El magisterio michoacano continúa en paro debido a que el gobierno de Silvano Aureoles no ha cumplido sus demandas: el pago inmediato y total de sueldos y bonos que les corresponden.
Lunes 28 de enero de 2019
Los maestros de la sección XVIII de Michoacán continúan en paro indefinido y con bloqueos a las vías del tren en ese estado, que iniciaron el 14 de enero. Con ello, denuncian que el gobernador de la entidad, Silvano Aureoles, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), no ha dado los pagos debidos a los docentes.
Maestros denuncian que no se les ha depositado el dinero que les corresponde por la primera quincena de enero ni los bonos de fin de año.
Esto ha detonado una situación en la que el magisterio michoacano ha salido a movilizarse, ya que es toda una injusticia que no se reciba el sueldo debido por un periodo de trabajo, y más en un momento tan difícil como lo es la primera mitad de enero.
Si bien las autoridades han respondido que harán los pagos correspondientes, éstas no han sido lo suficientemente expeditas en hacerlo, además de que pretenden depositar los recursos de forma parcial y no total como tendría que ser.
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Para que las demandas de los maestros puedan cumplirse, es necesaria la más amplia solidaridad y unidad entre las luchas, como en el 2018, cuando los mineros salieron en defensa de los docentes por la represión del gobierno michoacano, en una lucha donde también se estaba exigiendo el pago de salarios atrasados.
Si lo tomamos como ejemplo, la lección es clara, se requiere nuevamente de esa hermandad de clase así como la de todos los sindicatos que se reclaman democráticos para que esta lucha no quede aislada y triunfe.
La fuerza del conjunto de la clase trabajadora es algo a lo que los patrones y el Estado le temen, porque saben que si esto ocurre serán doblegados por su potencial combativo.
Hacemos un llamado a la Nueva Central de Trabajadores (NCT) y a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) para que salgan a movilizarse a favor del magisterio michoacano, al igual que los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en otros estados, especialmente en los estados donde es más fuerte como Oaxaca, Chiapas y Guerrero. Su papel al rodear de solidaridad la lucha del magisterio michoacano puede ser fundamental para su triunfo.
Junto con ello, sería un gran paso tender lazos de unidad con el poderoso movimiento obrero en Matamoros, Tamaulipas, donde trabajadores de más de 40 maquiladoras se encuentran peleando, al igual que los maestros, por la defensa de salarios y bonos que por derecho les corresponden.
De cara a los intentos del gobierno federal por restar legitimidad a este movimiento, es indispensable salir codo a codo con el magisterio combativo al grito de "¡Ni una lucha aislada más!" y en repudio a cualquier intento de criminalizar la lucha de las y los maestros michoacanos.
