8N Avanza la unidad. Paro y marcha de todo Salud con residentes y concurrentes: “No están ellos y el sistema se cae”

Residentes y concurrentes de la salud pública de la Ciudad de la Ciudad de Buenos Aires entraron en su octava semana de lucha por salario y condiciones de trabajo. Este martes a aprar y vuelven a movilizar. En esta ocasión se suman la mayoría de los gremios de salud de los trabajadores de planta, médicos, no médicos, enfermeros, administrativos, toda la comunidad hospitalaria. La lucha de la Asamblea de Trabajadores Residentes y Concurrentes y la solidaridad que impacto a todo el personal de salud le impuso el paro y movilización al resto de los sindicatos que tuvieron que convocar para mañana martes, como AMM, Federación de Profesionales, Sutecba, UPCN y ATE, entre otros.

Así empezaba la movilización de los trabajadores de la Salud alrededor de las 9 de la mañana. pic.twitter.com/d52ngz5Crp

— La Izquierda Diario (@izquierdadiario) November 8, 2022

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La solidaridad se mezcla con una necesidad de unidad en el reclamo y la pelea de toda la comunidad que sostiene el hospital público. Y no solo de la Ciudad de Buenos Aires, sino incluso de todo el país. Mientras estamos realizando esta nota nos llega la noticia que desde la provincia de Bs. As. 150 residencias de 50 hospitales se suman al paro y a la movilización de este martes. Como decíamos la semana pasada, la marea blanca se está transformando en un tsunami.

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También se sumarán los trabajadores del hospital nacional de niños Garrahan que vienen peleando por salario, aunque en este caso el reclamo es al gobierno nacional y a su ministra de salud Vizzotti.

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En la previa al paro, mientras se realizaban asambleas comunes en los hospitales desde la Izquierda Diario fuimos a buscar la opinión del personal de planta sobre el reclamo y lucha de los residentes y concurrentes. La respuesta fue categórica “Peor que esclavos, mientras sin ellos no se sostiene el hospital” nos decían.

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“Gracias a los jóvenes hoy se está visibilizando la situación que esta ocurriendo adentro de los hospitales” en clara alusión de una realidad que trascienden los salarios debajo de la línea de pobreza que sufren los residentes o los nulos sueldos de los concurrentes, porque la realidad de salario de pobreza es de todo el personal de salud. Como nos decía una médica neonatóloga “Mi salario básico como médica es de 18.000” ya que el resto del salario son bonificaciones o ítems no remunerativos.

“Nos obligan a trabajar en 20 trabajos al mismo tiempo” nos decía otra médica, “todos tenemos multiempleo” nos decía otro. La realidad recorre a residentes, concurrentes, médicos, enfermeros y camilleros. La comunidad hospitalaria debe unirse en un mismo reclamo, sale de charlar con los protagonistas que sostienen la salud pública, los mismos que dieron todo en pandemia y hoy son tratados como descartables.

“Es una lucha legitima porque es por una verdadera presión de las bases” reivindicando la pelea que hasta hoy no promovieron las conducciones sindicales. Nos agregaban “Es la primera vez en años que nos juntamos” nos decían mientras agregaban la importancia de la lucha de residentes y concurrentes “Creo que a partir de lo que iniciaron ellos se han unido cuatro gremios. Nunca había ocurrido” una muestra mas que clara de que la lucha y persistencia de los jóvenes arrastro simpatía y despertó a la marea blanca. Las paritarias a la baja firmada por los gremios y esta pelea abrió el camino a una lucha común.

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“Consolidar esta unidad que tenemos. Me emociona que pase esto” nos decía una medica de años de hospital. El camino de una lucha común por salario y condiciones dignas es y debe ser del conjunto de la comunidad hospitalaria. Las asambleas comunes de todo el personal es el camino y que por una vez los paritarios que negocien sean en representación de todos los gremios, elegidos por las bases y donde sea en asambleas los mismos trabajadores los que decidan.

La lucha de residentes y concurrentes y su método asambleario despertó a toda la marea blanca y comenzó a transformarse en tsunami. Ese es el camino.