Otra vez, miles de mujeres salen a las calles polacas en un nuevo “lunes negro” contra la prohibición del aborto. El pasado 3 de octubre, miles de mujeres en huelga inundaron las calles de numerosas ciudades de Polonia.
Lunes 24 de octubre de 2016 11:38
Nuevamente, las principales ciudades polacas son escenario de masivas protestas de mujeres contra la posibilidad de que se restrinja la ley del aborto en Polonia, a partir de una propuesta legislativa de prohibirlo totalmente.
Esta nueva jornada de protestas tiene lugar después de que el pasado tres de octubre alrededor de 100.000 mujeres polacas vestidas de negro saliesen a la calle para protestar contra una iniciativa parlamentaria para la prohibición casi total del aborto y penas de cárcel para aquellas que abortasen y el equipo médico.
La iniciativa, bautizada como “lunes negro”, logró que tres días después del pasado 3 de octubre el Parlamento polaco acabase desestimando la propuesta de prohibir el aborto, a pesar de haberla admitido a trámite tras una iniciativa popular que reunió medio millón de firmas.
En ese momento, el detonante de la protesta se produjo el pasado 23 de septiembre, cuando el Parlamento polaco admitió a trámite una iniciativa popular que propone prohibir la interrupción voluntaria del embarazo, penas de cárcel para las mujeres que aborten, mayores castigos para los médicos que realicen los abortos e incluso la apertura de investigación en los casos de aborto natural.
El partido Ley y Justicia, que controla la cámara baja tras su mayoría absoluta en las pasadas generales, dijo entonces que rechazaba la prohibición del aborto y las penas de cárcel, aunque se mostró partidario de limitar la actual ley para, por ejemplo, evitar la interrupción del embarazo en los supuestos en que se detecte que el feto sufre síndrome de Down.
El ideario de este partido se identifica con los valores de la iglesia Católica, donde también se aplaude cualquier avance para endurecer la ley del aborto de 1993, que sólo permite abortar en caso de malformación del feto, grave riesgo para la vida de la madre y embarazo por violación.
El líder de Ley y Justicia, Jaroslaw Kaczynski, defendía hace diez días endurecer la ley del aborto para impedirlo en los supuestos de grave malformación del feto, incluso cuando se sabe que el bebé morirá al nacer, "de manera que el niño pueda ser bautizado, enterrado y tener un nombre".