelta, pero no fue la revuelta, son los empresarios los culpables y el fracaso de sus pactos como lo fue el del 15 de noviembre. Las condiciones de vida no mejoran, por el contrario, siguen falleciendo trabajadores en lugares de trabajo por que la única seguridad que le interesa a los empresarios es la de su negocio, mientras tres trabajadores han fallecido en faenas mineras que reponen la necesidad de defender nuestras condiciones de vida. A esto podemos sumarle la crisis en la educación donde dos jovenes del liceo 1 de niñas en Valparaíso cayeron de una gradería, una quedando inválida, producto de la precariedad en la infraestructura, sumado a la precariedad en la salud y las extenuantes jornadas de trabajo.
Para nadie es fácil llegar a fin de mes, y es peor si tienes un familiar enfermo, ¿Cuánto nos cuesta encontrar trabajo? y si lo tienes tienes una jornada con la que no puedes vivir. Día a día eso se acumula, y a la clase dominante se les agota el tiempo mientras el descontento por abajo crece.
Contra la violencia hacia las mujeres y por las demandas de la clase trabajadora: necesitamos nuestra propia alternativa
Eugenio Tironi en una reciente entrevista, como parte de muchos analistas que retratan el aumento del “malestar social”, menciona que el fracaso del proceso constitucional es el escenario propicio para un nuevo estallido social. El advierte a los partidos del régimen que tomen medidas y reformas para prevenirlo.
Desde nuestra vereda, advertimos a la clase trabajadora que frente a la crisis en las alturas y del régimen, sus intentos reaccionarios y conservadores para resolverla, y la re edición de la política de los consensos que quiere la ex concertación,y la gradualidad socialdemócrata del Frente Amplio y el Partido Comunista que lo único que ha hecho es abrirle camino a la derecha. Es urgente construir una izquierda que pelee por retomar cada una de las demandas, contra la violencia machista, en educación, salud, vivienda, con un programa para terminar con el chile de las y los capitalistas.
Este fin de semana son las elecciones municipales y desde PTR impulsamos candidaturas de trabajadores en Antofagasta e iniciamos la campaña de legalidad en Santiago y Valparaíso como un esfuerzo por amplificar estas ideas. Con el objetivo de formar una fuerza organizada en universidades, lugares de trabajo y barrios, y la necesidad de un frente de independencia de clase en Chile.
Que pelee por un programa anticapitalista para enfrentar al Chile de los capitalistas, día a día vemos como su régimen basado en la herencia de la dictadura se resquebraja aún más, las crisis políticas han ido en aumento, tal como hemos dicho en otros momentos es una crisis del régimen de conjunto que a pesar de los diversos momentos desde la rebelión la clase dominante no ha logrado cerrar, y cada vez se profundiza más. Sabemos que hay miles que ven estas situaciones, y les genera decepción, hastío e incluso incredulidad en la política. Pero es necesario señalar que si la política no la hace la clase trabajadora de la mano con los sectores populares, serán otros quienes hagan la política en su nombre.
Podrían comenzar a fortalecerse alternativas más de extrema derecha al estilo “Milei” en Chile, disfrazándose de “apolíticos” y usando demagógicamente el terminó “casta”, cuando lo único que buscan es fortalecer medidas autoritarias, disputando sentidos comunes en esa línea, que luego serán utilizadas en contra de la clase trabajadora y los sectores populares, pues también defienden férreamente el Chile de la AFP y las pensiones de hambre, de las ISAPRES y los perdonazos, del lucro educativo y las universidades empresa que permite a Cubillos obtener un sueldo de 17 millones.
Necesitamos una izquierda que se proponga enfrentar a los empresarios, para que ese descontento que todos los días se acumula lo podamos transformar en una verdadera revolución, terminando con este sistema que gobierno para una minoría y organizando la sociedad sobre nuevas bases, un socialismo desde abajo.
Alejandra Valderrama
Redacción La Izquierda Diario Chile. Valparaíso, Chile