A la fecha se contabilizan dos femicidios desde que se declara la emergencia nacional por el Covid-19, los datos nacionales contabilizan dos muertes por coronavirus, nosotras contamos también a las que nos faltan. Las mujeres necesitamos un plan de emergencia para enfrentar la crisis.
Lunes 6 de abril de 2020
Hoy se suma a uno más de los feminicidios ocurridos en Costa Rica, el segundo desde el inicio de la emergencia nacional a causa del coronavirus. A las mujeres nos están matando y el gobierno calla al respecto.
Alisson Tortós, una joven de 17 años, fue encontrada la mañana de este domingo 5 de abril sin vida a las orillas de un río en Pueblo Nuevo de San Lorenzo de San Ramón.
En Pueblo Nuevo de San Lorenzo se sintió la incertidumbre y la indignación ante la muerte de Alisson Tortós; ella y su familia tenían escasos 15 días de habitar la zona. Una joven de Pueblo Nuevo comentó a la Izquierda Diario: “Casi nadie los conocía, vinieron a vivir aquí poco antes del estado de emergencia, pero nos pareció normal porque muchas personas han llegado debido a la situación, aquí es más tranquilo”
En redes sociales, se culpa a la comunidad pues hay quienes afirman que la joven gritó y nadie le dio ayuda, no obstante habitantes de la zona se sienten sumamente ofendidos por la acusación que muchas personas ajenas al lugar han dicho sobre lo ocurrido.
Nissa Varela comentó a la Izquierda Diario: “En redes han dicho muchas cosas, pero esas personas que opinan y nos acusan no son parte de la comunidad, no nos conocen y ni siquiera sabían que existíamos, no saben la logística comunal ni cómo funciona el lugar. Nos están dando a conocer cómo donde mataron a una muchacha que gritó y nadie hizo nada”. Pero en realidad fueron las mismas personas de la comunidad quienes desde tempranas horas se organizaron para ayudar a la familia con la búsqueda de la joven. Aunque no les conocieran mucho la solidaridad se hizo sentir de manera inmediata.
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La muerte de mujeres es un virus real al cual ninguna entidad del gobierno le busca cura. La emergencia sanitaria mundial hace, de manera más evidente, que las mujeres no somos prioridad. A las mujeres nos siguen matando, el movimiento de mujeres no puede guardar cuarentena, debemos continuar utilizando todos los recursos a nuestra disposición en la lucha contra el capitalismo patriarcal que perpetúa la violencia hacia las mujeres, y esta perspectiva solo se puede llevar adelante con completa independencia del gobierno.
¡Desde Pan y Rosas exigimos justicia por Alisson!¡Ni una Menos! Extendemos toda nuestra solidaridad para su familia en este momento! Es necesario que se garantice refugios seguros para todas las mujeres que lo necesiten para pasar la actual cuarentena, ejemplos de esta política ya se empiezan a ver en el mundo.
Debemos tener un mejor rastro de cuál es la situación de las mujeres en Costa Rica y la región, situación que los medios tradicionales difícilmente reflejan durante la emergencia, es necesario que se escuchen las voces de las mujeres trabajadoras para hacer sentir nuestras demandas.
