La calificadora de riesgo Moody’s ligada al sector más beneficiado por las medidas económicas macristas, el financiero, estimó que la Argentina crecerá un 3 % en 2017 y un 3,5 % en 2018.
Sábado 30 de septiembre de 2017
Este viernes la calificadora estadounidense Moody’s público su informe anual sobre Argentina, donde asegura que la economía crecerá 3% este año y un 3,5% en 2018.
Además, desde la calificadora sostuvieron que ese "mayor crecimiento del PBI debería respaldar una consolidación fiscal". Este anuncio de Moody’s empalma con las “buenas noticias” económicas que sacaron a relucir desde el Gobierno en los últimos días.
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En el informe publicado por Moody’s se puede ver un especial hincapié en resaltar “los principales factores que sustentan la perspectiva positiva del país".
Dentro de ellos se destaca que “las inversiones públicas y privadas deberían reafirmar el crecimiento, y las iniciativas que se espera que el gobierno introduzca después de las elecciones de medio término de octubre ayudarán a reducir el déficit fiscal en, al menos, un 1% del PBI en 2018.”
Uno de los autores del informe, Gabriel Torres (senior credit officer de Moody’s) sostuvo: “aunque el crecimiento económico de Argentina ha mostrado cierta volatilidad, su economía es más grande y más rica que otros países con calificaciones similares".
Y agregó: "El mayor crecimiento debería respaldar una reducción del déficit fiscal, que superará 6% del PBI este año. La relación deuda/PBI del gobierno llegará al 53% este año y al 56% el próximo año". Para el analista de Moody’s dado que la mitad de la deuda del gobierno de Argentina es con otras entidades del sector público, "se reduce el riesgo de refinanciamiento".
A pesar de esto, el informe advirtió sobre un posible aumento del déficit fiscal y dijo al respecto: "la proporción de deuda en manos del sector privado es cada vez mayor, lo cual aumenta la vulnerabilidad fiscal del país. Otras debilidades crediticias incluyen inflación alta y una gran proporción de deuda en moneda extranjera, que expone al balance del gobierno al riesgo cambiario".
Cambiemos con el visto bueno de la banca
Las previsiones positivas sobre el crecimiento de la actividad económica del país por parte de Moody’s no son nuevas y muestran una continuidad relacionada al gobierno de Cambiemos. Ya en marzo de este año habían optado por mejorar la calificación de riesgo a B3 "positiva" desde "estable".
En aquel momento argumentaron que: "Dicho cambio reflejó la perspectiva de la agencia de calificación relacionado a que la economía comenzará a presentar un crecimiento positivo, en parte después de implementar las nuevas políticas de reducción del déficit".
No es difícil comprender que el sector financiero ha sido uno de los más beneficiados con las medidas económicas de Cambiemos, tanto como el campo y los empresarios contratistas amigos.
Principalmente a través de las medidas de política monetarias utilizadas por el Banco Central con el objetivo de reducir la inflación, de tasas altas garantizando a través de la venta de Lebacs una inversión atractiva y segura.
Actualmente la tasa de política monetaria se encuentra en un 26,5 % (a 28 días), sigue siendo contractiva para la economía mientras permite la continuidad de la bicicleta financiera a la cual apuestan los bancos y los inversores. Hace pocos días incluso han anunciado la vuelta de los bancos de inversión a la Argentina que seguramente irán acompañados de incentivos y exenciones para el sector financiero.
Sin embargo, para el sector de trabajadores y los más vulnerables el impacto de las medidas de Cambiemos no fue tan satisfactorio como para los bancos. El empleo formal mejoró en julio apenas un 1,1 %, mientras la desocupación en el segundo trimestre del año se mantiene en un 8,7 % alcanzando a unos 1,7 millones de trabajadores. Por el lado del bolsillo los salarios no recuperan el poder adquisitivo perdido desde diciembre de 2015; y la deuda externa brutagubernamental se incrementó U$S 33 mil millones en un año.
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