En las últimas dos entregas disponibles acá y acá escribimos sobre las luchas obreras que surgieron en el México post Ayotzinapa. La clase trabajadora ha comenzado a luchar por derecho a la libre sindicalización e independiente y libre; por mejorar sus condiciones de vida, contra los despidos y por echar a la burocracia sindical.
Martes 27 de octubre de 2015
En San Quintín, una rebelión jornalera conmovió al país completo; en la aereoespacial Thiump Group los trabajadores ocuparon un cluster; en las maquilas EATON, Foxconn, en la Scientific Atlanta en Juárez, hay peleas por libre sindicalización; en la rama del acero en Acerol Mittal hay luchas contra los despidos; en la industria Modelo cientos de trabajadores resisten a la militarización de la empresa para echar a los charros de la CTM como en la automotriz en Honda y Mazda, en las autopartistas como la Delphi en Zacatecas y entre las trabajadoras del hogar que son ejemplos de que en México la clase trabajadora comienza a organizarse.
La maquila ¿vamos a un ascenso obrero en la frontera?
Mientras escribimos estas líneas, dos nuevos conflictos estallaron en la maquila. En Lexmark de Juárez, trabajadores realizaron una protesta a las afueras de la empresa exigiendo un trato más justo y salario digno. La fábrica está ubicada en Boulevard Independencia, al sur de la ciudad. Los trabajadores también exigen derecho de sindicalización libre por fuera de la CTM. La Lexmark es una trasnacional imperialista fundada por IBM. Emplea a más de 2 mil trabajadores en su sede en Juárez. Los salarios por día rondan en un poco más de 100 pesos y no existe derecho de antigüedad laboral.
En la Commscope 175 trabajadores se organizaron para presentarse en la Junta de Conciliación y Arbitraje para formalizar un sindicato independiente de la CTM. La empresa al enterarse obligó a los trabajadores a desistirse de formar el sindicato y despidió a todos los participantes. Desde el despido los trabajadores mantienen un plantón a las afueras de la fábrica exigiendo su reinstalación y el derecho de formar el sindicato. La Commscope produce fibra óptica y es considerada empresa líder en la producción de cableado para la Apple y emplea a más de 2 mil tan sólo en Juárez. La mayoría de las trabajadoras mujeres también denunciaron acoso sexual dentro de la empresa.
Con estos dos nuevos conflictos en grandes trasnacionales de la maquila en Juárez suman a la lucha de EATON, Foxconn (en dos plantas de la misma trasnacional), la Scientific Atlanta: 6 conflictos en menos de dos meses. Es válido pensar si estos conflictos son un síntoma de algo mayor en un movimiento obrero que viene de muy atrás, de duros golpes recibidos por parte de la patronal, con la complicidad del estado y el charrismo. Veremos en el próximo periodo un ascenso de la lucha de los trabajadores maquiladores en Juárez?
La emblemática lucha de Sandak
La lucha que sostienen las valerosas trabajadoras de Sandak es emblemática. Desde 2004 se mantienen en lucha luego de que la trasnacional Bata, con el aval del gobierno de Tlaxcala, despidiera a más de 100 familias al declarar el cierre de la empresa. Las valerosas trabajadoras de Sandak se mantienen en huelga para exigir la apertura de su centro de trabajo.
Esta lucha está a contracorriente de la situación adversa que ha enfrentado el movimiento obrero. Su huelga no ha sido reconocida por la Junta de Conciliación y Arbitraje, lo que demuestra de qué lado están las leyes burguesas. Los obreros y obreras han detenido diversas embestidas del gobernador y la patronal para saquear la empresa y dejar vacía la fábrica. Gustavo Labastida, Secretario General del Sindicato Único de Trabajadores de Calzado Sandak se encuentra preso por supuestos “secuestros” de la empresa y el desde hace más de dos meses. La empresa asesinó –mediante golpeadores - a María Luisa Hernández luego de que en un intento de saquear la fábrica las compañeras detuvieron el desalojo. A pesar de la ofensiva contra su heroica lucha, el movimiento se mantiene firme peleando por la reapertura de su fuente de trabajo, a pesar de las maniobras y trampas que pretenden llevarlas a la derrota.
