Aun no hay iniciativa propuesta pero la presidencia del congreso de Nayarit aseguro que se discutirá la despenalización del aborto.
Joss Espinosa @Joss_font
Martes 2 de agosto de 2022
La presidenta del congreso local de Nayarit, Alba Cristal Espinoza Peña, aseguro que en el próximo periodo de sesiones se comenzará a discutir la despenalización del aborto. La diputada hizo referencia al fallo de la SCJN sobre la inconstitucionalidad de la penalización del aborto que marcó el asunto a nivel nacional, y que por ende es imprescindible tratarlo.
Esta “premura” llegó a finales del segundo periodo ordinario del primer año de la XXXIII legislatura. Por lo menos habrá que esperar al 18 de agosto que se instala el primer periodo ordinario del segundo año de la misma (eso si no se prorroga su inicio).
La presidenta del congreso local ha declarado que dicho organismo no tiene una postura sobre el aborto y que cada quien votará según su juicio; también recalcó que no se va a votar de forma fast track sino que se ira a un proceso con foros de discusión y debate donde “todas las voces serán escuchadas”, dejando claro que incluso los antiderechos (mal llamados provida), tendrán cabida en la discusión.
Esto responde a la presión de dichos grupos pues no había pasado ni una semana del fallo de la SCJN cuando la organización “cuidemos las dos vidas” convocaron a una movilización.
Situación jurídica del aborto en Nayarit
Actualmente el aborto en Nayarit está despenalizado bajo 4 causales marcadas den los artículos 338 y 339 del Código Penal local: por violación, cuando la continuidad del embarazo, cuando el embarazo pone en riesgo la vida de la mujer y su el aborto es imprudencial.
Actualmente las penas para quien se realice un aborto que están marcadas en el código penal de Nayarit son muy similares a las del Código Penal Federal en el cual los artículos en torno al aborto básicamente se mantienen intactos desde su publicación en 1931.
El Artículo 336 del CP de Nayarit estipula que las penas por abortar van de cuatro meses a un año de prisión y multa de cinco días de salario solo si se cumple con alguna de estas condicionantes:
I.- Que no tenga mala fama;
II.- Que haya logrado ocultar su embarazo;
III.- Que éste sea fruto de una unión ilegítima; y,
IV.- Que el aborto se efectúe dentro de los primeros cinco meses del embarazo.
De no ser así, las penas van de uno a tres años de prisión y una multa de hasta veinte días de salario.
Como mencionamos en esta nota “Desde el principio, las mujeres son condenadas a ser madres y se les castiga por atentar contra los únicos modelos familiares que acepta este sistema. Las penas disminuyen si se hace “en silencio”, dejando claro que el problema es moral.”
Las penas para el personal de salud que ayude a realizar el procedimiento son de igual manera de uno a tres años de prisión; si el aborto es realizado sin consentimiento las penas van de tres a seis años de prisión, si mediare violencia sería de seis a ocho años.
Añadido a esto, Nayarit fue parte de la oleada conservadora que, luego de la despenalización del aborto en la CDMX, se apresuraron a aprobar leyes que “protegen la vida desde la concepción”, desde 2009 aprobaron la modificación del artículo 7 en el que estipulan “Se reconoce, protege y garantiza el derecho a la vida de todo ser humano desde el momento de la fecundación natural o artificial y se le reputa como nacido para todos los efectos legales correspondientes, hasta su muerte natural.” Este tipo de leyes no son otra cosa más que eufemismos para criminalizar a las mujeres y personas gestantes que quieren decidir sobre sus cuerpos.
Embarazo adolescente y criminalización
La prohibición del aborto en Nayarit, no es menor, sobre todo tomando en cuenta que en dicha entidad el embarazo adolescente es altamente problemático. Nayarit es la sexta entidad con más embarazos adolescentes, en 2017 llegó al 18.3 %.
Por otro lado, cuando se señala la necesidad de la legalización del aborto, esto también implica cambios importantes en los derechos sexuales y reproductivos, que implican no solo el exceso al aborto como derecho, sino también la garantía de la salud de las mujeres que deciden continuar sus embarazos. Como ejemplo de esta situación, tenemos que Nayarit es la segunda entidad con mayor incidencia en muerte materna con 66.9 (por cada mil habitantes), solo por debajo de Chiapas que 68.5. Aunque no hay certeza de las cifras sobre las consecuencias del aborto clandestino se estima que este es la cuarta causa de muerte materna a nivel global.
Las cifras de mujeres presas por abortar también son inciertas, según cifras oficiales en 2020 registraron a dos mujeres presas en Nayarit por abortar, sin embargo, se sabe que hay mujeres que van presas bajo penas de homicidio en razón de parentesco, como es el caso de Melina, que tuvo un aborto espontáneo en la letrina de su casa, y fue sentenciada a 18 años de prisión bajo homicidio en razón de parentesco.
La poca certeza que hay por parte de las cifras oficiales han llevado a diversas organizaciones a investigar la criminalización del aborto, como ejemplo de esto, la organización Las Libres registraron de 2000 a 2017 que 4 mil 200 mujeres fueron criminalizadas por el delito de aborto, de las cuales 18 eran de Nayarit.
Vamos por una gran campaña por aborto legal en todo el país
Aun hace falta que se presente la iniciativa, no se sabe si la misma promovería solo la despenalización (es decir la modificación del código penal para que deje de criminalizarse) o se darán también modificaciones en las leyes de salud para que se reconozca como un derecho. Esto es importante porque, que este despenalizado no lo vuelve automáticamente un derecho, y las barreras para acceder al mismo siguen estando presentes aun en los Estados en los que esta despenalizado; como el caso de Oaxaca que hasta hace un año solo había dos hospitales en los que se garantizaba el acceso al aborto, o el caso de Veracruz en el que recientemente se denuncio que el personal de salud negó el derecho al aborto pese a estar despenalizado desde hace un año.
El Morena tiene 12 de los 30 diputados del congreso de Nayarit, tendrían que votar de conjunto y sumar a sus aliados para que la votación sea positiva sobre la despenalización del aborto. Pero la pregunta es si tenemos que apelar a la voluntad de los partidos para que nuestros derechos se garanticen, porque lo cierto es que, aunque el Morena ha tenido mayoría en congresos locales o incluso a nivel federal, la garantía de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y personas gestantes no han sido una prioridad.
Lo que se ha mostrado históricamente, y más recientemente el caso de Argentina, es precisamente la lucha en las calles la que podría arrancar nuestros derechos. De ahí que, desde Pan y Rosas estamos convencidas que se hace urgente que las organizaciones feministas, sociales, políticas, de DDHH y sindicales abracen una amplia campaña nacional por el derecho al aborto legal en todo el país.
La vida y salud de las mujeres no puede esperar a la voluntad de los congresos locales, urge la organización democrática para discutir una iniciativa a nivel nacional que, con la movilización combativa y en las calles garantice que sea ley.