Esta lucha últimamente ha resurgido con nuevos bríos. En estas semanas se organizó un Comité de Solidaridad con los Trabajadores del SUTCS que impulsamos desde el MTS y en el que participan distintas organizaciones. Recientemente se ha desarrollado diversas actividades que han resonado en otros países y han sumado solidaridad a la causa de las valerosas trabajadoras de Sandak.
La CTM: sindicatos de protección patronal
El reclamo que unifica a los de la EATON, Foxcoon, Scientific Atlanta, la Commscope, la Lexmarc, la Thtiump Group, la lucha en la Modelo y a Delphi de Zacatecas, la Honda, la Mazda es la urgencia y la necesidad de echar a los charros de la CTM. En estos conflictos el elemento central es la demanda de derecho a la libre sindicalización y echar a la CTM de las empresas.
La CTM en su reciente congreso, en XVI, ratificó a Gamboa Pascoe como dirigente de este organismo de protección laboral. Este charro multimillonario, un personaje obscuro y ligado a las grandes patronales industriales cumplirá ni más ni menos que 100 años cuando finalice su mandato. La CTM junto a la CROC y a la CROM son organismos de protección laboral que tienen la mayoría de contratos en las ramas industriales. Tanto la CTM, como la CROC y la CROM son organizaciones que firman contratos de miseria, con jornadas laborales extenuantes, en la semiesclavitud, sin ningún derecho de organización en las empresas.
La CTM tiene grupos de golpeadores profesionales para reprimir a los trabajadores que quieren organizarse. La mayoría del proletariado industrial en cuanto comienza a trabajar ya está sometida a aceptar las condiciones de trabajo sin protestar. Como señala un estudio de Nexos, el 70% de los trabajadores industriales no conocen a los dirigentes de su sindicato, no conocen su contrato colectivo e ignoran la Ley Federal del Trabajo. Esto es producto del control patronal de la CTM dentro del movimiento obrero.
Una de las tareas del movimiento obrero es recuperar las organizaciones sindicales para la lucha, y que las mismas integren al conjunto de los trabajadores conquistando plenos derechos laborales y sindicales. Para ello, es fundamental echar a los charros de la CTM, la CROC y la CROM de los sindicatos. Para ello es necesario conseguir la independencia política de las organizaciones obreras respecto del estado.
Como se ha mostrado en los conflictos que hemos analizados los trabajadores están luchando por el derecho a la libre sindicalización. Urge la construcción de un sindicalismo combativo, independiente, democrático y clasista para echar a los charros. Aunque existen centrales que se reivindican democráticas e independientes como la UNT o la NCT, es una realidad que no han levantado ninguna política combativa que arme políticamente a los millones de trabajadores que están bajo el control del charrismo oficialista o sin sindicatos.
Para plantearse como una alternativa clasista y combativa la NCT junto a ello debería impulsar una solidaridad efectiva en los conflictos de trabajadores en el México post Ayotzinapa bajo una estrategia que no deposite sus esperanzas en los mecanismos legales de las autoridades laborales, apuntando a enfrentar al régimen de la alternancia y sus instituciones, Es decir, una estrategia combativa y proponer una política para el triunfo de las luchas que, con el apoyo real basado en la coordinación de las luchas logre la más amplia solidaridad de clase de los distintos batallones del movimiento obrero que sufren los planes de miseria y de control charril.
Los trabajadores requieren de la máxima unidad y coordinación de las luchas, tras una política de independencia de clase que confíe solo en las fuerzas de la clase obrera y sus aliados del campo y la ciudad. Rehuyendo de cualquier política que los lleve a la cola de direcciones o sectores “democráticos” del régimen, que sujeten a los trabajadores a intereses distintos a los suyos.
De lo contrario, todo proyecto que se planee ser una alternativa a los aparatos burocráticos tradicionales, acabará por volverse una mediación que retrase el desarrollo de las tendencias a la combatividad y la auto-organización independiente.